BELLADONA

CAPITULO III

Después de unas cuantas horas el bar queda vacio Thiago me dice que él va a cerrar y que me puedo ir a casa, termino lo que estoy haciendo tomo mi cartera y salgo del bar. Afuera lo único que encuentro es un coche negro lo que se me viene a la cabeza es que me van a raptar y que ya valí madres pero lo que miro me alegra no sé porque pero es gratificante volverlo a ver. Braulio desciende el coche y sonríe.

- Señorita. ¿la llevo?

- No gracias, Estoy esperando al viejo del sombreron.

- Disculpa que?- y estallo de la risa, puso la cara más estúpida que pudo.

- Es enserio que no sabes que cancion es.

- Ni la más remota idea.

- Bueno olvídalo pero te digo algo, si me la hubieras seguido si me hubiera sorprendido.

- Señorita creo que le debo algo- saca de su bolsillo una hoja de papel y me lo extiende. Lo tomo y me fijo que es un cheque lo observo boca abierta por la suma exuberante del mismo. Braulio sonríe.- Soy un hombre que paga muy bien los favores Señorita.

- Ya veo. Pero esto es mucho.

- Tu te lo mereces

- Acaso me estas pagando por cada insulto que te di porque en ese caso esta bien pagado.

- Al contrario reste 100 por cada insulto y humillación que me diste, creo que mis guardaespaldas no me van a ver de la misma manera.

- De eso si estoy segura- rio alegremente

- Y qué tal si ahora si la llevo a su casa Señorita.- Me rio y ya sé cómo sacármelo de encima.

- Muy bien hagamos un trato si usted responde una pregunta yo acepto la invitación

- Excelente idea siempre y cuando no sea sobre lo que ocurrió esta noche

- No hay problema.- lo miro fijamente porque quiero ver su reacción y el me presta la atención que quiero.

- ¿Cómo Me llamo?- se queda sin palabras, creo que ni él se había dado cuenta de que en ningún momento me pregunto el nombre. Pero es un hombre que no se queda callado y contraataca.

- Y ¿Cómo me llamo yo?

- Braulio.- Braulio se ríe de la situación en la que lo puse pero no se rinde y sigue.

- Eso es injusto mi acompañante lo menciono, tú en ningún momento me lo preguntaste personalmente.

- Eso no tiene nada que ver las cosas como son, sé tu nombre y tú no sabes el mío, es simple.

- Bueno admito la derrota pero pido una segunda oportunidad, estaba en desventaja.

- En la vida muchas veces no hay segundas oportunidades.

- Solo pido un poco de piedad.- su sonrisa me lo dice todo, no se va a rendir hasta que acepte y la verdad ya estoy cansada para seguir discutiendo.

- Vivo en los departamentos que están en la avenida 108. –Lo digo y él sonríe de oreja a oreja.

- Vez que fácil fue solo tenías que decir eso cuando te lo pedí la primera vez y no cantarme esa cancion del sombrero.

- Era necesaria si no como me iba a reír, así que nos vamos o me voy sola.- Camino hasta su auto me sigue el paso y ríe, cuando me va a abrir la puerta se detiene de golpe.

- Pero volviendo al tema ¿Cómo te llamas?

- Valentina Greco

- Bonito nombre.-Abre la puerta del coche y extiende una sonrisa y dice.- Braulio Ferrari un gusto conocerla. Pase usted Valentina Greco. – Y desde que lo conocí fue en este momento que mi sonrisa salió a flote y mi límite a responder.

- Gracias.- Con la sonrisa más gentil y sincera que eh tenido.