Capitulo Final

913 69 34
                                    

Inés sin pensarlo se lanzó al cuerpo de Victoriano, rápidamente le puso presión a la herida para evitar que perdiera mucha sangre. Le hablaba cariñosamente al oído intentando mantenerlo despierto, pero Victoriano perdía fuerzas poco a poco. Ines se desesperaba cada vez más al verlo así, ya no sabia que hacer y el panorama no se veía nada bien. 

Mientras Ines ayudaba a Victoriano, Loreto se escapó por la parte de atrás de la casa. Cuando llegó la policía, solo encontraron a Victoriano bañado en sangre e Ines a su lado llorando por él. De inmediato llamaron a una ambulancia y se pusieron a buscar a Loreto. 

Unos minutos después llegó la ambulancia, y sin tiempo que perder subieron a Victoriano a la misma y lo llevaron al hospital. Ines no dejaba de llorar, le hablaba diciéndole que luchara. Llegaron al hospital donde lo llevaron rápidamente a emergencias para que lo atendieran sin demora. 

Ines iba caminando a su lado hasta que llegaron a una puerta donde no la dejaron pasar. Con mucho pesar se separó de él, y se dirigió a la sala de espera. Iba caminando cuando de momento se encontró una pequeña capilla, entró y se sentó a rezar. 

Rezo por un rato para después ir a la sala de espera. Ines sentía que se moriría de la angustia, se paseaba de lado a lado en aquel lugar, pareciera que le abriría un hoyo al piso. 

Pasaron varias horas donde la desesperación de Ines llegó a un límite que creía que se volvería loca pero se calmó al ver al doctor salir. 

Familiares del Señor Victoriano Santos

Yo soy su prometida, - dijo un poco nerviosa

El señor está delicado, logramos extraerle la bala la cual no tocó ningún órgano vital, pero perdió mucha sangre y necesitara una transfusión

Yo le donó toda la sangre que necesite, pero por favor sálvalo

Primero veamos si es compatible, vaya al laboratorio y hágase las pruebas necesarias 

Sí doctor lo que usted diga


Ines fue apresurada al laboratorio y se hizo las pruebas necesarias. Se sentó a esperar que estuviesen los resultados, de momento vio al doctor acercarse y este solo movía la cabeza como diciendo que no.

Señora Huerta, le tengo una buena noticia y una mala, bueno no es mala pero no ayuda a la situación 

Ya hable doctor por favor 

La buena es que es compatible, la mala es que no puede donar porque tiene 4 semanas de embarazo.

Que, - fue todo lo que pudo decir ya que no sabía si reír o llorar, - y ahora qué haremos, - preguntó pasándose las manos por la cara intentando asimilar lo que le acababan de decir 

No se preocupe, pedí ayuda al banco de sangre y gracias a Dios tenía de la sangre del señor, en este momento se la están poniendo 

Y será que lo puedo ver

En cuanto termine el procedimiento puede pasar, pero solo unos minutos

Gracias Doctor por todo 

Es mi trabajo, y ahora descanse que no le hace bien estar así en su estado

Le prometo que lo haré, - después de unos minutos que se le hicieron interminables por fin pudo pasar a ver a Victoriano.


Cuando entró se le encogió el corazón al verlo así, estaba pálido y demacrado, una lágrima bajó por su mejilla pero inmediatamente la limpio. Se acercó a donde estaba, se sentó a su lado y se permitió observar por unos minutos. 

Amor BravioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora