Pequeños secretos (Kiribaku/ Bakushima)

Lo que esconde una sonrisa

┊☆┊┊┊┊┊┊┊┊┊☆┊*🌙*┊☆┊┊┊┊┊┊┊┊☆┊

Comenzó a leer.

¿Cómo será mirarse al espejo y tener un cuerpo perfecto? Sentirse satisfecho con tu físico, poder sacarse fotos y lucir bien, poder ser feliz al colocarse cualquier ropa y que le quede bien, eso debe ser genial.

Joder, siempre tengo esas caídas emocionales, en las que no sé ni para qué nací.

Pasó de página.

Hace una semana que ya no estás. Te extraño demasiado mamá, me haces falta. 

Papá se está comportando raro conmigo.

Por favor regresa al menos cinco minutos y ayúdame a ser tan fuerte como lo eras tú.

Ahora sé que debí abrazarte un poco más aquella mañana.

Hoy vi una foto tuya, sonreí por unos segundos y anduve con un vacío en el pecho el resto del día.

Alzó la vista durante unos segundos y siguió leyendo.

Papá me gritó que me odiaba, que era mi culpa que te hayas ido. Me dolió ¿sabes? pero solo me callé.

Adelantó un par de páginas.

Hoy, al regresar de clases papá me dijo que bajara al sótano a ayudarle a subir un par de cajas. Me alegré porque se veía diferente, me hablaba diferente. Así que hice lo que me pidió y bajé las escaleras del sótano, todo estaba oscuro, no me gustaba, era húmedo y frío, entonces decidí regresar escaleras arriba pero no pude abrir la puerta. Le pedí ayuda a papá y vino pero ahora hubiese preferido que no abriera la puerta. Al abrirla, él apenas me vio me golpeó muy fuerte haciéndome caer por la escaleras, no pude activar mi don a tiempo.Que inútil soy. Me dolió, bueno sigue doliendo. Me dijo que me quedaría allí toda la tarde, y así fue. Hace un par de horas fue que me dejó salir. Me duele el cuerpo. ¿Por qué me hizo eso?

No sé porqué escribo todo esto...supongo que es porque me dijiste que lo hiciera.. no sé.

— Maldita sea.

Pasó más páginas.

¿Y si la vida es un sueño y la muerte es quién nos despierta? bueno tal vez sea hora de despertar.

Siguió leyendo mientras su corazón se aceleraba.

He llorado por perder gente, pero creo que a nadie le ha importado perderme a mi. Así que ¿qué más da? Es mejor para todos si desapareciera y ya.

Ya estoy cansado mentalmente de mi. A lo largo de estos dos o tres años he aprendido que la misma familia te baja el autoestima, te rompe el corazón y te hacen la vida triste. 

—Maldita sea, esto no está bien...

Siguió leyendo.