Peligrosa Atracción (Eternidad Solitaria #1)

Capítulo 6

La casa de Ashley era un chalet cerca de la playa y ella aprovechó que sus padres estaban de viaje.

Scarlet aparcó detrás de un Seat gris. Algunos chicos que estaban en la entrada de la casa miraron primero el Ferrari con los ojos bien abiertos y luego a ella sonrientes. Scarlet les devolvió la sonrisa acompañada de un guiño. La música resonaba a todo volumen por la casa desde el salón. La gente se servía las copas en la cocina para irse después al jardín de atrás o al salón y bebérselas. Chicos y chicas subían y bajaban por las escaleras, seguramente iban a pasar un buen rato o venían de hacerlo.

Localizó a su hermano hablando con otros compañeros del equipo y a Amy hablando un poco más allá con tres chicas. Dos de ellas animadoras. Fue hasta la cocina y le llamó la atención el chico que servía los cacharros. Se apoyó en la encimera y esperó a que le sirviera.

-¿También eres camarero a domicilio?- Él la miró extrañado.

-Tú eres…

-Scarlet.- Se estrecharon las manos-. Trabajas en el Late Night.

-Sí. Soy Nick.

-Me acuerdo.- Cambió de tema-. ¿De qué conoces a Ashley?

-La conozco desde que era un bebé.

-¿Amigos de la infancia?

-No. Hermanos.

-Oh… no lo sabía.- Intentó sonreír. Serían hermanos pero desde luego no por la forma de ser.

-¿Qué te pongo?

-Sorpréndeme.

Él se rió y se fue a un armario para después volver con una botella transparente y tres limones.

-¿Has probado el tequila?- preguntó.

-No, dicen que es muy fuerte.

Sacó un cuchillo de un cajón y cortó los limones en rodajas.

-Ha llegado el momento de que pruebes lo que te pierdes.- Le sirvió un chupito con un trozo de limón y otro para él.

Brindaron y lo bebieron de un trago antes de chupar el limón. Nick soltó un fuerte suspiro y observó como Scarlet fruncía el ceño. Había olvidado que todo se desarrolla más cuando eres convertido y eso parecía una bomba de ácido explotando en su boca.

-¿Y bien?

-No está mal, pero es muy fuerte.

-¿Te animas a otra?

-Me apunto, Nick- dijo una voz masculina a su espalda. Lucas se puso a su lado. Chocó las cinco con Nick y luego la miró sonriendo.

-Has vuelto, misteriosa.- Scarlet le miró y le hizo una revisión visual. Era aún más guapo recién salido de la ducha. Su pelo revuelto señalaba que se lo había peinado con las manos. El pelo no le había secado del todo y algún mechón mojado le caía por la frente.

-Sí, tuve que irme por un asunto… familiar. No sé porque te doy explicaciones.

Lucas cogió el tequila y se lo bebió sin problema.

-Esto estaba un poco aburrido sin ti.

-¿Ah, sí?

-Sí. No tenía a nadie con quien discutir.

Eso le provocó una risa. Se sintió extraña. Creía que podía controlarse, que esa atracción solo había sido un susto. Pero ella no quería eso, no quería que ese sentimiento desapareciera.

-Scarlet, ¿te gustó lo que viste en el vestuario?

Scarlet sintió el rubor en sus mejillas, lo que provocó que Lucas sonriera de lado. Nick observaba la escena con disimulo mientras servía unas copas a unas chicas.