ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ꜱᴇɪꜱ

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Autora POV

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— ¡Deténganse! —al escuchar el estridente grito que atravesó la zona, Sakura detuvo abruptamente sus movimientos, dirigiendo su mirada hacia la persona que había decidido entrometerse en su combate contra el chico de la cabeza de jabalí. 

Los ojos de la pelirrosa se abrieron de par en par al reconocer la figura que se alzaba a unos pocos metros de distancia. 

— ¡Tanjiro! —exclamó la joven, sintiéndose aliviada al saber que el muchacho de cabellos borgoña se encontraba bien y había conseguido la forma de escapar de la casa. 

— ¡Oi, no te distraigas! ¡Tú oponente soy yo, Senkura! —gritó su contrincante, lanzando una patada hacia ella. La cazadora lo esquivó sin muchas dificultades. 

— En serio... ¿Cuál es tu maldito problema, cabeza de cerdo? —se quejó la ojijade aterrizando al lado de Tanjiro. Este último poseía una expresión de enojo en su rostro, bastante atípica de él: Siendo una persona que siempre trataba de ser optimista y buscarle el lado bueno a las cosas, era realmente inusual que algo llegase a molestarlo lo suficiente como para expresarlo en su rostro. 

— ¿¡No se supone que tú eres un cazador de demonios como nosotros!? —exclamó el Kamado dando un par de pasos hacia adelante, encarando de esta forma al muchacho de la cabeza de jabalí. En un movimiento rápido, el joven de mirada rojiza le dio un golpe en el estómago al contrario, logrando mandarlo a volar unos cuantos metros de distancia. — Y aún así estás aquí disfrutando mientras otros sufren... Tú realmente eres despreciable. 

ᴄʜᴇʀʀʏ ʜᴜɴᴛᴇʀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora