Capitulo 2

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La lluvia se había vuelto más fuerte, las gotas caían cada vez más seguido y con más presión, sin embargo aquella pareja no dejaba de discutir, de gritar y de lastimarse físicamente.

-¡DEJAME!- aquel rubio trato de salir por aquel hueco que dejaba a relucir el mayor entre su brazo y la pared, sin embargo antes de poder salir, un grotesco jalón lo regreso hacia la pared chocando nuevamente pero con más fuerza

–¡Ahh!–los cabellos alborotados y mojados se impregnaron a su rostro cubriendo gran parte de él

La mano del mayor se aproximó a quitar aquellos cabellos que molestaban al menor, pero antes de poder quitarlos una mano choco con la suya

–Deja de lastimarme por favor–aquellos ojos cristalizados dejaron salir por primera vez aquellas lágrimas que hacía tanto que las reprimía, apesar de que la lluvia mojaba su rostro y las gotas remplazaban sus lágrimas el pelinegro no paso de apercibido su llanto

–Pero no te esto haciendo nada–Llevo nuevamente su mano a su mejilla y comenzó a acariciarla, dando una mirada de ternura y compasión

–Justo ahora lo estás haciendo–Quitó aquella mano que se posicionaba en su mejilla sin soltarla.

–No te estoy golpeando–Aquellos ojos tenían confusión ¿Cómo podría lastimarlo sin tocarlo?

-¡NO SEAS IDIOTA ¿CREES QUE NO TENGO SENTIMIENTOS?!– su voz se escuchaba quebradiza pero tenía la suficiente tonalidad para gritar a más no poder

–¡DEJA DE IMAGINAR QUE SOY MI HERMANO!–las lágrimas brotaban aún más, sentía una gran presión en su pecho y al mismo tiempo sentía como este latía desbocado

–Yo...- el mayor había quedado confundido ¿Por que en ese momento sacaba a Wang Shen? ¿Por qué decía que lo imaginaba de esa manera cuando el realmente veía a Wang Yibo como Wang Yibo?

–¿Qué estupideces dices?–Miro disimuladamente hacía abajo mirando que el menor aún mantenía su mano y la presionaba con gran fuerza.

–Hace un momento me gritaste en la cara que te preocupabas por mí solo por mi hermano, luego haces este tipo de afecto ¡¿QUE CREES QUE ME HACES PENSAR?!–Sus ojos cristalinos habían cambiado a unos llenos de furia y rabia

–¡¿CREES QUE SOY EL REMPLAZADO DE MI MALDITO HERMANO?!–Tomaba aire, el gritar con gran tonalidad le estaba robando la voz se la estaba desgastando.

–¡PUES NO! ¡SOY WANG YIBO! ¡¡¡WANG YIBO!!!–

¿Por qué se tomaba a pecho está acción? ¿Por qué explotaba de está manera? ¿Por qué se enojaba?

Tomo de la barbilla del menor he hizo que lo mirará a sus ojos, que le dijera en la cara todo lo que pensaba y odiaba.

–Amo a mi hermano y lo adoro con todo mi corazón, pero desde que murieron mis padres he estado en la sombra de él, siempre ha tenido el afecto de las demás personas, siempre ha sido admirado, no quiero ser un remplazo, debes entender que esto no va a funcionar, desde ahora podemos dejar de ser casero e inquili...

– ¡CALLATE!–Ese grito de poder he impotencia estallo en el corazón del pequeño, sintió esa gran diferencia entre el y pelinegro.

–¡¿COMO TE ATREVES A HABLAR DE MI COMO SI ME CONOCIERAS?!–Una abofetada nuevamente se hizo presente en él y comenzaba a odiar esa acción tan frecuente tan ordinaria, tomo las dos muñecas y las alzo llevándolas a la pared-

–Está es una representación gráfica de que realmente digo la verdad, ni siquiera te has dado cuenta que te conozco mejor que tú, tres malditas semanas me han servido para conocerte, para saber todo sobre ti y sin embargo tú lo único que has hecho es mirar mis defectos y recalcarlos las veces que tú crees que son necesarias–Aquel llanto que había, se había esfumado dejando nuevamente el desagrado

El Arte De La SeducciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora