Evan me había mentido, mi Padre me había mentido, Literalmente me habían excluido de la situación, una situación que los perjudicaba a ambos y que por esa misma razón me perjudicaba a mí también.
«Simplemente prefirieron ocultármelo sin más, sin pensar en mis sentimientos y sin pensar en mí.» Pensé.
No me gustaban las mentiras, no me gustaba que me ocultarán cosas, y no me gustaba que rompieran mis promesas.
Y mi padre lo sabía, él lo sabía.
El hecho de que Papa me lo ocultara, me dolió más que cualquier cosa.
«Él me lo había prometido», cuando mamá se fue, me prometió que nunca más me ocultaría cosas, me prometió que seríamos una familia honesta y feliz. Pero no cumplió, me mintió. Y vaya mentira que decidió usar para romper la promesa.
Estaba en el auto de Lisa, creo que es su auto, lo último que necesito es que sea robado, ¿Hacia dónde íbamos?, Ni idea, ni siquiera le había visto la cara desde que salimos, me limite a hacerme un ovillo de lágrimas escondido de la realidad.
Tenía demasiados sentimientos encontrados, me sentía perdida y no sabía bien el porqué, además de que no dejaba de recordarme el hecho de haber discutido con Evan en frente de Lisa, eso, aunque estuviera molesta con él, podría ser un punto a su favor.
Lo más importante en una batalla es no dejar que el enemigo vea cuáles son tus debilidades, y había roto justamente esa regla.
Decidí salir de mis pensamientos para mirar en donde estábamos, seguíamos en el centro de la ciudad, al parecer Lisa se había limitado a dar vueltas por la zona, creo que esperando a que me calmara un poco, actitud que pensándolo bien sería confusa, ya que tengo entendido que no le agrado. Y no fue hasta que hablo por primera vez que lo comprobé nuevamente.
- Eres una mala persona sabes... - Soltó mirando al frente y dando la vuelta en una esquina. Su rostro estaba inescrutable y sus labios sonreían con un aire de amargura.
-¿Disculpa?- Pregunté molesta. «¿En qué estaba pensando al venir con ella?»
Soltó un suspiro de cansancio y detuvo el auto frente a un restaurante de la zona que por el olor, supe que vendía pollo frito.
- Lo que oíste, eres una mala persona, eres desconsiderada, tonta, estúpida, tienes una forma de ver la vida muy pobre y te falta madurar. - Salió del auto dejándome aturdida, iba a salir también y decirle que estaba equivocada y que la mala persona era ella, pero no pude hacer nada, ya que la Urraca en celo me cerró las puertas con seguro y lo único que pude hacer fue darle una patada a su tonta guantera.
«Si no me dejaba salir, al menos destruiría su auto.»
No me quedo más remedio que cruzarme de brazos y esperar a que ella llegara de Dios sabe donde.
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Unidos por la Pizza [ Corrigiendo ]
Novela JuvenilUnidos por la Pizza Una bola de masa, perfectamente estirada, en una figura redonda cubierta con unas generosas capas de salsa y queso, con todas las variedades de alimentos que puedas imaginar cocinados en el mejor horno a leña. Una comida celestia...