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"La he perdido... perdi a Evie"
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Abri pesadamente mis ojos encontrandome sentada en el sillon de la residencia familiar, veo mi vestimenta y tengo un vestido blanco, el mismo que use en la coronacion.
Se escuchaba musica clasica y voces a lo lejos de mi.
¿Que hacia aca?
Por los ventanales entraba una gran luz blanca que era posible ver hacia afuera.
-¿Mama...? -pregunto con un hilo de voz cuando la veo caminar por el hall con su bello vestido color rosa viejo hasta sus rodillas que le quedaba perfecto pero ella no me escucha. Me levanto del sillon caminando fuera de la sala directo al hall- ¿Papa...? -pregunto al escuchar su risa acompañada de la de mi mama. Mis ojos se mojan mientras camino al comedor de nuestro hogar, escuchando mas risas.
-¡Hermanita! -escucho cuando entro en el comedor, viendo a mi hermano Caspian, mi abuelo Antonio, a mis padres y a Luna. Mi padre y abuelo vestian con su apuesto traje negro con la camisa blanca y mi hermano lucia una camisa blanca con un pantalon negro. Luna finalmente vestia con su largo vestido hasta sus pies color blanco con piedras blancas y su cabello platinado con una corona de flores blancas.
-¡Ven, caperucita! -dice mi abuelo que estaba frente a la chimenea tomando de su copa de vino.
-Mi bella naranjita... -llama Luna con una calida sonrisa, asi me llamaba.
-¿S-son real? -pregunto tartamudeando sin poder creerlo. Luna se acerca a mi lentamente y no dudo en abrazarla, ahora las dos estabamos a la misma altura, sentia su hermoso perfume de frutos rojos, tocaba su liso cabellos platinados y nos separamos, viendo que aun corservaba su belleza Seelie con sus bellas orejas puntiagudas.
-Eres toda una mujer, Naranjita -dice mi protectora acariciando mi mejilla y cierro mis ojos ante su dulce tacto.
-Mi bella caperucita -llama mi papa y me separo de Luna para ir a mi papa y a mi mama, mis lagrimas salian una tras otra, sintiendo como mi corazon se achicava ante sus manos y me volvia inmune- Eres una bella señorita -mi padre me ve cara a cara y limpia mis lagrimas.
