Capitulo 15

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—¡MALDITA SEA XIAO ZHAN!—Grito con el enojo en alto, en decepción.

Zhan no comprendía realmente las cosas, hasta hace unos momentos el hablaba con Li Hang, habían llegado a un acuerdo, pero ahora estaba ahí. Sin entender que sucedía.

—¡JAMAS LO DIJISTE!—

—No entiendo nada—Se armo de valor para poder pronunciar más de dos palabras

—¡TU PUESTO! ¡TU MALDITO PUESTO!—

El corazón del mayor explotó en ese instante, no pudo evitar que sus ojos se agrandaran de par en par. Hacía mucho que había olvidado aquel tema, para ser sincero lo había olvidado por completo.

—¡MENTIROSO!—Elevó su mano con gran firmeza pero antes de poder dar una abofetada su muñeca fue detenida por la fría palma de su mayor.

—Jamas mentí—Pronunció tranquilo y sincero. Porque sabía que era verdad, jamás mintió, porque nunca estuvo ese tema de por medio.

Era algo diferente el tema, pero Yibo sentía que merecía saberlo, después de todo ellos eran...¿Qué eran?

Los toques, gemidos, y sonrisas tomaron toda escenografía de su mente ¿Su primera vez había sido por trabajo? La vez que Zhan había tomado el control fueron sentimientos, lo que ayer mantuvieron bajó la fría noche mientras esté nuevamente tomaba el control con dulzura y pasión. No era por trabajo, sin embargo y aún así ¿Qué eran? ¿Ellos realmente eran pareja?

El menor soltó el agarré del mayor con la fuerza necesaria para salir de él, lo miro con ojos confusos y dispersos para evitarlo y salir de lugar.

La palma fría y ese cosquilleo recorrió toda piel del menor, pero no hizo caso, ignoró, no antes de que fuera jalado con una fuerza menor haciendo que uno de sus pies retrocediera. La fuerza e inercia doblegaron su brazo de forma cuidadosa y estratégica antes de poder decir algo, de reclamar algo el reconfortante pecho de Zhan chocaba levemente con su espalda.

—¡Sueltame Xiao Zhan!—Sus manos, sus temblorosas manos eran acaparadas por una sola de Zhan, por solo una parte de él.

—¡Me duele!—

—Tienes el mal modal de gritar un tema que la otra persona desconoce para después ignorarlo y caminar—Pronunció con las palabras más dulces y embriagadoras, después de esa noche y a partir de ahora, la voz cambiaría drásticamente, el mando cambiaría.

—¡Tengo derecho a hacerlo!—Ahora sentía más la cercanía de Zhan, el roce de ropa.

Una pequeña mano libre del mayor recorrió el estómago del pequeño tras la ropa, tras la incómoda ropa, Yibo podría mantener el mejor cuerpo, pero siempre mantendría esa enloquecedora cintura.

—¡Estamos en la escuela!—

Su cuerpo mantuvo la electricidad una vez que sintió como aún estando en ropa el miembro de su mayor se incrustaba en él, buscando la manera de poder hundirse.

—¡ZHAN!—

La mano que hace un momento acogía a su cintura bajaba lentamente a su entrepierna acariciando y seduciendo.

—¡ES UN PASILLO!—Gritos avergonzados y eróticos.

—¿Que es lo que realmente sientes por mi?—Días evitando esa pregunta, el pelinegro no era tonto sabía lo que aquella noche significaba pero de alguna u otra forma deseaba escucharlo de Yibo, de sus labios.

—Yo...¡No cambies el tema!—¿En qué momento Zhan paso a intimidarlo cuando el era quien intimidaba? ¿Cuál era la diferencia?

—Te diré la verdad si contestas mi pregunta—

El Arte De La SeducciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora