𝐋𝐚 𝐇𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐃𝐞𝐭𝐫𝐚́𝐬 𝐃𝐞𝐥 𝐕𝐚𝐬𝐚𝐥𝐥𝐨.|| [Concluida].

𝐑𝐞𝐜𝐮𝐞𝐫𝐝𝐨𝐬.

La mente de Druella vagaba, y pronto encontró un lugar que adoraba, un espacio tiempo, que aunque siempre lo negara era simplemente lo que ella más amaba.

  El recuerdo de su amado invadió su ya fragmentado corazón, tratando de volver a unirlo. Y entonces recordó, recordó aquel cálido sentimiento, recordó la felicidad, recordó sus ojos, sus labios, simplemente lo recordó.

La primera vez que lo vio...

  Era de noche, una noche oscura y brillante a la vez, su padre la había llevado a una elegante cena con las familias más prestigiosas de la comunidad mágica, algo que le resultaba lindo y tedioso a la vez.

——Druella, cariño, ven te presentaré a la familia Crouch. —— su padre era alguien muy elegante pero a la vez muy amoroso, algo que hacía que Druella nunca le desobedeciera.

——¡Ya voy papá!—— la pequeña Druella de a penas 5 años corría con entusiasmo hacia su padre mientras reía de forma dulce.

——Mira querida, Ellos son el señor Bartemius Crouch y ella es su esposa Emily, y el pequeño es Barty Jr.

  Druella miró fijamente a cada uno, le parecía una familia de mucho porte y distinción. Sin embargo quien había llamado su atención era Barty, le parecía un muchacho bastante serio, algo muy raro para alguien de esa edad. Sonrió y esa fue la primera sonrisa que Barty le había sacado.

...

  De nuevo volvió en si, pero una vez piso nuevamente la realidad descubrió lo incómodo que se sentía salir de aquel lugar en el que podía ser feliz, y otra vez se sumergió en el abismo de los recuerdos.

La forma en la que sucedió su matrimonio.

  Druella tenía que casarse, debido a unos errores cometidos por parte de su padre, dejando como única salida un matrimonio.

  Los candidatos para ello eran algo raros, anticuados y con ninguno podía mantener una conversación de más de tres segundos.

——Druella, ella es Andromeda Black, te llevará donde su primo para que puedas conocerlo.

  A este grado Druella no podía reclamar nada y simplemente se limitaba a obedecer, siempre había sido una niña con honor, ella conocía su deber y lo cumplía.

——Druella, el es mi primo, Sirius Black.

  El muchacho le había agradado, era muy buena persona, pero no se veía casada con el, ninguno de los dos estarían de acuerdo. Parecía que las opciones se acababan y ella sólo quería estar con su niño serio, su loco favorito, SU BARTY, pero según lo dicho por su padre, él ya estaba comprometido con alguien de su edad.

——¿Cómo te fue con el joven Black?

——Es un chico agradable.

——Si no te parece, tiene un hermano, se llama Regulus podría agendar un encuen...

——No hace falta papá. ——Su voz sonaba cansada, apagada, parecía que esto de buscar un esposo le afectaba bastante, suspiró. ——¿Puedo ver a Barty?

——Druella, entiende que él pronto se va a casar.

——Por favor, sólo quiero verlo, es mi amigo.

——Esta bien Druella, te daré permiso, pero promete que usaras la red flu, no quiero que intentes convivir con muggles otra vez.

  El atardecer se hizo presente, Druella entró a un bar parecido al caldero chorreante, uso la red flu y apareció en la chimenea de la familia Crouch.