—Entonces te gusta un chico, malcriado.
—Maldita bruja, sabía que no te tenía qué decir nada.
Bakugou después de todo lo que había pasado en aquella clase, realmente comenzó a sentirse mal de salud, la fiebre lo había atacado y las náuseas no pararon, aunque eso no era lo que le avergonzaba en demasía al menor, sino que su madre estaba ahí ya que cuando se encontraba delirando un poco gracias a la alta temperatura, la llamó varias veces, algo que no había pasado desde el jardín de niños.
Sin poder hacer nada contra su madre, Mitsuki lo llevó a casa para poder hablar y estar con él con tranquilidad y confianza, por lo que decidió tenerlo ahí por tres días, este siendo el último para el siguiente ya ir a la preparatoria de nuevo.
—Claro que tenías qué decirme, Katsuki. Viniendo de ti, me sorprende que incluso puedas tener sentimientos aparte del enojo.
La rubia soltó unas cuantas carcajadas, para después sentarse mejor en la cama de la habitación de su hijo, rodeando su cuerpo con los brazos, así dándole un tierno y fuerte abrazo al que el menor se resistió, pero terminó resignado, sabía que su madre era más terca que él.
—No es normal que tenga ese tipo de sentimientos.
Bakugou se encontraba ahora sumido entre los brazos de su madre, los cuales le daban aquel sentimiento de vulnerabilidad, en cualquier momento podría soltarse a llorar.
Era difícil aceptarlo.
Nunca había tenido sentimientos por alguien, no de esos que le hacían sentirse como se sentía, era asqueroso, pero se quedaba con ganas de más.
Le causaba cierta felicidad, pero también lo irritaba más de lo normal.
—¿Por qué no sería normal? tu padre y yo somos una pareja que se ama, ¿qué tiene eso de malo?
—Los dos somos chicos.
—Por dios, Katsuki.
Mitsuki tomó del rostro a su adorado hijo e hizo que la mirara, por primera vez, sintió que estaba lidiando con el pequeño katsuki de hace años que no se permitía llorar.
—Eres precioso e inteligente, sé que lo sabes, como también sé que lo que menos debe importarte es que ambos sean chicos. El amor llega de muchas maneras —acarició las mejillas de su hijo con delicadeza, dejando un pequeño beso en su frente— tus amigos y tus padres, jamás vamos a juzgarte por la persona que elijas para amar, porque esa es la decisión que te hará feliz a futuro.
El menor solamente atinaba a quedarse callado y escuchar atentamente a su madre, se sentía apoyado, sin ningún tipo de desprecio.
Realmente era muy afortunado, ¿qué habría hecho si su madre no hubiera aceptado su forma de amar?
Había visto casos en los que simplemente las personas eran rechazadas y vetadas de sus familias, sentía que podría ser algo doloroso.—Gracias... supongo.
—No tienes nada qué agradecer, soy tu madre, estoy para amarte y entenderte, tonto.
Pellizcó las rojizas mejillas y volvió a abrazalo con fuerza, sintiendo cómo aquel abrazo era correspondido por el rubio también, lo que le provocó una felicidad inmensa.
—Aunque siempre Inko y yo nos hacíamos la idea de que Izuku y tú estuvieran juntos, se veían muy tiernos de pequeños.
—Joder, no digas eso de nuevo o te vomitaré encima, bruja.

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Waist. { TODOBAKU }
FanfictionDonde Bakugou quiere que Todoroki deje de tomarle la cintura, pero en el proceso tiene que afrontar varios sentimientos(y algunos problemas). ••• Los personajes no me pertenecen. Historia corta sobre amor adolescente. #2 todobaku may-2021. #3 bakugo...