Capítulo Veintidós.

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AUSTRALIA-2:49 A.M.

Sentí un malestar en la columna, me levanté al baño y me miré al espejo. Mi cara ya no era como antes, ahora tenía cicatrices, ojeras muy notables, estaba pálida la mayoría del tiempo y sobre todo ya no tenía la misma fuerza que antes.
Me sentía tranquilamente nostálgica, tenía ganas de llorar por todo lo malo que estaba en mi vida, así que le envié un mensaje, su respuesta fue rápida y decía:
"Llegó a tu casa en diez minutos, abre la ventana con cuidado"
Hice lo que me pidió y me cambie la pijama, me hice una coleta alta, en menos de lo esperado recibí otro mensaje.
"Estoy afuera, baja una manta y tu almohada"
Me limite a hacer preguntas e hice lo que me pidió, él subió por la ventana.
-Hola Neill, ¿tienes todo listo?
-Si, aquí están- susurré,  le di mis cosas, él bajó  y las subió a su auto
-Bien, ahora dame la mano, baja con cuidado- me ayudo a bajar de la escalera que estaba afuera de mi ventana, Josh no acostumbraba a entrar de la manera normal a mi habitación
-¿A donde me llevas?
-Me dijiste que te sentías mal, te llevo a un lugar tranquilo
-Son las Tres de la mañana
-Y tú te sientes fatal, deja de hacer preguntas y duerme, tardaremos unas horas en llegar
-Está bien- tomé mucho manta y mi almohada, me pase al lado trasero del auto y me acomode como pude.

[...]

-Jane, despierta
-Ah?
-Hemos llegado
-¿Que hora es?
-Son las cinco a.m.- susurró, me incorporé y él abrió la cajuela, me pidió que saliera del auto, acomodo los asientos e hizo más espacio en la cajuela.
-¿Que haces?-
-Bueno, Veremos el amanecer
-Falta como hora y media
-Lo sé, es parte del plan- acomodó las mantas y ahora teníamos un tipo de cama improvisada
-¿Por qué estamos aquí?
-Es un lugar tranquilo
-¿La mirada hacia una carretera?
-Si, mira los autos
-Pues, son autos
-No Neill, obsérvalos.- Miré una vez  más y capté lo que quería decir -Todos ellos van a un destino diferente, una oportunidad diferente, algunos van hacia una aventura, otros regresan de una, unos van al viaje de su vida, algunos regresan con malas noticias, pero todos pasan por ahí.
-Tienes una percepción el mundo muy hermosa Josh
-Mira las luces, todas esas casas y departamentos, trata de mirar en ellos Jane
-Son personas...
-Sabes más, dilo
-Y tienen familia
-Jane...
-Y llegan del trabajo cansados y hartos de todo, pensando que su vida es miserable pero no lo suficiente como para tener donde vivir y con suerte tener comida
-Solo están ellos?
-No, también están los que se van y llegan con mucha esperanza, de que ese va a ser el día en el que alguna de sus metas, por más diminuta que sea se logrará, que se levantarán de la cama y lucharán por lo que quieren.
-Y sabes que es lo mejor de todo?
-Que aunque no lo veo, lo sé.
-¡Exacto! Y sabes por qué?
-¿Tengo que saberlo todo?
-Lo sabes porque alguna vez fuiste parte de los dos tipos de personas. La esperanza y el miedo, la felicidad y la depresión, ambas a su máximo esplendor. No te conocí en tu etapa de felicidad entera, pero por lo que he vivido contigo, confío en que eras la estrella más brillante de toda la vía láctea.
-Gracias.
-Cierra tus ojos
-¿Que?
-No te daré ni haré nada, solo cierra los ojos, confía en mi
-Bien
-Ahora respira profundo
-Josh...
-Hazlo...
-De acuerdo
-Escucha la carretera, los autos, como aceleran tan rápidamente, el claxon.
-Los escucho
-Y, ¿tienes miedo?- me quede pensando la pregunta unos segundos, esos sonidos ahora me daban paz.
-No...
-Mi trabajo está hecho
-Gracias Josh, de verdad.
-No es nada Janie, sabes que siempre estaré aquí
-Lo sé.
-Papá quiere que participe en una carrera oficial, una profesional con corredores de todo el mundo
-Y ¿qué le dijiste?
-Que lo pensaría, no quiero participar si te asusta el hecho de que yo viaje demasiado rápido con personas que quieren ganarme
-Josh, no tuviste que hacer eso
-Pero tú...
-Claro que me asusta saber que podrías estar en peligro en una situación hipotética. Es tu sueño.
-Lo sé pero si no estás de acuerdo...
-Josh escúchame bien. Nunca, pero de verdad nunca, abandones tus sueños porque dependen de alguien, nunca dejes que absolutamente nadie te haga creer que no puedes, porque si tú lo piensas, lo sabes y si lo sabes, lo haces. Así que por favor, en cuanto despierte Logan, vas y le dices que si quieres competir, y que lo vas a lograr.
-Gracias Janie.
-Oye
-Dime
-Te amo, y creo en ti, sé que lo lograrás.
-Te adoro Neill.
-¿vemos una película?
-¿The notebook?
-De acuerdo pero Ni una palabra después de que me veas llorar ¿de acuerdo?
-Jajaja, ok.
No había pasado ni una hora y yo ya estaba llorando.

-¿Por qué la paras?
-¡Mira, el amanecer!- volteé hacia la ventana y vi como el cielo se volvía anaranjado con los demás colores de una nueva oportunidad.
-Casi entramos a clases
-Y casi se hace un año desde que te conozco.
-Y a sido el mejor año de mi vida.
Nos quedamos a que el amanecer se volviera en una mañana, regresamos a mi casa, Ben nos regañó por aver e escapado en la madrugada pero después subimos y vimos más películas, Josh puso música y ya sabrán lo siguiente.
-No quiero.
-¿Por qué no?
-No tengo ganas!
-Pero es nuestra favorita
-¡Estoy cansada!
-Oh, de acuerdo.- Josh bajó el volumen y se acomodó en el suelo conmigo -podemos bailar acá abajo si te sientes cansada- lo miré con tristeza y se empezó a mover de un lado a otro lentamente con sus manos hacia la derecha e izquierda.
-sígueme
-Gracias...- comencé a llorar y él me atrajo hacia sus brazos, me rodeó con ellos y comenzó a tararear una canción.
-No importa como te sientas, siempre estaré aquí.
-Yo, estoy cansada, todo el tiempo, y siento que no puedo subir las escaleras tan rápido como antes, o, que en las noches mi corazón se acelera demasiado y ya me cansé!
-Jane, estás temblando, necesito llevarte al médico.
-¡No!
-Janie ¡por favor!
-¡No! No quiero, no puedo, ¡por favor!- mi voz se quebraba mientas lágrimas caían de mis ojos, mi ansiedad me estaba comiendo viva
-Ok, ven aquí- me trajo de nuevo a sus brazos y besó mi frente -tranquila, shh, todo va a estar bien, no tienes que alzar la voz, es normal, Janie sabes que nunca haré nada que tú no estés de acuerdo, no le avisaré al doctor, por ahora, pero debes entender que es necesario atenderte para que nada malo té pase
-Bien- bajé mi mirada -Duerme, estaré aquí -dijo él, me quedé dormida en sus brazos y sentí que estaba a salvo, protegida, como si volviera a ser pequeña otra vez.

Last Goodbye | Mena Puertos [1] +13Donde viven las historias. Descúbrelo ahora