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Lograron llegar a la mansión pero la noche había caído, una brisa fría golpeaba todo y podía sentirse el invierno acercándose.
Al momento de bajar del auto, Stiles se quedo mirando la enorme mansión casi sin aliento.

-Ahora un montón de cosas sobre ti comienzan a tener sentido – Le dijo Stiles y Derek no respondió.
-¡Es un castillo! – Exclamo Stella completamente feliz bajando del auto luego que Derek la ayudara.

-No es tan grande, la casa de Campo es el doble de esta – Le aseguro quitándole importancia al enorme lugar.
Bajo las maletas y de la nada un mayordomo cliché apareció.

-Joven Hale – Saludo y Derek le sonrió.
-Es bueno verte Regis – Le saludo Derek.
-¿Están todos en casa? – Pregunto Derek y el mayordomo de cabello gris y traje elegante asintió.

-Así es señor, llega justo a tiempo para la cena – Índico mientras comenzaba a ayudar con las maletas.

Stiles miraba la casa junto a su hermana y luego observo la extraña expresión de Derek.
Parecía como si la armadura se hubiese hecho más gruesa y pesada encima de él.

Stiles lo miro por unos segundos y le pareció increíble que ese era el mismo sujeto que estuvo masturbándolo, gimiendo y gruñendo con él en aquel bosque unas horas atrás.
Después de todo ese hombre estaba regresando al lugar donde solo había recibido odio de parte de su padre.

Stiles siguió al mayordomo mientras Derek iba detrás de ellos.
Stella estaba completamente feliz y no sabía como lo hacía, el mismo estaba totalmente aterrado pero había aprendido a disimularlo.

Al entrar de nuevo Stiles se sorprendió por lo espacioso que era el lugar, un enorme salón, mármol, pinturas clásicas, plantas, madera, todo ese lugar parecía sacado de una revista de diseño de interiores.

Era el lugar típico de la realeza.

-¡DEREK! – Exclamo alguien desde la parte superior de las escaleras, Stiles miro y vio a una mujer realmente atractiva.
De cabello rubio y suelto, con la tez clara y hermosos ojos llevaba un vestido color crema atado con un cinturón de seda negro.

Corrió lo que faltaban de escaleras y atravesó el enorme salón con sus tacones haciendo ruido hasta llegar a Derek y lo abrazo casi saltando sobre él.
Beso su mejilla y parecía genuinamente feliz de verle.

-Sofya – Dijo Derek sonriéndole a su hermana – Te ves bien – Añadió y Stiles estaba sorprendido de ver a Derek actuar así, primero con su hermana Stella y ahora con su propia hermana.
El profesor tenia debilidad por la familia a pesar que aseguro no desear todo lo de la casa y cerca blanca.

Entonces Sofya miro hacia Stiles y su hermana, el chico pudo ver que no era nada parecida a su hermano.
Incluso su expresión era diferente.

-¿Quiénes son nuestros invitados? – Pregunto Sofya y Derek se adelanto a Stiles.

-Ellos son Stiles y Stella – Los presento y Sofya extendió la mano a Stiles con una sonrisa y luego miro a Stella.
-Es un gusto niña hermosa – Dijo la chica y Stella sonrió.

-¿Eres una princesa? –Pregunto Stella inocentemente y Sofya sonrió.
-No lo soy pero podemos convertirnos en una si quieres – Le propuso a la chica y Stiles se sorprendió de lo amable que era, un polo totalmente opuesto a Derek.

-Sofya, ¿Podrías acompañarlos? – Pregunto Derek y la chica lo miro, tardo unos segundos en entender la razón de la petición de su hermano.
-Yo me encargo, ve con ella – Respondió la chica con un tono algo melancólico en su voz.

SilenceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora