Capítulo 27 - Quiero sentirlo también

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Su comida llega y lleva comiendo poco tiempo y en eso suena el timbre así que ella deja su cuchara sobre el taper y va a abrir la puerta a lo cual lo hace entrar. Ambos van al comedor ya que ella se adelanta, este la observa preocupado.

Ace: ¿Estás bien? Vine lo más rápido que pude.

Tn: Ace... -se voltea a verlo- Vayamos a sentarnos, necesito decirte algo.

Esto lo preocupa aún más pero no dice nada y ambos van a sentarse. Ya sentados ella bota un gran suspiro, come un poco y decide contarle pero antes, habló lo de anoche sintiéndose feliz por la cena y que luego habló unas cosas ya en su cama y que mencionó a Amelia diciéndole algo para luego soñar pero le asegura que sintió ese sueño demasiado real y pasa a contarle.

Ace: Wow, no sé qué decirte. Al menos sabemos quién es ese prometido. -está muy sorprendido por lo que su novia tuvo que pasar en ese sueño demasiado real-

Tn: Y yo con nervios queriendo despertar ya.

Ace: Me imagino... Pero, al conocer mejor a Amelia y Alíd... Siendo que tú al querer saber más de ellos o bien por parte de ella, ella te metió en ese sueño, increíble que haya sucedido. ¿Crees... Crees que si le pido a Alíd lo que tú le dijiste a Amelia me lo conceda?

Tn: ¿Estás seguro de que lo quieres? Digo, tú la tendrías difícil.

Ace: Lo sé pero suena interesante.

Tn: Para ti, yo tuve miedo.

Ace: Seguro porque te agarró desprevenida.

Tn: Aún así, lo que fuere, no quiero volver allí. Yo estoy bien aquí, en este mundo, en esta época. Estoy feliz de que ellos, a pesar de lo que pasaron siguieron buscándose hasta encontrarse y que su amor aún perdure, siendo esto después de la muerte. Es algo muy lindo aunque... Fue trágico... Aquel... -su pensamiento volvió a ese lugar que visitó y soñó- Ace... Sé que dije que quiero continuar, y es así solo que no quiero volver a ese sueño que fue tan real, quiero que ellos se reúnan de una vez y sus almas o... No sé, puedan estar tranquilos.

Ace: Estamos juntos, visitaste ese lugar, quizá yo deba ir y así puedan ellos descansar en su totalidad. No vayas, solo ten cuidado con lo que le dices. Lo intentaré.

Tn: Está bien pero ten mucho cuidado.

Ace: Lo haré... Esta noche.

Tn: ¿Tan pronto? -él asiente-

Se quedan hablando un muy buen rato hasta que toca volver a casa y en el camino su celular suena, al ver quién es contesta.

Ace: Dime, Valery.

Valery: Te fuiste demasiado rápido esta tarde. No quise interrumpirte, ¿todo está bien?

Ace: Ah, sí... Siento salir de esa manera pero sí, todo está bien, todo tranquilo por aquí. Agradezco tu preocupación.

Valery: Para eso estamos los amigos.

Ace: Lo sé. -sonríe- Y bueno, debo colgar ya que casi estoy en mi casa, a unos pasos.

Valery: De acuerdo. Que todo siga bien, nos vemos.

Ace: Sí, hasta entonces. -cuelga-

El pecoso suspira y entra a su casa no queriendo comer yéndose directo a su habitación y encerrarse. Camina de un lado a otro pensando en cómo pedirle a Alíd entrar en el sueño tal y como le sucedió a su novia. Cree que quizá no le pase nada o eso espera en su totalidad. Lo que sí quiere es reunirse con ese amigo de Alíd para quizá le diga algo, saber más.

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Tn: Oh no, olvidé decirle a Ace sobre su amiga... Bah, no importa. Pero... Ace... Tengo miedo por ese tipo... No quiero volver y que me mate siendo yo allí y no Amelia. Lo siento Amelia pero no quiero pasar por lo que tú pasaste.

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Ace: Bien, ya estoy en mi cama y tapado. Alid... Supongo que ya sabes lo que pasó mi novia y que tu novia hizo que mi novia estuviera en tu tiempo. ¿Crees que yo pueda entrar allí también? Digo, en un buen lugar.

Se queda en silencio unos momentos para luego suspirar y pensar que fue una mala idea y lo mejor será que se duerma ya.

Al día siguiente se levanta cansado y sin ánimos de ir a trabajar pero debe ir. Se siente pesado aunque no tuvo ningún sueño con respecto a los sucesos que le sucede junto a su novia sino un sueño de lo más normal.

Llega al trabajo sin ánimos y bosteza cada vez pues siente mucho sueño y cansancio.

Marco: Amigo, no te ves muy bien.

Ace: Siento que no dormí lo suficiente pero sí dormí bien.

Marco: ¿Será la pesadez de los sucesos que tienes que te pasan factura?

Ace: Oye... No lo había visto de esa manera.

Su amigo Marco sabe lo que le sucede a Ace ya que le contó todo, es el más cercano al pecoso.

Llega la noche y cierran el local. Ace había dicho que no iría a trabajar al día siguiente pues se siente cansado y en su camino de regreso a casa se va a la casa de su novia.

Ya en la puerta es que toca y ella le abre la puerta que por unos segundos no vio a su novia allí sino a otra mujer y creyó alucinar pues tiene sueño y cansancio.

Ace: Creí haber visto a otra persona y no a ti.

Tn: Me estás asustando.

Ace: Es verdad. -entra y ella cierra la puerta-

Tn: Te ves mal.

Ace: Dormí plácidamente pero siento que no fue así. Mañana no iré a trabajar y... Me gustaría que me acogieras en tu casa, ¿se puede? Prometo que será esta noche.

Tn: No prometas nada ya que en el futuro querrás quedarte aquí.

Ace: Lo prometo temporalmente.

Tn: Hm... -se cruza de brazos no creyendo nada-

Ace: Ok, ya. Nada de temporalmente. -ella lo sigue mirando seria- Bien, sé que me dijiste que no durmiera hasta que hablase con Dragon pero... No sé qué decirle, estuve practicando pero siento que esto no llevará a nada. Por favor, quisiera quedarme aquí.

Tn: ... -se ríe y él confundido- Está bien, está bien puedes quedarte.

Ace: ¡Muchas gracias! -sonríe-

Tn: Me gusta tu sonrisa.

Ace: Que bueno, hay muchas más para ti, solo para ti.

Tn: Ese tipo de sonrisa sí. -él la abraza-

Ambos van a la habitación de ella y se echa en la cama sintiendo la cómoda y se acomoda.

La chica va al baño con su pijama para ponérsela. Al salir ve a Ace durmiendo muy plácido que sonríe.

Tn: Ojalá que durmamos bien esta noche. Quiero una noche tranquila.

Un amor profundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora