"La maldad nunca es más fuerte
que la verdad
al final, esta
siempre acaba venciendo..."
Ciudad de México, 2020
"...La ola de secuestros en la ciudad de México se intensifica esta semana...
...En seis días se registró una cifra alarmante de veinticuatro, en lugares concurridos y a plena luz del día...
...Se cree que quien está detrás es un grupo muy bien organizado.......La selección de sus víctimas ha cambiado, ya no son empresarios ni altos cargos de la política...
...Las nuevas víctimas son niños y jóvenes de familias adineradas...
...Los colegios doblaron sus normas de seguridad...
...El pánico invade los hogares, hoy casi ningún niño sale de su casa sin un guardaespaldas...
...Las víctimas suelen ser devueltas en 48 hs si se llega a un acuerdo por el rescate...
...Pasadas esas horas la víctima es considerada prácticamente muerta...
... Sin embargo las estadísticas son preocupantes...
...El 80% no sobreviven...
...No es solo dinero lo que buscan...
...Muchos jóvenes nunca aparecen aunque se haya hecho la entrega del dinero...
...Hay algo oscuro rondando por nuestras calles...
...Las víctimas reciben maltratos, golpes y hasta amputaciones corporales...
...El trato de los secuestradores es inhumano...
...La población de México está enloqueciendo por el miedo de perder a sus hijos...
... Nadie sabe quién será el siguiente...
... La policía estudia la posibilidad de una red de trata de blancas oculta detrás de esta ola..."
Lo único que se oía en aquel despacho oscuro, era el sonido de las noticias en la televisión y el tintineo de los hielos chocando entre si.
Ambos hombres, sentados uno de cada lado del escritorio removiendo su vaso con el whisky más caro, escuchaban atentos aquel noticiero de última hora.
Rain respiró hondo, acabando de un solo trago el líquido frío que quedaba en su vaso, dejando éste de manera brusca sobre la mesa.
Últimamente las empresas automotrices de Europa habían decidido cerrar sus fábricas en América, debido a la inestabilidad económica y social de estos países.
Cada día para Rain era la misma rutina, leer y releer documentaciones intentando encontrar una solución, hacer llamadas para programar reuniones, intentando encontrar nuevos socios que le permitieran continuar con sus empresas que iban en declive.
Pero lo que le preocupaba, era que todo este problema debía mantenerlo oculto de su esposa.
Jisoo, una mujer hermosa, la cual conoció en un viaje de negocios a California, de la que se enamoró perdidamente y no dudó un segundo en pedirle matrimonio para traerla con él a su país natal.
Su miedo era que le dejara si se enteraba de todo lo que estaba ocurriendo.
Ella no sería capaz de vivir sin poder mantener el ritmo de salida de dinero constante para mantener las apariencias con sus amigas ricas.
Se moriría si ella le abandonara.
—Estoy muy jodido, Seonghwa— bufó pasándose ambas manos con irritación por la cara y el pelo.
—Cuéntame y lo arreglaremos, vamos, descárgate conmigo, soy tu persona de máxima confianza, Rain—. Aclaró encendiendo un cigarrillo para apoyarse en el respaldo de la silla a escuchar a su amigo, mirando como el humo se disipaba en el aire.
—Estoy en problemas... sabes que mi padre solo me dejó de herencia un montón de deudas de juego y embargos que no puedo pagar, dos de mis empresas cierran de golpe y con un solo negocio no podré mantener el status de vida que llevamos. Además Jisoo está obsesionada con esto de los secuestros, tiene miedo y no para de insistir en que quiere más seguridad... Wooyoung lleva una semana sin ir al colegio ni a ningún lado porque tuve que despedir a nuestro viejo guardaespaldas y está insoportable, aburrido y haciendo berrinches todo el tiempo. Me estoy volviendo loco... La póliza de nuestro seguro vence dentro de un mes, y no la puedo renovar si no tengo un puto guardaespaldas en nómina. Ahora no puedo pagar uno y si mi mujer se entera de esto no tardará ni dos días en marcharse con mi niño a EE. UU..— soltó mirando por la ventana con la frente apoyada en el cristal.
—Dame soluciones... aunque en realidad necesito un milagro, Hwa— rogó respirando con fuerza.
—Solo contrata un guardaespaldas barato para tu hijo, busca uno con un historial impecable, esto es como todos los servicios, obtienes por lo que pagas, no necesitamos un maldito superman, renuevas la póliza y más tarde lo despides por alguna incompetencia, llama a la agencia que te envíen cuanto antes los curriculums para elegir, lo importante es que la tuya no sea la única familia desprotegida de la ciudad— dijo apoyando ambas manos en la dura superficie de madera.
—¿Solo eso?, ¿así tan fácil?— preguntó incrédulo levantando las cejas con inquietud.
—De esta manera mantienes contenta a tu mujer, que culos como ese no abundan por aquí... de todo lo demás me ocupo yo, quédate tranquilo—. Afirmó acomodándose la corbata de camino a la puerta para salir de aquel despacho.
Rain quedó pensativo, mirando en el marco digital que tenía sobre su escritorio pasar las fotos de su preciosa mujer y su adorado hijo.
Se dejó caer en su sillón de cuero negro, con sus dedos pulgares masajeando su cien.
"Por la Virgen de Guadalupe que todo salga bien..."
Rogó nervioso para sus adentros, besando la medalla de la virgen que colgaba de su cuello.
Espero que esta historia sea de su agrado.
Si les gusta no olviden dejar sus estrellitas y comentarios que me encanta leerlos!!
ESTÁS LEYENDO
My Cold Revenge Woosan Sanwoo
FanficPrimera regla de un guardaespaldas: nunca, pero nunca, te enamores de tu protegido... En América cada 60 minutos es secuestrada una persona... El 80 % de las victimas no sobrevive...