El chico de los cuervos.

Adiós mi primer amor.

Esta es la última, espero que les guste. Y muchísimas gracias por leer y llegar hasta aquí. 

Si tienen alguna pareja con Sakura que quieran que haga póngamelo en los comentarios.

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Después de escuchar aquella palabra que anunciaba una llamarada negra Shisui y Sakura se despegaron, los tres quisieron decir algo pero la expresión de dolor de Sasuke por la técnica puso a los tres en guardia.

No solo ellos lo hicieron, también los dos ancianos, el anciano había logrado semi esquivar el fuego cortándose solo el brazo.

- Sasuke es una técnica de sellado, no podemos escapar - dijo la chica resignada.

- Esa es la situación - dijo él, a la vez que se enderezaba y cerraba el ojo izquierdo - Si hay una forma de salir, con una técnica espacio- temporal.

La chica agrandó los ojos viendo ese ápice de esperanza - ¿E-Estas seguro?

- Así escapé de Danzo.

La chica iba a decir algo pero en ese momento unas bolas de tierra gigantes se aproximaron a ellos, mismas que fueron detenidas por lo que se podría describir como un brazo gigante de color verde, Shisui se había parado con casi cero fuerzas pero con la voluntad de salir de allí. 

-Yo los ayudaré - dijo Sakura poniéndose detrás de ambos y colocando una mano en el hombro de cada uno, enseguida los Uchiha sintieron el chakra fluir cálidamente en sus cuerpos, el brazo del Susanoo de Shisui que hasta el momento no era más que huesos logró formar también los tejidos.

El viejo estaba en las últimas pero tenía que esperar, alrededor de todos se comenzaba a cerrar una especie de cúpula, la vieja tampoco daba tregua lanzando cuanto podía contra el trio. 

El menor de los Uchiha se levantó y dijo con firmeza - Estoy listo - 

Sakura se despegó un poco, Shisui mantuvo el Susanoo hasta el momento en que sintió el leve tirón producto del Rinnegan, un instante después habían aterrizado a las afueras de la cueva al pie de una colina, sin embargo el derrumbe al interior de la montaña provocó una avalancha de rocas, los dos Uchiha estaban casi desmayados pero aún así su ímpetu seguía imbatible más ahora era Sakura la que se encargaría de esto.

- ¡Shanaroo! - gritó la pelirrosa lanzándose hacia el rio de rocas partiéndolas con las manos y dispersando los trozos con un jutsu estilo de viento.

Las rocas pararon aliviando por fin al trio, Sakura caminó hacia los chicos, Sasuke había recargado a Shisui en un árbol pues ya no podía mantenerse en pie, la kunoichi se agachó a la altura de él y comenzó a examinarlo, pronto apretó el pasto bajo sus manos mientras las lágrimas empezaban a filtrarse de sus ojos, Sasuke cayó a su lado enseguida para por fin notar que en una de sus piernas corría aquel líquido - No puede ser, tu también - dijo Sakura mientras agilizaba sus manos atendiendo a un Shisui que cada segundo se veía más moribundo.

- ¿Qué pasa? - dijo Sasuke observando la preocupación en el rostro de la mujer.

- Es veneno, también lo utilizaron el Sato san pero Shisui parece tener varias heridas, la dosis que corre por su cuerpo es mucho mayor, necesito atenderlo de inmediato.

- Ok, los llevaré a Konoha solo dame un - no terminó de decir su frase antes de caer al suelo.

- ¡Sasuke! ¡Despierta! - gritó la pelirrosa - ¡Por favor! ¡Sasuke reacciona! 

Con los ojos vidriosos tomó a ambos y caminó para rodear la montaña, Sasuke los había sacado por el lado norte y ella había dejado a Sato san con Katsuyu en la salida sur, con suerte la gente de Konoha ya habría llegado al lugar.