Ad Originem (Volumen 2)

Ad Originem Capítulo 266 - Espada de Acerantium Aurum

-Espada de Acerantium Aurum-

     Según la Olímpica Lady Atenea terminó de despedirse de todos, Heracles se acercó a Arin.

- Hermanito, le diré a Ibeli y Amia que estás bien, cuenta con ello, y dentro de seis meses, si no surge ningún improvisto que me lo impida, vendré aquí a recogerte.
Aseguró Heracles, que le dio un toquecito a Arin en la espalda y sin querer le desplazó de seis a siete metros.

- Genial Hermano, entonces esperaré a que vuelvas... ¡Oh! Ahora que dices lo de Ibeli y Amia, casi lo olvido... ¿Tiene eso, Maestra Euríale?
Preguntó Arin, refiriéndose a los Enertals.

- Ssí, claro. ¡Sssh...! Tengo para ti un Anillo de Esspacio con los Enertalsss acordadosss ¡Sssh...! Inclusso pusse 2 Enertalsss Exximiosss para tus Hermanos Mayoresss ¡Sssh...! y en otro te he puessto la runa que llevabasss colgada al cuello y tu Uniforme y Traje de Combate. ¡Sssh...! Aunque ambosss esstán... ¡Sssh...! y aquí tengo también tu Anillo de Esspacio, niña. ¡Sssh...!
Informó la Maestra Euríale, tirándole a Arin dos 'Anillos de Espacio' y a Al-Sabbah Suer el suyo.

Pues ella se los requisó cuando los venció y obviamente ya no había ningún motivo para no devolvérselos y en cambio, sí tenía motivos para dárselos de vuelta.

- ¡Oh! Qué bien. Ya era hora de poder quitarme estos harapos.
Comentó Al-Sabbah Suer, recordando que entre otras muchas cosas tenía ropa dentro del anillo y fue rápidamente dentro de la residencia para ponerse otra cosa.

- Gracias Maestra Euríale por pensar también en mis Hermanos Mayores...
Agradeció Arin, echándole un vistazo rápido al Anillo de Espacio, viendo que dentro estaban su Runa Etérica y su pobre Traje de Combate "Kin" que al igual que su Uniforme de Combate, estaba totalmente destrozado y según terminó de verlo, le tiró a Heracles el otro y le dijo:
... Ese Anillo de Espacio tiene 500 Enertals además de los 2 Enertals Eximios que os ha puesto la Maestra Euríale para vosotros. De los 500, 100 son para la Hermana Mayor Atenea y otros 100 son para ti. El resto dáselos a Ibeli y Amia, para que los repartan entre mis amigos y cuando se los des, diles que os den varios frascos de mi Elixir de Cultivo Lunar para vosotros. Os aseguro que mi elixir no os decepcionará.

- Genial, se los daré a las chicas y nos quedaremos unos pocos. Sin duda, entre los Enertals y las Frutas Divinas y bueno, tu Elixir de Cultivo Lunar que seguro que será magnífico, lo mismo en seis meses ya estoy en las Etapas Medias del Cuarto Orden Espiritual jeje... Gracias Hermanito, la pena es que no tengo nada que poder darte yo a ti, pero la próxima vez que nos veamos, ten por seguro que yo también te haré un regalo. Te lo prometo.
Aseguró Heracles sonriente, el cual le dio otra palmadita en la espalda a Arin.

Aunque esta vez, Arin estuvo preparado y usó su Habilidad 'Coraza del Overlord', para que justo esa parte de la espalda se volviera tan dura como el acero.

Evitando así salir volando.

- No te preocupes hermano, no es necesario. El hecho de que hayáis venido a buscarme es más que suficiente. y además, si también vas a venir a buscarme cuando vaya a irme, eso para mí ya es un gran regalo.
Dijo Arin, que tras aguantar el golpecito de Heracles sin recibir daño, se sintió orgulloso de sí mismo.

- No digas tonterías, eso solo es mi obligación como hermano, son cosas diferentes. No hemos intercambiado ningún regalo cuando nos hicimos Hermanos Juramentados y tampoco te traje nada esta vez, soy un desastre... Y ya que tú has hecho tu regalo, te traeré algo muy bueno, ya veras. Espéralo con anisas.
Aseguró Heracles muy sonriente.