Capítulo Veintiocho.

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Josh:

Me sentía completamente feliz y emocionado por cumplir mi mayor sueño, y más aún porque mi mejor amiga estaba a mi lado.

Dios, si me alcanzaran las palabras para describir una vida junto a Jane.

Tomar la iniciativa de hablarle por primera vez en la escuela fue difícil, había pasado recientemente lo de Emma y charlar no era de mis cosas favoritas.

Y fue ahí donde apareció ella, con su clásico estilo cliché de una chica rota en la preparatoria. Con su sarcasmo y sus muchos problemas mentales.

Sé que no merezco ser pilar de nadie, pero Jane me recordaba tanto a Emma que no puede evitarlo. Así que me lancé, dicen que el que no se arriesga no gana y yo me gané mucho. Ella es una chica espectacular.

Siempre trataba de sacarla de su cueva llena de oscuridad y pensamientos, jamás le dije que me dolía muchísimo verla llorar, que me destrozaba cada que me contaba que a Ben y Aly no le alcanzaba el dinero, o las tantas veces que acudió a mí para sacarlo todo. A mi me rompía verla así.

Me gustaba mucho pasar tiempo con ella, me sentía feliz, me sentía seguro aunque yo siempre la cuidaba, me sentía en mi hogar al estar con ella. Jane me enseñó que no necesitas tenerlo todo para ser feliz, que puede bastar con una persona, solo una persona para que tú felicidad se pueda reconstruir.

Ella reconstruyó mi felicidad.

Con cada lágrima, con cada risa, cada viaje, cada recuerdo, cada memoria. Con todo su humanismo lleno de errores y tristezas. Yo también estaba roto, los pedazos de mi felicidad estaban regados por todo el sueño pero ella los recogió uno por uno así como yo supe cómo tratar sus pedazos rotos.

Porque no hay algo más hermoso que una persona más rota que tú.

Y que juntos se ayuden a reconstruir.

O la vez en se me olvidó pronunciar la O' en su apellido irlandés y desde ahí le digo Neill, y todas las veces que se enojó porque Tyler me pedía que los presentara.

Y como olvidar la vez cuando fuimos a escape y su mandíbula rosaba el piso, fue completamente genial, bailar toda la noche, beber, llevarla a casa, verla vomitar en mis zapatos por los tragos de vodka que tomó como si fueran agua, todo fue parte de la diversión.

Hasta a mi me asombra todo lo que he aprendido y cambiado este último año, todo lo que ella me enseño y vivió junto a mi.

Verla sonreír era lo más mágico que había visto nunca.

Cuando se llenaba de energía al bailar, al cantar, al viajar...

Ella podrá ser todo lo gris y depresiva que quieras pero cuando estamos juntos se convierte en un rayo de sol bailando por toda la habitación.

Y entonces, pasó.

No me quería ir, estaba tan feliz viviendo mi sueño, extrañaría a Jane como no tienen idea, era parte de mi vida, de mi corazón, era parte de mi día a día.

Maldito seas corredor de Italia. Y mira que yo nunca le deseo el mal a nadie, pero me arrebataste a mi alma gemela y aún peor, me arrebataste mi vida.

Pero mamá me enseñó que si no hay nada que esté en tus manos para cambiar, es mejor que te rindas, y eso no te hace cobarde, te hace más valiente de lo que eres.

Estaba cansado, mi cara sangraba, mi cabeza dolía, y mis piernas no reaccionaban. Pero mi mente siempre estuvo ahí.

Y estuvo presente para recordar todo lo que he vivido junto a Jane.

El diner, escape, el globo, el tatuaje, los tragos, los chistes sobre Cassie, a Tim, la camioneta, el campamento, las montañas, ver el amanecer, estar en una nueva oportunidad, verla acudir a mi en todo momento.

Ella era un sueño. Un sueño que afortunadamente me acompañó hasta el final.

Jane no quería que lo aceptara, no quería que me fuera, luché, luché contra todas mis fuerzas pero ya no podía más, vi a Emma sentada al lado de Jane y le susurré "estoy cansado" ella me respondió, "es hora de irnos".

Lo siento Janie. Déjame tomarte la mano y decirte que todo estará bien, si te amo lo suficiente sabrías que te cuidaré desde lo más alto y que cada vez que llores estaré ahí, que en cada quimioterapia yo tomaré tu mano y te dire "Todo estará bien" aunque ambos sepamos que estás empeorando y después de esto, seguro lo harás. Pero por favor, siempre recuerda que prometí que allí estaría y no importa que el más allá me lleve, yo siempre cumpliré mi promesa, así implique ponernos de rodillas frente a mi tumba, lo haré.

Te amo, y me hubiera gustado verte crecer, verte cumplir tus metas, ver que tan siquiera Tyler y tú crucen palabras.

Verte hacer muchísimas cosas.

Pero tienes que ser feliz Janie, con o sin mi.

Y lamento mucho enseñártelo de esta manera pero no fue mi elección.

Te encontraré en el escape del más allá y ten por seguro que te daré la mejor de las bienvenidas.

Last Goodbye | Mena Puertos [1] +13Donde viven las historias. Descúbrelo ahora