AkaFuri Week

Confesión

Hace un buen tiempo, ya siendo un adulto hecho y derecho, Furihata puso en orden por fin sus sentimientos y se dio cuenta que estaba completamente enamorado, sin embargo, no estaba muy seguro de confesarse, siempre cuando lo intentaba pasaba algo, como si el destino osara callar lo que se moría por decir. Una vez gracias a su torpeza, termino mojando a la persona que quería transmitir aquellos sentimientos que tenía guardados. Cagando la oportunidad de hacer un momento romántico. Genial, ahora la persona que amaba no solo pensaría que le teme, sino además que le odia.

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Akashi había hecho una fiesta en especial, aunque no sabía el motivo y la verdad no le importaba. Convenció a Kuroko de que de alguna manera quedara colado en esa fiesta, aunque al parecer la mayoría que iban eran los de la Kiseki o parte de los antiguos reyes sin corona. No importaba nada. Quería transmitirle sus sentimientos a su amado en esa oportunidad.

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Era una persona amable así que no le molestaba contestar cualquier pregunta que le hicieran, mintiendo un poco de la razón de querer venir a aquel lugar. Estaba esperando el momento oportuno, la hora oportuna, la hora donde la mayoría ya se apartaba o bebía demasiado. Sabía que Akashi tenia resistencia al alcohol, pero no demasiado, trataría de interceptarlo antes de que la borrachera hiciera lo suyo con este, o incluso con él mismo. Sin embargo, se dejó llevar por el trago y su mente se puso en negro.

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Despertó con un horrible dolor de cabeza y en una cama que no conocía, miro a su lado y Akashi estaba desnudo durmiendo a su lado. A Furihata casi le da un ataque ¿Acaso solo terminaría como un encuentro casual? ¿Cómo alguien que no tendría relevancia para el pelirrojo excepto una noche de placer momentáneo y nada más? No quería eso.

Trató de pensar en cómo podría decirle las cosas y declararse correctamente, tenia que decírselo, quería decírselo, no podía guardarse más aquellos sentimientos.

Escucho un ruido y era Akashi recién despertando. Esta bien Furihata Kōki, es ahora o nunca. Se dijo dándose valor.

― ¡Akashi-san!¡Necesito decirle algo importante! ―Que no te ganen los nervios que no te ganen los nervios, que no te ganen los nervios. Se repitió mentalmente.

Sin embargo quien le oía hizo un gesto con la mano de que no era el momento.

―Por favor ¡Necesito decirle ahora!

―Necesito ir al tocador. ―Contesto apenas tapándose la boca y encerrándose en el baño de la habitación antes de que Furi lo siguiera.

Eso no haría rendirse a Furihata, se puso en la puerta.

―Akashi-san necesito decirlo ahora, sino lo digo explotaré: Realmente me gusta Akashi-san, me gustaría que fuese mi pareja, sino soy correspondido lo entenderé, pero ¡por favor deme una oportunidad!

No hubo respuesta, se escuchó solo un ruido que Furi prefirió no descifrar de que era y luego gárgaras, hasta luego de varios minutos la puerta se abrió con un Akashi sorprendido mirando al chico que recién se le había confesado.

Era la peor ocasión para confesarse, justo cuando Akashi estaba vomitando en el baño después de tremenda borrachera de ayer. Ni siquiera este se acordaba que paso ayer con Furihata, pero estaba seguro que habían intimado al estar ambos desnudos.

―Sinceramente pensé que te desagradaba Furihata Kōki. Tu también me gustas mucho ―Se acerco a él con un gesto cariñoso. ―De haberlo sabido antes hubiera cancelado el vuelo de hoy.

― ¿Qué? ¿Qué vuelo?

― ¿Acaso no sabes que la fiesta de ayer era de despedida? Me iré un año a Londres.

Furi abrió demasiado los ojos, totalmente sorprendido.

―Ven conmigo―Tomo las manos de Furihata que aún estaba en shock. ―Así podremos conocernos mejor.

¿Qué hacer? Ir con Akashi seria tomar la decisión más impulsiva en toda su vida, apenas si se había confesado. Sería dar una vuelta en 180° grados y podía no funcionar. Estaba también su familia, el trabajo que recién adquirió apenas salió de la universidad, pero...

―Vamos.

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Kuroko miraba un video donde estaban Akashi y Furihata totalmente borrachos diciéndose mutuamente entre risitas coquetas que se amaban y que se escaparían juntos a casarse en el extranjero para terminar con el pelirrojo tomando en brazos a Furihata como una novia y tarareando una canción de bodas mientras iban a la habitación de Akashi.

―Par de bobos, si fueran igual de sinceros cuando están sobrios...

fin
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10#Un personaje le haga una confesión a otro en un mal momento