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Derek miraba a Stiles prepararse para regresar a la universidad, solo habían pasado un par de días desde que le había propuesto de la manera menos romántica posible, según el que se casaran, Derek habría deseado llevarlo a alguna parte donde estuvieran solo y poder celebrarlo, pero las circunstancias no lo permitieron.

El Profesor arreglo las almohadas que tenia alrededor para poder observarlo mejor, Stiles lo miraba a través del reflejo en el espejo y podía jurar que le costo toda su voluntad y la que tendría en el futuro para no volver a la cama con él.

-Bien, ya me voy, deje los números de Scott y tus hermanos en caso de que no puedas contactarme, también deje el teléfono de Mary Louise aunque dudo que vayas a necesitarlo –

-Stiles – Dijo Derek en su tono mandón haciendo que el chico guardara silencio y ante la mirada del profesor, Stiles no tuvo nada mas que hacer que colocar los brazos en su cintura e intentar desafiar su mirada.

-Bien, se que actuó como un tonto – Se rindió Stiles sentándose en el borde de la cama mientras Derek extendía su mano para tomar la del chico.
-Que va, ya estas actuando como un esposo preocupado – esa respuesta saco una sonrisa de Stiles quien usando su mano izquierda acaricio la nueva barba de Derek.

-Por supuesto que me preocupo –

-Solo estarás fuera medio día, estaré bien, me levantare, tomare una ducha, comeré algo y luego estaré con mis hermanos quienes me mantendrán inmóvil en algún lugar mientras arreglamos los detalles de la boda, porque temen que me rompa igual que tu – Le dijo Derek intentando que se relajara un poco y se concentrara en sus clases, a pesar de toda la locura en la que su vida se había convertido en los últimos meses estaba a punto de graduarse y no podía distraerse.

-Bien, pero igual debes llamarme, ya que cualquier cosa puede pasar en 6 horas – Insistió Stiles

-Bien, te llamare, pero puede que te obligue a tener algo de sexo telefónico – Repuso Derek con una sonrisa maliciosa en su rostro.

Stiles se sonrojo un poco, pero se mordió el labio ante la imagen mental que se hizo de Derek hablándole de una manera sexy por teléfono.

-Eso suena como el día más increíble todos -Stiles besó sus labios y luego le mordió ligeramente el de abajo.

—Claro que sí, suena increíble, mandón. – Fue lo que dijo Stiles cuando rompió el beso.

-¿Y? – Pregunto Derek con una mirada fija en Stiles desafiándolo.
Nuevamente el chico no pudo resistirlo y aparto un poco la mirada.

-Nada... Me gustas mandón – Confeso y eso saco una sonrisa del profesor

-Así que te gusto mandón, ¿no? – Pregunto Derek, aunque conocía la respuesta quería que Stiles se lo dijera.

-Algunas veces – Respondió el chico aun sin mirarlo y Derek sonrió.
- Vale, lo recordare entonces –

-Ahora, ve a tus clases o suspenderás por mi culpa –

Stiles se levantó rápidamente y fue al armario al ver la hora, encontró su suéter rojo, mientras se lo ponía recordó todo lo que habían pasado en pocos meses, cualquiera pensaría que era una locura casarse con tan poco tiempo de conocerse, pero para él, no tenía sentido vivir sin Derek y sabía que Derek sentía lo mismo.

Derek había calado tan profundo en su piel que ahora no imaginaba como seria despertar un día y no verlo o escucharlo. Sin embargo, las dudas lo asaltaron así que se giró en dirección a Derek quien se acababa de levantar.

SilenceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora