•𝐂𝐇𝐈𝐂𝐎 𝐃𝐔𝐋𝐂𝐄• ⁴ [Jimsu]

🍭05🍭

Yoongi comió más dulces, toda la noche se la pasaba comiendo de estos, hasta que el sueño le ganó.

A la mañana siguiente se levantó, vio su rostro por el espejo, se sonrió, su piel se veía suave que lo tentó a tocarla, cuando lo hizo se sorprendió de que realmente lo sea.
Toda la piel de su cuerpo se hizo suave, demaciado.

El timbre sonó, espero a que la puerta fuera atendida pero no, el timbre seguía sonando.

Con ceño fruncido levemente bajo las escaleras y abrió la puerta, vio a su entrenador y a Jimin parado justo en esta.

--- Entrenador Kim, pase... --- dijo Yoongi haciéndose a un lado con la mirada en el suelo, cerró la puerta tras de si.

--- Bonita casa Min. --- volvió a hablar el entrenador.

--- Gracias. --- miro de soslayo a Jimin, pero este solo observaba la decoración --- Mi madre dijo que el pateo trasero sería bueno para entrenar. --- se dirigió al pateo siendo seguido.

--- Valla, demaciado grande a decir verdad. --- dijo Jimin --- podría hacer una fiesta universitaria aquí y todavía entran más. --- si estaba asombrado.

--- Bien, empezamos. --- hablo fuerte el entrenador --- Min, el mismo calentamiento de siempre. Jimin, saca los aros y acomodalos.

Ambos hicieron lo ordenado.
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Después de hacer todo ejercicio que le fue ordenado, entro a la cocina por un Power y regreso con dos más.

--- Solo tengo mora azúl, es el único sabor que me gusta... --- se encogió de hombros dándole uno a Kim y otro a Jimin.

Este último lo tomo de una sola.

Se estaba duchando, hoy fue más pesado que otros días, ahora tiene que esperar a su tutor y el sueño ya le estaba ganando. Comió unos cuantos caramelos. Comió porciones de chocolate y bombones.

Se asomó al espejo aún con toalla, y la despegó de su cuerpo para observar cada parte de su cuerpo, este estaba igual de pálido, pero nosé veía mal, su piel suave y lechosa se podía admirar, pero esas llantas seguían ahí, estaban desapareciendo, demaciado rápido para alguien que lleva casi una semana de entrenamiento.

--- Solo no dejes de comer los dulces Yoongi. --- se dijo a si mismo.
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--- Estás entendiendo Min. --- su tutor le estaba explicando las ecuaciones lineales, pero el no entendía mucho.

--- Si profesor. --- aún que sabía que no.

--- Bien, es hora de irme, nos vemos hasta mañana Min. --- el menor asintió acompañándolo a la entrada.

--- Hasta mañana profesor. --- le sonrió con una reverencia de despedida.

El tutor solo le sonrió y se marchó.

Jimin corría al rededor del pateo de los Min, junto con Yoongi.

--- Maldición Yoongi, como puedes tener un pateo tan grande. --- dijo molesto --- Apuesto a qué si camino a tu casa me perderé. --- soltó aún más molesto.

--- Lamento tener una casa grande, ahora sí me disculpas reclamarle a mi madre y a mi déjame en paz. --- Yoongi se adelantó, no quería que viera su sonrojo, Jimin le hablaba más que antes, aún que seguía siento un patán. Eso no quitaba el hecho de que le siguiera gustado.

--- Min. --- se detuvo al oír a su entrenador. --- Ven. ---

Yoongi se acercó y miro a su entrenador.

--- Me gustaría hablar con tu madre, ¿A que hora regresa?. --- le dijo amable. Observando cada perla de sudor bajar por el rostro del pálido.

--- Regresa después de que mi tutor termina de darme clases. Aproximadamente después de las 6. --- dijo sonriendo.

Kim asintió.

--- Continúa Min. Te falta solo una vuelta. --- Yoongi asintió corriendo de regreso a la orilla del pateó.

--- Yoongi, tengo sed, ¿Acaso no me darás algo de tomar?. --- espeto cansado.

--- Debes traer tu propia agua Jimin. --- siguió corriendo.

Eso molesto a Jimin. El entrenador entro a casa seguramente para ir a baño.

Jimin se dirigió hacia Yoongi y lo tomo del brazo, pegándolo a él. No recordaba que su piel fuera tan suave.

Miro su rostro y lo vio tan perfecto, sus espinillas ya no estaban, y no había signos de acné, Yoongi paso saliva pesadamente. No sabía que hacer, su amor platónico lo tenía pegado a su cuerpo, parecía enojado, pero no a su vez.

--- Dame una botella de Pawer. --- lo miro indeciso --- por favor. --- Yoongi se removió incómodo y asintió, entrando a la cocina. Saco dos botellas y regreso tendiendole una a Jimin.

--- Gracias. --- dijo terminando todo el contenido.

Yoongi asintió un tanto feliz.

--- ¿Por que me golpean?. --- dijo ahora cabizbajo Min, dirigiéndose a Jimin. Este lo miro lentamente sin saber que decir.

--- Yo... Eh ahh. --- cerró la boca --- No sé.

--- ¿Es divertido?. --- su voz era calmada, y aún así se notaba lo triste de está.

--- ¿¡Que hacen!?, A las abdominales, ¡Ahora!. --- ordenó el entrenador.

Yoongi se posiciono frene al entrenador, como ya era costumbre y empezó con sus abdominales.

Jimin se preguntaba a si mismo si era divertido. ¿Acaso lo era?. Y... ¿Por qué lo hacía?. Tal vez solo era un juego, o por quedar bien con sus amigos.

--- Gracias señora Min. ---

--- No hay de que entrenador Kim. --- sonrió amable --- Le diré con tiempo. ---

Kim asintió y salió sonriente, con esa sonrisa que lo caracterizaba tanto. Estaba feliz. Ahora tendría que esperar hasta el próximo lunes para ver a Yoongi.

--- AgustD_0903_BTS🍑✨🍑