Avengers Academy [Class-3-A]

Capitulo 18

[Instalaciones AA] [Desayuno]

-¿Que mierda le ponen a esta comida ahora? Sabe rara y esta viscosa. -Comenté en la mesa -¿No han notado que la patata no sabe a patata? -Peter susurró sin ganas de comer -Quizas cambiaron de cocinera -Natasha añadió y Bruce no dijo nada. -Antes la comida era muy buena, ahora prefiero pasar hambre. -Susurró Peter sin apetito -Debes comer, necesitas energia para los entrenamientos. -Le dije y este sonrió -Si, señor Stark. -¿Tu que crees Bruce? -Nat le preguntó -¿No sienten como si algo estuviera mal? -Todos nos miramos y él sonrió -Creo que el interrogatorio me acabó -¿A que te refieres? -Nat estaba dudosa -Solo sigo pensativo por lo de Fury, respecto a la comida a mi me sabe igual. -Comió de su puré y verduras. -Creo que el interrogatorio acabó con tu paladar por que esto esta nefasto. -Susurré comiendo con asco. -Preguntaré si tienen algo de pan -Natasha se levantó.

Las clases transcurrieron normal mente, química, fisíca y ingeniería avanzada durante el día. Aunque acepto que cierto rubio ocupaba parte de mis pensamientos durante el día, era jodidamente horrible distraerme así. ¿Desde cuando me parece atractivo el cuerpo de un chico?! Pero ahí estabamos en clase de tiro mirando el fabuloso cuerpo de Steve mientras apuntaba al blanco con un arma. Sus musculos estaban firmes, su cuerpo se apoyaba en su pierna derecha y sus manos cerca del pecho apretaron el gatillo. Era raro pero me causaba un cosquilleo en mi estomago y me revolvía por dentro. -Stark! -La sargento gritó mi nombre dos filas despúes llamando mi atención y yo tiré esta vez mas cerca y sin tanto drama -Sigues dando asco, a practicar! -Giré mis pasos para toparme con un castaño alegre que fué mi salvación la primera vez.

-Así que el joven Stark ha estado practicando. -Susurró burlon. -Creo que deberías preocuparte por como desarmas esa TN48. -Sugerí. -Escuché que atraparon al chico que se infiltró a las oficinas. -Dijo simple y yo me tensé al instante. -Ah si? -¿¡Lo averiguaron?! Ninguno de nosotros dijo nada es imposible que sepan, ademas todos estamos en clase..sera posible que.. -Fué un chico de otra clase A. -Susurró -Te seré sincero, creí que habías sido tú. Ya sabes por tu actitud, sin embargo me equivoqué. -Sonreí nerviosamente. -¿Como lo supiste? -Tengo unos cuantos amigos en otra clase. -Susurró -Sabes he estado teniendo problemas con esto me puedes ayudar? -Señaló su arma y al verla toda la preocupación se fué. -¿Que rayos le pasó? -El rió -No lo se, soy pésimo en esto. Aunque si fuera de plasma -Reí -Primero deberías empezar con una sencilla -Comenzé a explicarle mas lentamente la mecánica hasta que logro comprender. -Sabes, soy un fan de el trabajo de tu padre -Levanté mi mirada -¿De Howard? -Él asintió. -Sus diseños de armas de plasma es el trabajo de mi vida. -¿Por eso solo te interesas en armas experimentales? -Él asintió -Quiero especializarme en ese campo, las armas normales no son lo mio. -Reí -Howard te estaría explicando todo acerca de armas de plasma si estuviera aquí. -¿A ti que te interesa? -Él me miró y yo seguí con el arma. -Me interesa el campo de robotica aplicada. -Vaya es un campo amplio. -Lo es, quiero lograr un arma única, comandada por mi y que tenga varias funcionalidades. -¡Es hora de las duchas! -La sargentó gritó y todos comenzamos a caminar, era cerca de las 6:00 p.m. y todos fuímos a ducharnos. Por supuesto yo esperé ya que siempre habían enormes filas para ducharse aunque solo teniamos cerca de 15 minutos por ducha. Faltando 30 minutos caminé hacia las duchas junto a Peter y Clint. -Ugh creo que tengo nauseas.. -Clint se apresuro a una ducha y Peter entró a la otra -Tengo algunas gomas de mascar en mi habitación, puedo darte unas -Peter susurró cerrando -Ah eso sería maravilloso. -Iba a entrar a la otra y ví que estaba ocupada. -Genial..tengo que esperar. -Bufé y empecé a desnudarme para colocarme solamente una toalla en mi cintura. Iba a adelantar mientras esperaba. -Hey alguna libre? -Un rubio alto cuestionó entrando a las duchas -Dos acaban de ser ocupadas y estoy esperando a la tercera. -No puede ser Loki, cuanto tiempo vas a estar ahí? -Cuestionó para si mismo. -Uhg volveré luego. -El rubió salió, perfecto. Si su amigo era el que estaba ahí, duraré horas esperando. Decidido me levanté y toque la puerta -Oye chico, cuanto vas a durar ahí? Necesito ducharme y tu amigo vino por tí y se fué! -La puerta se abrió inesperadamente y un rubio de ojos azules bastante conocido para mi salió de ella con una toalla en su cintura. Por un segundo miré su cuerpo recien duchado, blanco, suave y musculoso.  -Lo siento Tony, acabo de entrar y no sabía que esperabas -Sonrió -Ah...no, creí que eras...bueno no importa lamento haberte apurado así -Dije mirando algunas veces su torso. Diablos! Como alguien puede tener su abdomen así?! Que come proteina y se entrena todos los días?! Era de fabula! Me dió algo de verguenza mi aspecto fisíco. -Terminé, puedes entrar. -Tomó su bolsa y yo me precipité hacía la ducha. Cuando iba a cerrar la puerta de vidrio borroso una mano lo evito y abrió. Steve entró levemente y mi corazón comenzó a palpitar.  -Lo siento olvidé mi camisa -Tomó una camisa blanca de una pequeñisíma percha y salió de allí. Cerré y respiré profundo, un calor instantaneo se apoderó de mi, recordé sus abrazos y su calor y abrí la ducha. -Calmate Tony... -Los pensamientos iban y venian. -No.. -Quité el agua tibia y lo coloqué en agua fría. -Ahg...maldición esta helada! -Relajé mi cuerpo y deje que el agua fluyera llevandose todos aquellos pensamientos.

-¿Vienes a cenar? -Nat salía de la habitación -No, creo que tomaré una bebida de la máquina. -Stark debes comer -Ugh no tengo hambre. -Ella lo dudó y finalmente aceptó y se fué. Iba a adelantar algo de mi trabajo en mi computadora pero empezé a sentir frío, así que tomé una manta. ¿A cuantos grados estamos? Miré el termostato y estabamos a los regulares 22 grados. Fuí por un café a la máquina expendedora y volví a continuar con mi trabajo, pasaron 20 minutos y empezé a sentir un ligero dolor de cabeza -Ugh... -Fuí por alguna píldora y la puerta sonó, al abrír una brisa se coló y abrazé a la manta a mi alrededor, era Steve. -¿Puedo pasar? -Sonreía con la camisa blanca que sacó de la ducha. Le dí espacio, entró y yo cerré. -¿No deberías estar cenando? -Cuestioné y él dejó algo en mi cama -Nat me dijo que no quisiste cenar, así que te traje la cena -Susurró y de un pañuelo sacó pan, queso y dos latas de jugo de uva. -Oh, no es la horrible comida del comedor. -Sonreí  -Pero no tengo hambre. -Steve se sentó en mi cama -¿Te sientes bien Tony? -Sus ojos preocupados se encontraron con los mios y sentí una chispa en mi interior. -Si.. solo quiero descansar. -¿Tienes frío? -Señaló la manta en mis hombros -Solo un poco - Se acercó y puso la palma de su mano en mi frente. -Tienes algo de fiebre. Puede ser un resfriado Tony. -Entonces recordé la ducha de agua fría.