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N/A: Se recomienda escuchar la canción mientras se lee.

Continuación del capítulo anterior.





Yoongi tomó su bicicleta, sabía que él local de aquel chico estaba bastante lejos pero no quería quedarse con aquella duda de todos esos sentimientos que despertaron de repente cuando habló con él.

Él tráfico tampoco estaba demasiado a su favor pero podía irse por un camino más corto, aunque probablemente terminaría cayéndose, ya que era una construcción abandonada.

Después de pensarlo por unos minutos se decidió a ir por ahí, pedaleando bastante rápido aunque siendo lo suficientemente precavido para que no lo atropellarán cruzando alguna calle o tener un choque no deseado.

Tenía aquel audífono puesto, reproduciendo "Conan Gray - The story".

Trataba de recordar aquellos sueños que tenía, para ver si al menos había una pista sobre todas esas sensaciones, esas emociones.

Frenó de golpe cuando un auto se atravesó en su camino aún estando el alto.

—¡Jódete, hijo de puta!— gritó, observando como el auto aceleraba, rodó los ojos.

Ya llevaba cerca de 20 minutos pedaleando y estaba cansandóse.

"Está bien, Yoongi, sólo un poco más", se animó a sí mismo. Notando que nuevamente estaba el color verde del semáforo aunque algunos autos pasaron como si se los llevará el diablo.

Cuando había menos peligro, pedaleó nuevamente.

Tenía que volver a ver al chico sí o sí.


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—Aquí tienes Hoseok, una docena de rosas con un par de girasoles—

Él chico sonrió emocionado observando el arreglo que Namjoon había preparado —Gracias Namjoon, sabía que eras el indicado para esto—

Namjoon sonrió igualmente, se notaba que Hoseok estaba realmente entusiasmado para darle aquel regalo a su pareja —No es nada, amigo mío, pero más vale que yo sea tú florista en tú boda, ¿Entendido?—

—Y yo debo ser el padrino de la tuya— se fueron y Hoseok le pasó el dinero correspondiente al ramo, aunque Namjoon insistió que no era necesario, su amigo se lo pagó.

—¿Cómo te ha ido en tú trabajo?— preguntó Namjoon.

—Por fin podré tener el programa de radio que quería— respondió Hoseok —¿Recuerdas lo que comentábamos? Tendría un programa para hacer felices a las personas con música—

—Considerando que la música es la mejor forma de transmitir sentimientos y emociones, serás el mejor en transmitirlo, y sé que Jackson también participará, les deseo una gran suerte—

La conversación se detuvo cuando sonó a alguien maldiciendo.

Namjoon sonrió levemente cuando notó que era aquel chico el cuál se topó por un ramo de tulipanes.

—Joder, tú trabajo está demasiado lejos del mío— Hoseok, sin entender solo hizo una reverencia al chico.

—Bueno, Namjoon-ah, me voy. Jackson ya debió llevar— él chico asintió y Hoseok se retiró.

—¿Aún conservas tú trabajo?— Yoongi sonrió, regulando su respiración, vaya que había ido casi volando con la bicicleta al lugar.

—Por suerte, sí. Me salvaste cuando me diste esos ramos de tulipanes— mencionó él chico acercándose un poco más a dónde estaba Namjoon.

—En ese caso, ¿A qué se debe su visita, señor?—

—Verás, un chico alto, de hoyuelos me dió una planta de lavanda, pero él problema es que no sé cómo cuidarla más que por información del internet. Así que me gustaría su consejo profesional—

Namjoon se quedó un momento pensando y asintió —Espera un momento— fue hacia lo que parecía ser la bodega del local y regresó con un libro de botánica.

—Eso es mucho mejor que el internet—

—Principalmente, la tierra debe tener un buen drenaje y evitar el exceso de agua, sino podrías matarla por ello. Si ves que se empieza a secar, corta las partes muertas, pon a remojar el capellón, que es la raíz y no se mojen las hojas—

Yoongi asintió anotando aquello que le decía en el celular, ya que era lo único que llevaba consigo además de la bicicleta.

—Acabas de salvar una planta de alguien que no sabe sobre esas cosas— Namjoon rió levemente y otra vez aquella sensación —Debo preguntarte... ¿Nos hemos conocido antes? Claro, antes de que viniera al local—

Namjoon le observó confuso —No lo creo... Recién nos vimos ese día, ¿Porqué lo preguntas?—

Yoongi negó, tal vez estaba pensando demasiado las cosas.

—No es nada— sonrió —¿Qué te parece si intercambiamos números? Así puedo hablarte cuando necesite un consejo con la planta—

Lo pensó un momento, normalmente no iba alguien a su local técnicamente en una bicicleta y sabe que donde está el trabajo del otro chico es al menos una hora de traslado.

—Mhm... No veo el porqué no— Namjoon dijo y Yoongi sonrió con emoción.

—Perfecto— dictaron sus números y le mandó un mensaje al chico de hoyuelos —Debo volver al trabajo antes de que me maten, nos veremos después— se despidieron y Namjoon se sentó en la silla atrás del escritorio.

—¿Conocernos?— preguntó al aire —¿Él también.... Tendrá ese tipo de sueños?—

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Suzuka RM Winchester.

소울 메이트 [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora