cliché ⌇ kookmin

S I X

Y si, tenía razón el rubio.

Se encontraba actualmente sentando en uno de los muebles de la fiesta con un poco de refresco en su vaso rojo, tan conocido para el por haberlos imaginados tanto en su mente, pero ahora mismo no podía pensar en eso, pues tenía a su lado a Hoseok y Taehyung besándose como si fuera el fin del mundo, claramente un poco ya pasados de copas.

Jimin, harto de la situación, decidió levantarse e ir a la cocina, un lugar menos bullicioso y calmado, en donde tal vez esperaba tener un poco de paz.

— ¡Juro que nunca más saldré con el maldito de Jeongguk! — Maldigo al aire de la sala vacía, teniendo su ceño fruncido y abriendo el refrigerador para entrar que podía comer.

— Maldecir es malo, nene. — Dijo una voz, haciendo al omega brincar del susto y volteando rápidamente con un pedazo de queso en su boca, tosiendo al instante al notar que se trataba del tonto alfa.

Luego de unos breves segundos, en donde pudo regular su respiración, observó al alfa con su notorio enojo, el cual no se encargaría ni de disimular.

— Eres un idiota, ¡me dejaste solo apenas llegamos! — Lo culpó, acercándose a él y empujando su pecho con su dedo índice, sin lograr moverle ni un pelo.

— ¿Acaso fui yo el que escapó? — Se inclinó un poco para que sus rostros quedaran cerca y a la misma altura, mostrando orgulloso aquella sonrisa de lado socarrona.

Park, aún más molesto por el comentario -lamentablemente cierto- del alfa, decidió escurrirse por un lado y escarpar de allí.

Falló.

El alfa era más rápido y lo tomó de la cintura, dejándolo contra la pared y su cuerpo, nuevamente en la misma posición de antes: inclinado con sus rostros a la misma altura, y bastantes cerca entre los mismos.

— Deja de escapar de mi, Park, se que puedes sentir lo mismo que yo. — Murmuró por la cercanía, con sus ojos medianamente cerrados, manteniendo su boca un poco abierta mientras observaba a los bicolores luceros del menor.

Se sentía contra la espada y la pared en aquel mismo instante.

— ¿S-Sentir lo mismo, Jeon? — Se hizo el desatendido, bufando mientras negaba con una sonrisa de claro nerviosismo. — Creo que bebiste mucho. — Y sin dejar que el alfa contestara, se agachó y escapó de su cuerpo, saliendo finalmente de la cocina y buscando a al menos algunos de sus amigos.

Observaba todo con un poco de desagrado y confusión, pocas veces estuvo en una fiesta, y en las que anteriormente estuvo no se comparaban a esta.

Pero... ¿cómo puede comparar una fiesta de chicos de quince con chicos de mayores de dieciocho?

Habían luces y una pista de baile improvisada, con un Dj en lo alto notándose más que la multitud, gente traviesa que subía al segundo piso tomados de las manos para hacer quién sabe qué y algunos casi que arrancándose la ropa entre ellos en los muebles y las esquinas más oscuras de el lugar.

Pero grata fue su sorpresa al mirar en una de esas esquinas a Namjoon y Yoongi, abriendo su boca bastante sorprendido. Al menos ellos tenían muy bien aclarados sus pensamientos.

— Nene. — Asustado nuevamente, se dio la vuelta creyendo que era Jeongguk, pero estaba completamente equivocado. Era un chico un poco más alto que el, claramente por su aroma era alfa y por su aliento era notable que estaba borracho... o incluso lo que viene luego de eso. — Menudo culo te cargas. — Soltó luego de un hipido y una sonrisa coqueta, intentando tocar al omega, muy asustado y completamente paralizado, pidiendo ayuda desde sus adentros.

Trataba de retroceder, caminar hacia algún lado, gritarle ¡o incluso plantarle una bofetada! Pero su cuerpo no reaccionaba, ¿acaso era esto lo que se sentía ser acosado por un borracho?

— A-Aléjate, por favor... — Pidió suplicante en un hilo de voz que seguramente no fue oído gracias a la música alta.

El rubio, con miedo y con lo que sabía que iba a pasar, para cuando el alfa apenas rozó las caderas del omega, estaba en el suelo desubicado, con un chico notablemente más grande que el encima suyo, propinándoles unos cuantos golpes.

¿Acaso será...?

— ¡Te dijo que lo dejaras! ¡¿No escuchas, maldito idiota?! — Para sus leves sospechas, si era la persona que creía que sería. Jeongguk estaba dándole sus merecidos puños al borracho, el cual gracias a su estado ni se inmutaba en detenerlo.

Mágicamente, aparecieron Hoseok y Namjoon para detener al enfadado alfa antes de que matara a alguien. Junto con Taehyung llegó igualmente Yoongi y ambos se colocaron frente a un Jimin en estado de shock, preguntándole varias cosas, como si le había hecho daño, si lo había tocado y cosas así, pero el omega tenía la mirada perdida en Jeongguk, el cual ya estaba entre los brazos de sus amigos, siendo calmado y tratando de relajar a su bestia.

Gracias a todo lo sucedido, el cuerpo de Jimin no pudo resistir más, colapsando y haciéndolo caer en sus rodillas, cerrando sus ojos y dejando que varias lagrimas cayesen de los mismos por el gran sus que se había llevado, el juraba que en su vida había sentido algo como eso.

Sus amigos, con notable preocupación, alzaron el cuerpo del omega, intentando calmarlo, mientras Hoseok empezaba a echar a todas las personas de su casa, ya había pasado mucho tiempo desde que empezó la fiesta, en menos de una hora era asegurado que el sol iniciaría a salir.

— T-Tenía mucho miedo... — Sollozó por lo bajo, ocultando su rostro hinchado por el llanto, mientras era arrullado por unos fuertes brazos y su cabeza se mantenía apoyada en un fornido pecho.

— Dime que no te hizo nada. — Preguntó Jeon con la voz más suave posible, quitando las manos del rostro de Park para dejarlo ver.

— ¡Esto es tu culpa, si no fuera por ti, no estaría en esta estúpida fiesta! — Reclamó, cegado por la furia y los sentimientos de aquel momento anteriormente pasado.

— Yo no te obligué, Jimin. —  Habló Jeon, intentando ocultar aquel gruñido que deseaba salir de su interior. — Deberías agradecerme, te salvé de que ese idiota te tocara.

El cerebro de Jimin conectó por fin luego de unos minutos, alzando su mirada que inconscientemente se encontraba baja y conectando sus ojos con los de Jeongguk.

Y, siendo guiado por su lobo, se puso de puntillas y dejó un suave beso en la mejilla de Jeon.

— Gracias, Jeongguk. — Murmuró con una sonrisa, esquivándolo y yéndose a la cocina nuevamente, dejando a un ruborizado alfa junto con sus amigos, los cuales estaban igual de tiesos que el antes nombrado.

— ¿Besó mi mejilla? — Quiso corroborar, dándose la vuelta y mirando a sus amigos con su boca abierta, evitando sonreír.

— Lo hizo, Jeon. — Se le acercó Yoongi, con una pequeña sonrisa, acariciando el hombro de su amigo.
[...]

Pasaron algunos minutos, donde los chicos se encargaban de limpiar la casa, terminando en al menos una hora, dejándolos a todos exhaustos sentados en los sillones.

Taehyung sonrió traviesamente, pues una idea habia llegado a su cabeza, Jimin, percatándose de ello, abrió sus ojos y lo miró con preocupación.

— Tae, tus ideas nunca son buenas. — Refunfuñó Jimin.

— ¡Oh, vamos, te aseguro que todos se van a divertir! — Aplaudió, levitándose de su sitio para ir a quien sabe dónde, regresando segundos después con una botella, sentándose en el suelo con la antes mencionada en el medio. — Verdad o reto, chicos.

"Mierda..."