Unidos por la Pizza [ Corrigiendo ]

😈✨Pequeña Venganza✨😈

|Aparta un amor viejo con un amor nuevo, como un clavo saca otro clavo|

Marco Tulio Cicerón.

Maratón 2/3.

- Linda Falda.

Lo que me faltaba...

Nuestros ojos se encontraron y por un segundo dude. ¿Que se supone que hace el aquí?

Flash Back.

<< ¡Solo - aléjate - de - mi! >>

<< Bien, si eso es lo que quieres, me iré. >>

Fin del Flash Back.

Esas habían sido nuestras palabras y no pensaba romperlas. No me importaba si mi padre y Elizabeth estaban saliendo, o si de ahora en adelante viviríamos juntos, es cierto que acepte la oferta de Erick y que le quería mucho. Pero no iba a ceder.

Él tiene novia Reina << acéptalo. >> La pequeña voz en mi cabeza me trajo a la realidad.

Levante mi mentón y lo encare. No dije nada y el tampoco; pero una simple mirada basto para que entendiera que no quería verlo.

Camine a la cocina y tome un gran respiro. Mostré mi mejor sonrisa y me senté en la mesa con el resto.

- ¿Erick ya se fue? - Preguntó papá mientras hacía sus batidos tratando de impresionar a Elizabeth.

- Si, se fue hace rato.

Todos se callaron cuando Evan entró en la cocina, su rostro no mostraba felicidad. Me busco con la mirada pero yo lo evite a toda costa.

Por un momento pensé en retirarme diciendo que estaba cansada y necesitaba dormir. Pero papá estaba preparando lasaña y yo no podía irme a dormir sabiendo que pude haber comido un poco más.

<< ¿Glotona? >>

<< Seguramente, pero la comida se hizo para comer y eso amigos, era algo que a mí se me daba muy bien. >>

- Bueno la lasaña está lista. ¿Reina, puedes servir mientras busco hielo para las bebidas? - Asentí emocionada, repartir significaba que me quedaría con el pedazo más grande y eso sin dudas me levanto el ánimo.

Comencé a picarla en cuadros grandes, obviamente el mío lo era aún más. Amber daba saltos de emoción en la silla, Elizabeth se comía con la mirada a mi papá y Evan no separaba sus ojos de mí, poniéndome nerviosa.

Luego de servir la lasaña en los platos y agradecer la comida, llego mi momento preferido de la cena. Hora de comer.

Amber conversaba animadamente en la mesa, contando anécdotas que pasaban en el parque cuando Evan la llevaba a jugar.