Capitulo cuatro: Herencia

51 10 0
                                    

En un reino donde la sangre azul de la familia real era tan dolorosa y sangrienta que simplemente olvidaba que estaban para cuidar y organizar a su pueblo y solo pensaban en poder o al menos ese el caso del único Rey del UA, una pequeña isla conoc...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

En un reino donde la sangre azul de la familia real era tan dolorosa y sangrienta que simplemente olvidaba que estaban para cuidar y organizar a su pueblo y solo pensaban en poder o al menos ese el caso del único Rey del UA, una pequeña isla conocida por su odio hacia las otras naciones que estaban más allá del mar.

Pero como se dijo antes, solo el rey era remarcado con esas palabras sus hijos eran como el humo, si alguien los captaba se esfumaban de sus vistas y no podían opinar mucho de ellos más que lo superficial.

El primer príncipe desapareció cuando llego el fuego al bosque que separaba al reino con el pueblo ambulante de los dueños de los dragones que tenían respeto de los pueblerinos cercanos por su conexión a esas místicas criaturas que se creían que eran las únicas supervivientes despues de que los rumores de sirenas y tritones de hermosos y raros colores dejaran de nombrarse, junto a las bellas doncellas que se veían deambulando en los bosques y así.

Ese fuego fue apaciguado por los dragones y sus dueños ganando aún más cariño del pueblo maltratado, el Rey no era tonto y se dio cuenta y comenzó a jugar sus cartas para eliminar la competencia.

Sus hijos, esas eran sus cartas.

La única hija, la segunda nacida fue vendida a un rico Duque de unos años mayor, que prometía amarla o al menos cuidarla, ella se contentó con vivir una familia que siempre desea, ella ya se rindió con la idea de conseguir a su madre nuevamente en la familia rota que era la realeza.

Su tercer hijo, alguien que no llamativo al ser comparado con la madre del reino, la reina y esposa. Todos estaban al tanto de sus acciones ¿Él príncipe hizo esto?, No sabes, ese príncipe hizo aquello. Nunca nadie reconoció sus logros y esfuerzos. Todos esperaban que callera a la locura como su madre, él no quería seguir su vida bajo esa reputación, con el amor que le tenía a su madre una víctima del Rey indiferente huyo, no se podría decir si hizo lo mismo que su hermano mayor, porque nadie confirma si murió o vivió o lo secuestraron.

Y despues el último, el menor de sus hijos que nació con un gran intelecto, una mirada analítica y razonable, dejo de guiarse de los sentimientos despues del accidente que llevo a su madre a la locura y así le gusto a su padre, que lo proclamo heredero cuando supo que tendría el porte y la indiferencia hacia los otros por su propio poder.

Pero ese chico siempre intento no llamar la atencion aun cuando todos los ojos que se posaban en él aceptaban que era la luna en las noches nubladas, la única luz esperanzadora de que la oscuridad no llene al reino.

El príncipe Shouto al escuchar que ese era el resumen de los pueblerinos sobre la opinión de la familia solo intento huir, con la capa de color azul oscuro con correas en sus hombreras y piernas donde llevaba sus dagas para sobrevivir hasta llegar a su destino.

Debía de acabar la famosa guerra que se habló en generaciones, desde hace tiempo el rey del país tenía en la mira eliminar a los seres mitológicos que atacaban su orgullo y eliminar a esas personas que se creían mejores por tenerlos o eso pensaban esos reyes ineptos, el príncipe sabía que su padre iba a ser el último de ellos que tendría que morder el paño y sentirse así, nuevamente un fuego lleno el bosque que los separaba y nadie sabía la causa.

Tododeku Week 2021Donde viven las historias. Descúbrelo ahora