Los Gemelos Gallagher.

People think she's our daughter

—Gracias por traerme a mi casa chicos— dije con una sonrisa

—No es nada— dijeron ambos, se miraron y rieron

—Entonces nos vemos después— me acerqué a ellos y bese sus mejillas— adiós— sonreí y entre a casa.

Todo estaba apagado así que pensé que mis padres estarían ya en su habitación, subí a ella y toque su puerta y escuché un "pase"

—Ya llegue— dije desde la puerta

—Claro hija— hablaron ambos

—Descansen, linda noche— susurre

Cerré la puerta y caminé a mi habitación, me senté en mi cama y suspire, me recosté en mi cama mirando el techo, cerré mis ojos y sonreí como tonta, este había sido uno de mis mejores días después de muchos malos o no tan buenos.

Viernes.
Me desperté y me senté en mi cama para después tomar mi medicamento, me puse de pie e hice mi cama, me di un baño y me puse un crop top con hombros descubiertos, manga larga en color rojo, una falta de mezclilla y uno tenis blancos, mi cabello lo rice poco y puse perfume.

Los viernes mis padres llegaban hasta tarde, dejaban a Ruby en una guardería y después de medio día pasaba por ella y la cuidaba todo el día hasta las 7:30 p.m que llegaban ambos del trabajo.

Baje a desayunar algo ligero, durante el desayuno escuchaba música como era costumbre.

Al terminar subí a lavar mis dientes,mire mi hora y aún era muy temprano, 9:12 a.m, así que decidí salir a caminar.

Durante la mañana caminaba rumbo a un centro comercial, pues no había otro lugar a donde ir, durante el recorrido miraba mi alrededor, el aire estaba algo fresco así que apresuré mi paso, el aire golpeó fuerte mi rostro y cerré mis ojos, un recuerdo vino a mi mente, mi cabeza comenzó a doler y busqué rápido una banca vacía, caminé con fuerza a ella y me senté.

El dolor era insoportable, puse mis manos en mi nuca y comencé a sollozar pues el dolor no quería parar, estaba asustada.

Sentí una mano en mi hombro, esa persona me decía que respirara y que dejara de recordar, por alguna razón sabia que estaba recordando, comencé a calmarme, el dolor estaba desminuyendo, esa persona me abrazaba y besaba mi frente.

Abrí mis ojos y giré a verlo, era uno de mis hermanastros, Ryan, el giro a verme y sus ojos estaban llorosos.

—Estás mejor?— pregunto tomándome de las mejillas

—S..si— hable entre cortada— gracias por ayudarme Ryan— él limpiaba mis lágrimas

—Lo hago porque me preocupo por ti y no quiero que te pase nada malo— me sonrío sin mostrar dientes— creo que te tengo que llevar a casa— se puso de pie

—No quiero ser molesta— lo mire aún sentada

—No es molestia, jamás lo serías— extendió su mano y la tomé

Comenzamos a caminar de regreso a casa, él me iba tomando de la mano y la otra la llevaba dentro de su bolsillo del pantalón.

—Y dime qué hacías aquí?— pregunte mirándolo

—Bueno, hace unos meses me dispuse a salir a caminar todas las mañanas y ya es costumbre— hablo sin voltearme a ver— y tu?— me miro de reojo

—No tenía nada que hacer y quise salir a caminar mientras la hora de ir por mi hermanita llegaba— mi mirada ahora estaba en el suelo

—Enserio? Debiste pedirnos a mi o a Aidan que te acompañara, creo que mientras no tengas todos tus recuerdos no puedes estar sola— dijo en una forma de regaño

—No quería molestar aparte no lo pensé— lo mire de reojo y este igual me miraba de reojo

—Cuando entenderás que no eres una molestia __?—hablo mientras giraba su mirada a los lados para cruzar la calle, apreté su mano muy fuerte pues el miedo a los autos después de mi accidente era aún más grande— recuerdas tu accidente no?

—Si, bueno, recuerdo en impacto, solamente— dije triste

—Mejor cambiemos de tema— me toma de los hombros mientras entramos a casa —hay que hacer algo divertido, dime a qué hora irás por Ruby?

—Después de medio día tengo que recogerla— hable mientras caminábamos a la sala— y como que cosa?—me senté en el sofá

—Te encanta bailar, no es así?— se sienta a mi lado y me mira a los ojos

—Por supuesto— dije feliz

Ryan puso algunas canciones de todo tipo de género, extendió su mano y la tomé, al principio me daba un poco de pena, pero Ryan hacía cualquier cosa para que me moviera al ritmo de la música, el se miraba muy confiado y me hacía reír bastante así que no lo volví a dudar y me comencé a divertir junto con el, debía agradecerle por lo que a hecho por mi esta mañana.

La hora de ir por mi pequeña hermana había llegado, debo admitir que me la pase increíble con Ryan, bailamos muchísimo y estuvimos hablando sobre música, me dijo que era muy bueno con la guitarra y moría por verlo tocar.

—Gustas que te acompañe por Ruby?— pregunto saliendo de casa

—Si tienes tiempo claro que puedes— hablé con una sonrisa

—Entonces andando —hablo y comenzamos a caminar— y dime...que recordabas?— pregunto curioso

—Oh..era un bosque, había un lago, ya estaba anocheciendo y el aire era muy fresco— agache la mirada

—Si...recuerdo ese día— sonrie— fue bueno y malo

—Bueno y malo?— pregunte curiosa, se detuvo y me tomó de los hombros mientras me miraba a los ojos

—Solo quiero que sepas que ese día disfrute tanto tu compañía y lamento haberme comportando como un idiota— fruncí el seño, pues no entendía de que hablaba

—Cuando lo recuerde con perfección aceptaré tus disculpas sinceras— hable como niña pequeña y acaricie su mejilla

—Eso quería escuchar— ríe

Seguimos caminando y llegamos a la guardería, fui a recepción, estuve esperando unos segundos y trajeron a Ruby, la tomé con mis brazos y Ryan tomó la pañalera, nos despedimos y salimos de ahí.

Durante el camino fue un poco de silencio, pero Ryan lo rompió poco antes de llegar a casa.

—Ruby es muy linda, como su hermana— habla mientras la toma de su gran cachete

—R..Ryan— dije nerviosa— me halagas

—Solo digo la verdad— sonríe—

—Nuevamente te agradezco por este día Ryan, fue agradable tu compañía— hablé mientras me detenía pues ya habíamos llegado a casa

—Siempre que me necesites o que necesites compañía no dudes en hablarme— me entrega la pañalera— ahora préstame a esta pequeña— toma entre sus brazos a Ruby y la alzo— pero que pequeña tan más linda— Ruby reía, la bajo y le dio algunos besos en su mejilla— sabes que es loco?

—Que es loco Ryan?— dije con una sonrisa

—Que la gente qué pasa piensa que es nuestra hija— pone a Ruby en mis brazos

—Oh por dios— dije apenada riendo

—Tranquila, no te vez nada mal de madre— ríe

—Claro que me veo mal y mejor deja tus juegos para otro día— reí

—Bien, nos vemos después, enciérrate muy bien, las princesas deben mantenerse a salvo y cualquier cosa me avisas, entendido?— señaló con su dedo índice

—Entendido— sonreí, se acercó a mi y beso mi mejilla, comenzó a alejarse mientras lo contemplaba, había sido tan divertido este día.