Un día como cualquier otro

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El Gray de mi sama~

Capítulo 1 - Un dia como cualquier otro

Primera parte : El primer trabajo juntos

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~Normal POV~

Muchas cosas han sucedido como de costumbre en el gremio, las peleas sin sentido habían cesado temporalmente y la paz reinaba el edificio esta mañana. Tres personas estaban inconscientes sobre una mesas uno arriba del otro.Cerca de ellos, una pelirroja se limpiaba de las manos la sangre que tenía en los nudillos.

-Erza-san da miedo...-comentó Wendy sin que la escuchara.

Todos despues de ver tal masacre contra Gray, Gajeel y Natsu, ignoraron la salud de los tres sabiendo que estarían bien.

Un personaje entró en escena y este es el maestro, muy rara vez llegaba despues de algún otro miembro y siempre ignoraba el llegar tarde cada vez que lo hacía. Tomó su jarrón con cerveza y comenzó a beber de él y en escasos minutos cayó en el efecto de la bebida.Tomó un papel que escondia debajo de su abrigo blanco de siempre.Se levantó de la barra y luego se perdió en el establecimiento.

Todos hacían lo de costumbre, haciendo del día, un día de rutina.Despues de no encontar nada en lo que pasar el tiempo, Gray se sentó en la barra frente a Mira.

-Mira...¿No hay nada nuevo en el tablero? - preguntó Gray a la albina detrás de la barra.

-Lo mismo que hace 20 minutos, Gray-respondió Mira a su pregunta por tercera vez con una gota de sudor tras la cabeza.

El pelinegro se levantó de su silla rápidamente y solo levantó su mano derecha en forma de despedida.

-¿Ya te largas, hielito?-preguntó Gajeel aún sobre Natsu

-Me voy a descansar-explicó Gray saliendo por la puerta del gremio

-Tsk...-bufó Gajeel lanzándose nuevamente sobre Natsu quien despertaba en ese preciso instante.

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Gray caminaba por las calles de Magnolia hacia su casa en medio de la ciudad. El día estaba radiante, pero el aura fría de Gray lo rodeaba y le impedía disfrutar de ese bello día.

Se posicionó frente a un edificio de dos pisos, color azul marino.Unas pocas plantas en el jardín con un delgado césped. Una casa angosta pero genial para vivir a solas.Entró al jardín sin necesidad de llaves, su puerta estaba averiada, al poner un pie dentro del terreno, sintió una presión en su mano derecha, la cual se fue enseguida.Volteó a mirar y se encontró con una cabellera azul.

-Oh-dijo Gray fingiendo asombro-Eres tu Juvia...

La chica solamente se sonrojó y miró hacía el bello césped. El chico la miró extrañado y arqueo una de sus cejas.

-¿Que quieres?-preguntó Gray un tanto apresurado

-Eh...Juvia quería saber...porque te fuiste-confesó con dificultades

La miró aún más extrañado, solo suspiró y cerró los ojos.

-Solo...quiero descansar-habló dando media vuelta.

Sintió peso en su espalda, un balbuceo y solo reaccionó a mirar hacia atrás.

Vio a Juvia recostada en su espalda, resopló moviendo su flequillo y dio un par de pasos.

Juvia cayó de cara al suelo, inconsciente y con una cara de sonrisa ebria.Gray la recogió enseguida del suelo y la cargó hasta su casa, para limpiar su herida del impacto contra el suelo.

Y así fue como, un día común y corriente, terminó siendo un día importante para Juvia.

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¡Proximo Cap : Primer paso!

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