Blaze

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Había pasado casi dos días desde el torneo, y el mal clima aun no había terminado.

Cedric caminaba por los pasillos de Hogwarts, a pesar de que habían ganado no lo sentía realmente, sentía que gano injustamente después de enterarse de lo que le pasó a Harry quiso que se repitiera el juego, pero la profesora Hooch anuncio que gano justamente a pesar de lo que paso con los Dementores. No estaba de acuerdo con eso.

-¡Cedric!

Cedric volteo y mira a Jayden caminando hacia él, no se habían visto desde que ella le contó lo que pasó con Harry, a pesar de ser de la misma casa.

-Jayden, yo- caminando hacia ella- Te juro que trate, pero...

-Ya se, no te preocupes- sonriéndole un poco

Cedric baja momentáneamente la cabeza.

-¿Cómo está Harry?

-Fred y George me contaron que ya despertó, esta bien, pero su escoba, pues... - baja la mirada- ahora es un monto de astilla.

-Pobre Harry, pero lo importante es que él está bien.

-Si lo sé- caminando a su lado-. Oye, ¿Qué querías decirme después del partido?

Cedric se detiene ya que con lo que pasó lo había olvidado y no se sentía muy bien para decirlo. Le agarra la mano y le sonríe un poco.

-Otro día, hoy no estoy bien

Jayden le sonríe y asiente, ambos comienzan a caminar en silencio por el castillo, ella sabía que Cedric no estaba a gusto de haber ganado de esa manera.

-Oye Cedric, una pregunta ¿Piensas dedicarte a los dragones al graduarte?- pregunto con curiosidad

-¿Dragones?- Cedric enarca la ceja y después se ríe-, jajajajaja, de niño quería pelear contra uno como los caballeros medievales, pero no, trabajaré en el ministerio cuando me gradué- dijo y Jayden suspira aliviada- ¿Por qué la pregunta?

-Por nada, simple curiosidad- dijo rápidamente.

Cedric la mira confundido pero decide no decir nada, sabía que Jayden era reservada, pero no tanto como antes.

Jayden desvía la mirada y ve una silueta negra refugiándose de la tormenta, se suelta de Cedric y se acerca para ver mejor, a pesar del clima y ve a un pastor alemán negro temblando de frío refugiándose bajo una estatua.

-Por Dios- dijo Jayden mientras sale del castillo

-¡Jayden!- corre tras ella

Ambos corren hasta la estatua, Jayden se arrodilla para revisarlo, el perro abrió los ojos y retrocedió al verla.

-¡¿Eso es un perro?!- preguntó Cedric, parado tras Jayden- ¿Qué hace aquí?

-No lo se, pero no podemos dejarlo aquí- dijo en voz alta ya que la tormenta era muy fuerte- Hay que meterlo o morirá.

Cedric asiente y se acerca para agarrar al perro, el animal le gruñe pero estaba muy débil para hacerlo. Cedric lo carga y rápidamente lo meten al castillo, cuando lo ponen en el suelo el perro se sacude para secarse, salpicando a ambos jóvenes.

-¡Oye! - dijo Cedric divertido.

-No tiene collar- dijo Jayden, revisándolo-, de seguro no tiene dueño

-¿Pero cómo llegó hasta aquí?- preguntó mientras le acariciaba la cabeza.

El perro parecía quejarse por eso.

-No lo se, pero lo que si se esque esta en los huesos- dijo mientras veía que estaba muy flaco

-Será mejor conseguirle comida- dijo, mira para todos lados para asegurarse de que no haya profesores cerca-, ven, vamos

Alice y el Prisionero de AzkabanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora