Capítulo 10: La segunda es la vencida

289 58 2
                                    

- No sé siento que arruiné todo Vera

- No Juli, basta de darle vueltas al asunto, levanta ese trasero y planifiquemos la cita perfecta. Pero tengo que hacerte una pregunta antes que me está matando ¿Qué pasa con Fran?

Juliana se quedó en silencio meditando su respuesta, realmente estaba confundida con todo lo que había pasado sólo en un par de días.

- No sé Vera, o sea si sé, pero no sé aghhh - soltó la morena dando un largo suspiro

- Nooo, bebé, ven acá le dijo su amiga para que se acurrucaran

- Fran fue muy importante para mí, la quise mucho pero creo que nunca sentí con ella lo que sentí con el beso de Valentina. ¿Sirve esa respuesta? dijo haciendo un puchero.

- Entonces tienes que jugártela con todo por la tóxica

- No le digas así, ya no es tóxica, es... perfecta.

- Ah bueno, te pegó fuerte el amor adolescente.

- La verdad es que sí, la extraño, casi ni me habla

- Entonces mueve ese trasero, vamos a idear un plan de perdón y conquista dijo Vera con actitud de agente secreto.

- ¿Te dejó plantada, te fue a pedir perdón y luego tu compañera de trabajo te ofreció sexo? Vaya, me quiero mudar a New York pero ¡YA! le decía Lauren a Valentina por teléfono.

- Jajaja idiota, no me estás escuchando, estoy insegura respecto a Juliana

- Bueno Vale, cometió un error, deja que lo arregle y no te pongas en la actitud de chica popular de la escuela parfavar.

- No es eso, estoy insegura

- ¿Por qué rubia?

- No viste a su ex, es... un monumento

- ¿Y tú no te has visto? Aparte de cuándo tan celosa Val

- No sé Laur, creo que me gusta demasiado. Me da a entender que le pasa lo mismo pero qué puedo pensar si voy a su casa y está con su ex.

- Deja que te explique, no te adelantes a nada y sobre todo no lo arruines por tóxica. Y tampoco esperes que se arrastre, no cometió un crimen.

- Te odio.

- Me amas y sabes que tengo razón.

Tanto Juliana como Valentina tenían la cabeza hecha un lío. Habían pasado 4 días desde su último encuentro, se habían mensajeado un poco pero Valentina no daba su brazo a torcer. La morena le escribió el viernes para preguntarle cómo iba su semana y aprovechó de pedirle que el sábado se lo dejara a ella porque le tenía una sorpresa.

Era viernes por la noche y la ojiazul estaba en su casa descansado luego de su jornada laboral, abrió un vino, sirvió unos quesos y se sentó en su sofá a ver una película. Tenía dos mensajes en WhatsApp sin responder:

Juls 🤡: Tengo muchas ganas de verte Val. Nos vemos mañana a las 13:00 hrs en Central Park. Que duermas bien. Un beso.

Marti 👱🏻‍♀️: ¿Qué haces hoy flaca?

Ay Valentina se dijo para sí misma. Decidió no responder, porque en realidad no sabía qué decirle a ninguna. Tiró su celular lejos, puso play a su película pero a los 10 minutos el cansancio la venció y se fue a los brazos de Morfeo.

Ya era medio día, Valentina decidió que quería caminar así que salió una hora antes de su departamento para llegar a la hora acordada. Estaba nerviosa, ansiosa, no sabía muy bien qué iban a hacer ni tampoco lo que iban a conversar pero sentía que debía bajar un poco la guardia.

A lo lejos Juliana vio que Valentina venía llegando con una sonrisa, su corazón se disparó y empezaron sus nervios.

- Hola enana dijo Valentina acercándose a saludar con un beso entre la mejilla y los labios.

- Hola Chernobyl respondió Juliana con una sonrisa de oreja a oreja. - ¿Preparada para hoy?

- Intrigada diría yo ¿a dónde vamos?

- Déjate sorprender rubia contestó guiñándole un ojo y arrastrándola para que la siguiera.

Juliana y Vera habían preparado la cita perfecta, hasta itinerario habían hecho para que a la morena no se le olvidara nada: Caminata por "The Pond" para mirar el lago, almuerzo al aire libre y luego esperar el atardecer en el puente de Brooklyn.

Llegaron a la primera parada, Valentina le contaba a Juliana que nunca había estado en ese extremo del Central Park, estaba maravillada por la combinación del verde con los edificios detrás.

- Me alegro que te guste dijo Juliana con una sonrisa

- Valentina yo en serio quiero volver a disculparme por lo del otro día, como te dije antes, sí fui una imbécil pero quiero volver a empezar

- Sí, fuiste una imbécil, pero ya está, es pasado.

- Pero tengo la sensación de que se rompió algo y me duele mucho - dijo mirándola a los ojos.

- A mí también me dolió lo que hiciste, sobre todo porque habíamos pasado días increíbles y creí ingenuamente que estábamos en la misma sintonía

- Estamos en la misma sintonía Val - respondió apresuradamente la morena.

- A mí me parece no Juliana, por más que me digas que no pas...

- Es que no pasa nada con Fran, Valentina ya te lo expliqué

- Déjame terminar, es tu ex, tienen una historia y no la puedo culpar por querer recuperarte y tampoco me quiero interponer en un drama de cliché lésbico, la verdad

- Valentina estás exagerando

- ¿No intentó volver contigo?

Juliana se quedó en silencio

- ¿Ves? Tranquila, dejemos lo que pasó en el pasado y ya. 

- Es que no me escuchas Val

- ¿Qué tengo que escuchar?

- Que no me había sentido así con nadie, que no había sentido todo lo que sentí contigo en ese beso, sí suena cursi y todo lo que quieras pero es cierto

Valentina la miró sorprendida, generalmente era ella quien más hablaba de sus sentimientos con la morena y no al revés.

- Sí, la cagué, pero quiero empezar desde cero, tú me contaste tu parte de la historia hace unos días cuando estuvimos almorzando acá en Central Park, ¿me dejas contarte la mía?

Valentina asintió en silencio.

- Cuando me gané la beca para estudiar en la escuela jamás pensé que me iba a topar con gente tan terrible como tú y tu grupito. Recuerdo perfecto el primer día: llegaste tarde, te presentaste con arrogancia, dijiste que eras la mejor seleccionada de Volley y que nadie podría superar tus notas, que no solo eras un rostro bonito - contó recordando aquellos días con una sonrisa.

- Me hiciste la vida imposible todos esos años pero nada de eso evitó que me enamorara de ti como una estúpida. No te estoy diciendo esto para que me perdones, de verdad, sabes que soy tímida y a veces cobarde, pero tenía esto atragantado desde el día en que me contaste que sentías lo mismo.

Juliana soltó un suspiro como diciendo "lo hice por fin"

- Y la verdad creo que nunca he dejado de estarlo - dijo en un tono más bajo

- Ni yo contestó con el mismo tono Valentina acercándose a Juliana para besarla con suavidad pero con necesidad. 

Pasaporte al destino (Juliantina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora