Después De Todo, Seguimos Siendo Mentirosos

7

—¿Por qué haces ésto? En el fondo sabes que ella no te querrá, si huyó es por algo, ¿no?

¡Zás!

El puño de Regan se impactó en el rostro de Aleix, haciéndolo escupir su propia sangre.

En la habitación la única luz que residía era la que se colaba por la ventana pero aún así, Regan podía ver los moretones que le había dejado a Aleix por no quedarse callado. <Se lo merece por no cerrar la boca> Pensaba.

Aleixandre sabía que todos esos moretones y el horrible dolor que tenía en las costillas fueron acusados por su culpa, pero ya estaba harto de callarse y hacer lo que le dijesen, y mientras estaba atado en aquella silla y llevaba días sin alimentarse o beber agua, pensaba que su vida llegaría hasta ahí. Artie y Melanny habían escapado y no daban señales de volver por él. Pero eso ya no le importaba.

—Deberías de saber que a éstas alturas, Melanny no regresará.

Regan, quien se había encaminado hacia un escritorio, estaba ocupado buscando sus artefactos, dándole la espalda a Aleix.

—¿Qué te hace creer que no volverán?—preguntó sin volverse aún.

—¿Cuánto llevamos aquí?— alegó Aleix con burla en sus palabras.

Regan contrajo la mandíbula y se giró. Mientras más se acercaba, Aleix puedo ver la molestia en los ojos de su hermano. Él sabía que su actitud le traía problemas pero eso no le importaba en absoluto.

Cuando Regan quedó a escasos metros de Aleix, el chico notó el estado en que estaba, la barba de unos días era notoria y el cabello también lo llevaba largo. Tenía ojeras por falta de sueño y estaba más delgado. Sin duda Regan ya no era el Regan Cash de siempre, éste Regan era un puto loco obsesionado con Melanny que no llegaba a ser razonable.

Cuando Regan meneó el látigo que llevaba en la mano, algo en él pareció salir a la luz. Los días en esa oscuridad, pasando frío, sueño, hambre y dolor sólo le había enseñado una cosa.

<Sonríe a la vida aunque el mundo se te caiga encima>

Se repetía cada vez que podía, y ese momento no era excepción.

Aleixandre Cash ya no era el mismo chico carismático y divertido. En ese momento eso cambió y qué lástima que fue para mal. Ya estaba cansado de que lo utilizaran para beneficio y no lo admiraban por lo que en verdad era.

Entonces, con mucha determinación, observó a Regan y, sin despegar los ojos de él, su comisura apenas se alzó pero era visible la burla en sus labios.

—¿Qué es tan gracioso, Aleix?

Regan preguntó con el pecho hinchado en rabia. La actitud de Aleix le molestaba y también sus comentarios. ¿Y si no volvían a por él? ¿y si no tendría a Melanny?

<¡No!> Se encargó de alejar esos pensamientos porque él la quería a ella y no podían salvar su pescuezo sin dejar atrás a Aleix.

El chico no respondió, simplemente, empezó a reírse. Primero fue una risita, luego otra, luego otra más y después daba grandes carcajadas.

Regan soltaba palabrotas, estaba rojo de rabia y sin pensarlo dos veces. Alzó la mano y con ella, el látigo se impregnó en la piel desnuda de Aleix.

Pero para mayor sorpresa de Regan, el chico ni se inmutó. Siguió riendo y la rabia se apoderó en Regan, haciendo que no le diera un primer azote, sino el segundo, tercero cuarto...

—E-Estás loco...

Regan salió de su trance de rabia y cayó en cuenta que, él no era el único loco en esa habitación, porque cuando vió que Aleix no reaccionaba a sus golpes con lloriqueos y súplicas, con los ojos como platos, salió de la habitación cerrado de un portazo.

La piel de Aleix ardía por los golpes que le daba Regan, más sin embargo, ya no sentía nada. No querían llorar, es más, le causó mucha risa la forma de actuar de Regan que casi se hacía del uno en los pantalones. Cuando se dió cuenta de que Regan había salido por aquella puerta, se sintió muy, muy eufórico por la huida de su cobarde hermano.

Su hermano pensaba que estaba loco.

¿De verdad lo estaba?

No lo sabía, lo único que sabían era que, el secuestro y las torturas de Regan lo había cambiado. Ya no se sentía igual y, si lograría salir ileso de aquél sitio, tenía muy en cuenta que no sería el mismo Aleixandre Cash...

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—Aleix, ¿Dónde estás?

Las palabras de Owen salieron en un suspiro cansado y melancólico. Su Aleix estaba en manos de su loco hermano y eso le ponía los pelos de punta. Nunca en la vida había sentido tanto temor que creía que le daría un infarto si el plan de recuperar a Melanny fracasaba.

Recostado en la cabecera del auto con los ojos cerrados, pensó en aquellos momentos felices que tuvo con Aleix y el terror lo abordó con el imaginar de que no podría pasar ni un sólo día a su lado nuevamente.

Su plan tenía que funcionar, porque de no ser así, optaría por tomar formas drásticas de encontrar a Aleix y no le importaba si requería la seguridad de vidas de otras personas.

¿Que si amaba a Aleix?

Nah, esa sería la última palabra que utilizaría como adjetivo para describir lo que sentía por él.

Daría la vida por Aleix y, sin detenerse a pensarlo, mataría por él...

🔪Comenten por aquí si quieren al pvto de Regan muertito.

Capítulo corto amig@s, pero aquí está, admito que le faltó mucho pero es para que se den cuenta que habrá mucho de que contar sobre Aleix y Owen. Pues tengo en mente muchas cosas con éstos dos. Así que paciencia porque no podemos reencontrarnos tan rápidamente con el "Yaoi" 7u7

****PARA QUIENES NO ENTIENDEN ÉSTE FANFITION, DEBEN BUSCAR "PERFECTOS MENTIROSOS" de Alex Mírez.