소울 메이트 [Finalizada]

006

Aquel día, ambos supieron que tenían una conexión profunda y desde hace tiempo atrás.

Ahora la pregunta era ¿Por qué?

No sabían de su existencia hasta hace apenas un par de semanas, pero era como si se conocieran de toda la vida.

Después de aquello, siguieron con una conversación normal, terminaron de comer, dividieron la cuenta y cada quien volvió a su hogar.

Aunque a Namjoon siempre le ganaba la curiosidad.

Había visto en alguna revista o serie sobre un vínculo demasiado fuerte que podría venir desde muchas vidas pasadas atrás.

¿Sería ese el caso?

—¿Namjoon?— sin respuesta —¡Namjoon!—

Fue sacado brutalmente de sus pensamientos por Hoseok —Lo siento— murmuró bajito, pues no le había prestado atención en lo más mínimo.

—¿Qué pasa por tú mente ahora? Siempre que estás así sobrepiensas las cosas—

—¿Alguna vez has sentido una conexión tan fuerte con alguien que recién conoces, pero es como si lo conocieras de toda la vida?—

Hoseok lo pensó un momento —¿Algo así como un soulmate?—

Namjoon se quedó callado un momento —¿Alma gemela?—

El otro chico asintió —Sí, he leído a veces sobre esos temas, ya que hablaré de eso en el programa de radio, puedo pasarte algunos artículos o puedes ser parte de mi audiencia—

—Creo que tomaré ambos, así puedo obtener tú opinión e informarme sobre lo que mencionas—

—Bien, más te vale oírme, será a las 9:00 p.m. , dile a tú amigo que también lo haga—

—Lo haré Hoseok, no te preocupes, sabes que siempre cumplo con mi palabra—

Yoongi suspiró, estaba a punto de ser la fecha de entrega de aquel escritor y todo estaba hecho un desastre.

No sabía exactamente que había pasado en la vida personal del chico pero se había atrasado dos semanas.

La imprenta que estaba asociada con ellos, quería explicaciones y no sabían que decirles.

Hasta que mintió sobre que estaba realmente enfermo y por eso se había aplazado la fecha.

Solo les dieron tres semanas, así que de alguna u otra forma estaban ayudando al joven aunque ni siquiera le correspondiera el hacerlo.

Quería golpearse contra el teclado, para ver si podía quedarse inconsciente y de paso dormir bien al menos 4 horas.

Su teléfono vibró, dejando de lado aquel pensamiento.