˜"*°• 𝔼𝕝 ℙ𝕣𝕖𝕔𝕚𝕠 𝔻𝕖 𝕃𝕒 𝔽𝕒𝕞𝕒... •°*"˜ //RadioDust//

Capítulo 5.

La puerta del hotel fue tocada a las diez de la mañana en punto. 

Nifty fue la encargada de abrir la puerta al ser la más próxima a ella por estar limpiando. Se encontró con una chica de ojos grandes y rosados, cabello blanco con ligeros toques rosas.

Se imaginó quién era y le sonrió.

—Hola, busco a Angel —le devolvió la sonrisa a Nifty mientras hablaba con un tono amable. 

—Claro, pasa e iré a avisar que ya estás aquí.

La chica obedeció y entró al hotel, siendo la puerta cerrada detrás de ella.

Acomodó el pequeño moño que llevaba en su pecho y sacudió un poco su ropa en el tiempo que esperaba.

Nifty subió las escaleras y se dirigió a la puerta de la habitación de la estrella para tocarla y, como ya se había hecho costumbre, no recibir respuesta.

—Angel, ya llego tu hermana, te está esperando.. —le dijo a la puerta cerrada, esperanzada de que le respondieran.

Hubo un largo silencio.

—Ahora voy —se escuchó desde dentro de la habitación en apenas un murmullo.

Nifty sonrió y dio la vuelta sobre sus talones para dirigirse a la oficina de Charlie donde, seguramente y como desde hace un par de semanas, estarían los tres demonios restantes.

Tocó la puerta recibiendo un "Adelante" por parte de la rubia.

—Hola Nifty —sonrió Charlie—, ¿Qué pasa?

—Molly ya llegó, está abajo. 

Ni siquiera tuvo tiempo de ver cuando las dos demonios salieron corriendo, recibiendo únicamente un "¡Gracias!" por parte de ambas.

Alastor solo le dedicó una sonrisa y desapareció de la sala.

◐●◑▽ ◐●◑▽ ◐●◑▽ ◐●◑▽ ◐●◑

Soltó un gran suspiro. No tenía ganas ni de bajar pero, era su hermana, por amor a.. ¿Dios? ¿Lucifer? 

Su teléfono comenzó a vibrar. Se imaginó quién era así que se limitó a apagar el aparato y tirarlo por ahí.

Desde hace unas semanas había estado "portándose mal", según palabras de Valentino, en el trabajo por lo que sabía que en cuanto pisara el estudio estaría más que muerto.

Rodó los ojos y decidió por fin dignarse a bajar.

Se sacudió un poco la ropa para no verse tan jodido como se sentía y otorgó plena confianza a sus dotes de actuación.

Bajó las escaleras sin prisa pero sin verse desganado.

No tardó ni cinco segundos desde que tocó el último escalón hasta que tuvo a su hermana colgando, abrazándolo.

Sonrió de lado ante su parloteo y le devolvió el abrazo.

—Ya, ya, me darás un dolor de cabeza —dijo el actor con un tono divertido mientras silenciaba a la chica colocando su dedo índice en la boca de ésta. Ella lo miró con malicia y lo mordió— ¡¿Qué demonios te pasa?! —chilló— ¿Eres caníbal o algo por el estilo?

Molly rió a carcajadas mientras Angel la miraba con el entrecejo fruncido, sobaba su dedo y le reclamaba el haberlo mordido.

Era curioso para el resto verlo actuar de esa manera.

Era ciertamente más.. ¿Abierto? ¿Infantil? No sabrían describirlo, pero su carácter cambiaba cuando estaba esa chica cerca.

◐●◑▽ ◐●◑▽ ◐●◑▽ ◐●◑▽ ◐●◑

Estaban sentados en aquella sala con chimenea, que se había vuelto la favorita del trío que ahora eran cómplices en más de un asunto.

—Entonces son gemelos, ¿Verdad? —preguntó Charlie a la chica ya que Angel estaba.. bueno, en un resumen "peleándose" con Vaggie y Alastor.

No podían dejar que Angel interfiriera en la plática y su solución había sido esa; iniciar una pequeña pelea entre los tres.

Claro que el de la ventaja no era él.

—Sí, así es —sonrió Molly—. Me alegra conocerlos; Angie nunca fue muy abierto en el tema de los amigos —soltó una pequeña risa al final de su habla.

—Oh, ya veo.. —musitó mientras miraba a los otros tres demonios al igual que la chica araña.

Angel estaba en el suelo tratando de quitarse a Vaggie de encima al igual que el par de tentáculos que el venado había usado para ayudar a la de un solo ojo.

—¿Ya les dije que los odio? —cuestionó él entre forcejeos.

—Sí, nosotros también te queremos —respondió con sarcasmo la polilla, luchando por mantenerlo en el suelo.

Alastor simplemente miraba divertido, ayudando a la chica con un par de tentáculos salidos del suelo.

—Aghh, maldita sea con ustedes.

—¿Siempre son así? —preguntó Molly a la rubia, virando su mirada de la pelea a ella.

—Algunas veces.. —rió un poco. No quería ser grosera con ella, pero lo que necesitaba era información—. Oye, Molly..

—¿Qué pasa? —preguntó bajando su tono voz al escuchar el susurro de la rubia.

—Hay algo que me gustaría preguntarte.. —la chica hizo un ademán para darle a entender a Charlie que continuara—. Tú.. No sé, ¿De casualidad no sabes de algún problema que pudiera tener Angel?

Molly se mostró pensativa ante la pregunta, llevando su vista al techo y una mano a su barbilla.

No había sabido más nada desde la última discusión que Angel y su padre habían tenido, así que estaba corta de información pero, ¿Por qué se lo preguntaba? ¿Estaba pasando algo malo?

Y como si sus preguntas fueran escuchadas por algún ser superior, la puerta del Hazbin fue golpeada con violencia, dejando quietos a los tres que peleaban.

Nifty fue la encargada de abrir la puerta ante tremendo escándalo y al ser la única "desocupada" en ese momento.

Una fuerte ráfaga de viento hizo la puerta principal azotarse con fuerza contra la pared.

Los cinco veían expectantes la puerta de la sala donde se encontraban a pesar de no ver la recepción.

Un par de pasos con un ligero tacón se escucharon retumbar en el suelo, caminando con calma.

Los pasos se detuvieron, dejando escuchar una voz que llenó las paredes.

—Angel cakes~

El actor abrió los ojos con sorpresa y palideció al identificar al instante aquel apodo salido de esa voz que le generaba pavor.

Los cuatro demonios restantes se giraron a verlo, su estupefacción era tan visible que sería estúpido preguntar.

—Suéltenme —logró balbucear hacia Vaggie y Alastor.

Su sentido común le decía que saliera corriendo o se escondiera, pero una parte de él que quería seguir con vida le decía que simplemente se resignara a enfrentar el problema que él solo se generó.

No podía mentir, no está vez. Tenía miedo.

—Angel Dust, dónde te has metido —preguntó la polilla con voz autoritaria, demandando la respuesta mientras reanudaba su andar.

 Su corazón latía con fuerza y una enorme impotencia invadió su ser.

Solo tenía ganas de echarse a llorar, pero lo que más le atormentaba en ese momento era..

¿Cómo Valentino había logrado encontrarlo?