¿Debía sorprenderse? Tal vez, no esperaba encontrarse con el chico ese día, vestía una camisa blanca con la portada de Abbey Road, un jeans azul roto por las rodillas y decorado con un par de cadenas, unas botas de cuero sintético negro y un cardigan de color lila que parecía ser bastante suave.
—. ¿Qué haces aquí? — No quería sonar grosero, pero por lo poco que ahora sabía del teñido, era normal según él preocuparse.
—. Yo... En unos minutos debo ir a la universidad y mis papás ya se fueron a trabajar, pero necesito que me respondas, ¿Me vas a ayudar? — La desesperación en su precioso rostro era palpable a la vista, le parecía que alguien tan radiante no debía pasar miedo.
—. No lo sé, necesito respuestas y yo no tengo la situación económica perfecta para ayudarte... — Por mucho que quisiera, sabía que no podría hacer mucho con lo que ganaba, parte de esa dinero era para gastos necesarios como comida, renta, luz, agua y gas. La otra parte iba a sus ahorros a menos que necesitara comprar cosas de higiene tanto personal como del hogar.
—. Responderé lo que me pidas, puedo saltarme unas clases, recuerdo tu edificio... ¿Puedes esperarme solo dos horitas? — Había juntado sus manos a forma de suplica logrando ganarse así un aprobatoria por parte del colorín.
Éste último había regresado a su casa poco después de prometerle al menor que estaría despierto y a la entrada del edificio para poder hablar, no podía creer que en menos de quince horas ya se había visto envuelto en un asunto que no era de su incumbencia, todo porque ese chico se le hacía un ser más divino que el mismo dios.
Se había duchado con toda la paciencia del mundo, se durmió en toalla como por unos cuarenta minutos en su cama y luego se comió un poco de cereal, tenía la alacena y el refrigerador aún repletos de comida así que no había necesidad de ir a hacer compras.
Se vistió con un pantalón sencillo de los que usaba para estar en casa y una camisa negra con el logo de Queen al frente, sus cabellos estaban desordenados y algo enredados por dormirse sin peinar, fue un infierno deshacer los nudos pero valió la pena porque pronto estuvo un poco más presentable para cuando su visita llegase.
En efecto, antes de que se cumplieran las dos horas dichas por el teñido ya tenía un mensaje pidiendo que fuera a la entrada del edificio, dicho y hecho, no le hizo conversación fuera de la construcción, prefirió esperar a que ambos estuvieran dentro de su departamento.
El chico se había sentado sobre su sofá dejando su mochila a un lado, parecía inofensivo con aquel gesto de que no mataba ni a una mosca, sus manos se movían inquietas dándose ligeras palmadas sobre sus rodillas.
Todo era tan confuso que sentía la cabeza empezando a punzarle, fue a sentarse al lado del muchacho, había confirmado que medían lo mismo esa mañana que se habían visto pero él era mucho más delgado que él.
—. ¿Qué quieres saber? — Cierto, ¿Qué debía preguntarle para saber si ayudarle o no? No sabía ni siquiera que estudiaba tan hermoso ser.
—. La situación con tus padres, que estudias y porqué necesitas mi ayuda. — Empezando por lo básico, estaba seguro que eran todos los datos que necesitaba para poder ofrecer ayuda.
El pelifucsia parecía dudar un poco, pero al final si no accedía a responder tendría que volver a vivir en su tenebrosa burbuja del terror como le decía él.
—. Mis padres se divorciaron cuando yo era un niño, me quedé con mi padre y su nueva pareja pero al parecer no tenían mucho interés en tener a los hijos de un matrimonio fallido, empecé a demostrarles que era mejor de lo que ellos pensaban y empezaron a exigirme perfección todo el tiempo. El semestre pasado casi repruebo una materia, estudio periodismo, y mi madrastra decidió que me merecía un castigo, me dejó encerrado en mi habitación por varias semanas, solo comía cuando ella me lo permitía y aún tengo prohibido salir a otro lugar que no sea la universidad, no pude pedirle ayuda a mi madre porque... Ella murió el mes pasado por un derrame cerebral provocado por un accidente, ya no me queda nadie y... — La vista del menor iba de un punto a otro por el departamento para finalmente volver hacia el pelirrojo con estos al borde del llanto. —. Cuando te ví llamaste mi atención, me pareciste muy lindo, pero cuando noté tu interés por mí creí que tal vez querrías ayudarme. No soy la mejor persona del mundo, pero-
No pudo seguir hablando porque el colorín alzó su mano para detener todas aquellas palabras por parte del muchacho de cabellos fucsias y orbes color zafiro.
—. ¿Cómo sabes que puedes confiar en mí? — Al fin su cerebro había formulado una buena pregunta, necesitaba saber de dónde había sacado tal confianza tan surrealista.
—. Courtney me dijo: «te presentaré a un moreno y un pelirrojo», luego procedió a describirlos, dijo que tú eres una persona con un muy buen corazón, un poco agresivo a veces, pero sigues siendo buena persona y que tuviste muchos problemas con tus padres. — Vaya, al parecer la rubia si prestaba atención cuando conversaban de sus vidas en los momentos de descanso.
Sus situaciones no eran parecidas, la familia del menor parecía ser adinerada y él venía de carencias, también que el chico era un estudiante aún, no trabajaba y quién le trataba como una mierda era alguien que ni siquiera tenía derecho sobre él.
—. Si quieres huir conmigo, hay una galaxia a la que puedo llevarte.
El hermoso brillo que tomaron esos orbes azules le provocó un hormigueo en su corazón, su pulso se aceleró cuando los delgados brazos rodearon sus hombros en un abrazo.
Correspondió tal contacto rodeando la fina cintura del teñido con sus brazos que tenían unos cuantos tatuajes que se había realizado hace un par de años.

ESTÁS LEYENDO
໒❛ 𝐋𝐄𝐕𝐈𝐓𝐀𝐓𝐈𝐍𝐆 ♡ ❫ ◗ ʚ₍ᐢ 𝙠𝙪𝙧𝙩𝙖𝙭𝙡 ᐢ₎ɞ ᵕ̈
Fanfiction𝕴𝖋 𝖞𝖔𝖚 𝖜𝖆𝖓𝖓𝖆 𝖗𝖚𝖓 𝖆𝖜𝖆𝖞 𝖜𝖎𝖙𝖍 𝖒𝖊, 𝕴 𝖐𝖓𝖔𝖜 𝖆 𝖌𝖆𝖑𝖆𝖝𝖞 𝕬𝖓𝖉 𝕴 𝖈𝖆𝖓 𝖙𝖆𝖐𝖊 𝖞𝖔𝖚 𝖋𝖔𝖗 𝖆 𝖗𝖎𝖉𝖊.