소울 메이트 [Finalizada]

012

Habían pasado algunas semanas desde aquel día, Namjoon salía constantemente los fines de semana con el mayor, e incluso han ido a visitarse en sus trabajos para llevarse el almuerzo o simplemente para disfrutar la compañía del otro.

Claramente algunas personas no les agradaba aquello, pero ellos estaban en su mundo como para importarles la opinión de los demás.

Ambos sabían que aquellos sentimientos comenzaban a solidifcarse cada vez más.

En ese momento, Yoongi estaba frente a su computadora del trabajo, sin prestarle demasiada atención, ya qué se encontraba a gusto intercambiando mensajes con él florista.

Jungkook también tenía su teléfono, pero lo dejo al momento ya que aún tenía trabajo por hacer, trató de hablar con Yoongi pero no le hacía caso.

—Entonces, ¿Qué pensaría si me declaro a Namjoon?—

—¿Qué? No—

—Al fin, le estoy hablando desde hace más de 10 minutos— se quejó el menor haciendo que Yoongi se riera.

—Ya, ya, perdón, ¿Qué quieres mocoso?—

—¿Además de que formalices con Namjoon?— sí, le gustaba molestarlo con eso la mayoría del tiempo.

—Ya sé cómo hacerlo, ahora ¿Qué querías?—

—Oh, así que quiere dar ese paso ahora. Y lo que quería, es qué me mandes los archivos de las últimas correcciones del libro—

Yoongi asintió buscándolas en su computadora, enviando los documentos en el correo electrónico del menor.

—Listo, por cierto ¿Cómo está Jimin? Después del día de la fiesta no supe nada más—

Jungkook suspiró —Aún se siente dolido con lo que le pasó, pero va de a poco... Y mañana tendré una cita con él—

Yoongi sonrió notando como el contrario se sonrojaba.

—Ah, entonces nos coordinaremos un poco, hoy iré a la casa de Namjoon y dejaré algo...— le mostró una carta qué estaba en un sobre reciclable.

—Wow, pensó en todo por lo que veo... Quién diría que tú fueras así de cursi con alguien— ambos rieron.

••••••••••

Namjoon estaba cerrando el local, el cachorro estaba en la canasta de la bicicleta que le había dado Yoongi, esperando que su dueño terminará.

—Ah, al fin a casa— murmuró él chico, aunque a pesar del cansancio sonrió un poco, ya que también vería a Yoongi ese día.

El mayor había terminado sin más inconvenientes el plazo del libro que estaba editando y él acabaría temprano ya que la mayoría de lo que tenía eran encargos en horas tempranas.

Además de que él mayor le dijo que debía darle algo importante, eso aumentaba su felicidad en ese instante.

—Kim Namjoon— y escuchar su nombre de esa persona hizo que sus latidos aumentarán.

—Min Yoongi— se dió la vuelta y sonrió —Ya terminé, ¿Nos vamos?— él mayor asintió esperando a que el contrario subiera a su bicicleta.

No tardaron demasiado en llegar a la casa del menor, Monnie entró primero casi corriendo para acostarse en la cama.

No estaba tan desordenado como alguna otra ocasión qué el mayor había ido.

—¿Tienes algo hecho o prefieres qué cocinemos algo?—