Sin aire :
Así se encontraba nuestra protagonista , hundiéndose cada vez mas en el interior de aquel tanque, el cual parecía no tener fondo. Pero... ¿porqué simplemente no salia? , pues, estar atado con cadenas al rededor de tus muñecas y tobillos, no lo hacían nada sencillo. El retorcerse intentando liberarse solo lo complicaba aún mas.
Agua , solo agua. Era lo único que conseguía ver.
¿Entonces que solución quedaba?.
Aunque todo apuntaba que seria su final, el de ambos ya que no se encontraba sola; un albino había corrido con la misma suerte que ella, pero debido al constante movimiento de este , terminó hundiéndose aún mas que la femenina.
La chica frunció el ceño, por culpa de la fuerza que ejercía al tratar de separarse, al menos un poco, de aquellas cadenas. Sus pulmones gritaban por aire.
El poco oxigeno, comenzaba a comprimirse en su interior, haciendo presión constante en el pecho de la femenina. Se le estaba acabando el tiempo, las ideas.
Debía encontrar la manera de salir.
Cerro los ojos con fuerza, como si tratara de encontrar un vago recuerdo dentro de ella.
––––––°––––––
La mañana transcurría normalmente para el hombre tigre, se levanto de aquel futón donde mayormente descansaba luego de una jordana de trabajo. Apenas si podía abrir sus ojos y orientarse en tiempo y espacio.
De pronto, sonó su teléfono sacándolo de aquel transe en el que se encontraba. Al ver en la pantalla el nombre de la persona, soltó un leve suspiro agotado.
- hola Dazai-san - dijo con una sonrisa a medias.
-¡Buenos días!- canturreo. Parecía bastante animado en la otra línea- ¡atsushi-kun te necesitamos!- dijo en tono dramático.
- ¿Que ocurrió?-dijo un poco estupefactado.
- bueno hubo una serie de asesinatos en un local cercano de la avenida principal- dijo de forma tranquila.
- Y lo dices como si fuera lo más normal del mundo- volvió a suspirar.
Luego de unos minutos más de conversación, cortó la llamada y se apresuro a vestirse, para después ir llegando a la escena del crimen.
Se aproximó cerca de su superior, quien se encontraba de espaldas platicando con uno de los policías.
- atsushi-kun llegaste rápido - dijo con una ligera sonrisa el castaño.
- hubiera llegado antes pero el metro está fuera de servicio por esta semana- dijo.
- tienen que retirarse está zona está restringida por la policia- habló un hombre detrás de ellos, aparentaba tener unos 45 años aproximadamente.
- oh , descuide somos detectives-dijo el de tendencia suicida con una ligera sonrisa.
- ¿detectives? - inspeccionó a ambos hombres con la mirada enfocándose principalmente en el más joven- ese niño no es detective, es muy joven para serlo- sentenció logrando que el albino se tensara un poco en su lugar y retroceda unos pasos ante la mirada amenazante del hombre.
- ¿habla de atsushi-kun?- el castaño se posiciono detrás del hombre tigre colocando sus manos en los hombros de este- es uno de nuestros miembros mas nuevos en la agencia, con una gran habilidad, si yo fuera usted no lo subestimaria-mantenia su sonrisa.
El hombre le dedico una ultima mirada siendo esta certera y fría- vengan conmigo -se dio media vuelta y camino a paso ligero aquella escena.
Los dos detectives imitaron al policía y se aproximaron a los cuerpos, estos estaban tendidos sobre una gran lona en el piso ,cubiertos por una bolsa negra.
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Atsushi x Lectora (mi pequeña ladrona)
Fanfiction¿Que pasaría si el miembro más nuevo de la agencia de detectives se enamora de una estafadora y ladrona profesional?
