MI PRIMER AMOR; ron anderson

Capítulo 3

Fui por mis cosas y luego me dirigí a la cochera de una casa, donde tomábamos las clases, y ahí estaban los dos

—Llegaste —Ron habló con una sonrisa

Esa maldita sonrisa, me mata y me sigue matando, es tan jodidamente atractivo,
Pero bueno, no hablaré en detalle.

—Te tardaste mucho, ¿Acaso te quedaste atorada en el inodoro o qué? —lanzó uno de sus chistes, al cual tanto como él y Ron rieron

—Muy gracioso, y síganse riendo. Quién sabe que les pueda pasar después —pasé en medio de ambos y al instante se pusieron totalmente serios

—¿Qué harás? —lo escuché hablar, pero me limité a ignorarlo

Luego de una hora, aproximadamente; habíamos acabado las "clases", era muy aburrido ir pero lamentablemente no podía hacer nada al respecto.

—¿Ahora qué hacemos? —preguntó mientras caminábamos a nuestras respectivas casas

—Pues a dejar nuestras cosas dahh' —contesté con obviedad

—¿Y luego de eso? —se sumó Mikey a la charla

—Vaya, ustedes dos si que quieren hacer cosas juntos, pero esta chica —me señalé—, tiene planes con su cama

—¿Así que planeas dormir por el resto del día? —Nos detuvimos

—No, solo hasta que me manden a bañar —me encogí de hombros

—Jane, a ti no te mandan a bañar. Por eso Spencer y Aiden te tiran agua en tu cama —comentó Ron, y al momento de decirlo, se rió

—¿Y tú cómo sabes eso? —preguntó alzando una ceja y con cierta sonrisa

—La pregunta debería ser "¿quién no sabe eso?" —y ese, volvió a reír ante su respuesta

—Ya no entiendo —se tocó la nuca

—Ay querido amigo, eres muy despistado —le puse una mano sobre su hombro

Había pasado un año y bueno, les cuento, tenía 14 años, pero en todo eso del apocalipsis me sentía muy vieja, es como si pasara bastante lento el tiempo.
¿Cómo sabía que había pasado un año? pues tengo un reloj que marca el día y esas cosas, ya saben. De vez en cuando salía de Alexandria, pero obviamente con Spencer y Aiden, era un secreto entre nosotros, porque mamá ni de broma tenía porque saberlo.

Se preguntarán que era de mi y de Ron, bueno, el chico me siguió gustando, aunque siento que también le gustaba, no me lo ha dicho pero instinto de mujer. Lo comprenderán.

De vez en cuando nos sentábamos bajo un árbol y leíamos cuentos que agarrábamos de la escuela, a veces me quedaba a dormir en su casa, pero yo en su habitación y él en el sofá; o a veces él se quedaba en mi casa, yo me dormía en mi habitación y él en el cuarto de Spencer, sí sí sí, cuando era así Spencer y Aiden dormían juntos porque ya saben "hermanos sobreprotectores".
Nos habíamos besado un par de veces y ¡oh dios mío, me gustaba besarlo!, algunos eran dulces y delicados, y otros eran... Bueno, me desvíe, ustedes no tienen porqué saberlo, solo puedo decir que solo eran besos

Mikey, Ron y yo seguíamos siendo muy unidos, cuando teníamos un pequeño tiempo libre íbamos a casa de Mikey o de Ron a jugar videojuegos, a veces íbamos a molestar a Aiden y/o Spencer a sus trabajos o cuando se encontraban durmiendo.

Ese día me encontraba cambiándome porque Ron y yo nos veríamos en el mismo árbol donde leíamos los cuentos, un sonido hizo que me cayera cuando me andaba poniendo los pantalones

—¿Estás bien? —Spencer, mi otro hermano habló por el otro lado de la puerta

—Sí, solo me caí —terminé de ponerme los pantalones—, ya voy —me dirigí a la puerta para abrirla, obviamente ya me había puesto la blusa—. ¿Cómo me veo? —pregunté al momento que lo vi

—Muy bonita, mi hermana siempre será bonita —me respondió con una sonrisa sincera

—¡Genial!, gracias Spencer —le agradecí y le di un beso beso en la mejilla—. Ahora a hacerme una coleta

—Espera, ¿A donde irás? —me detuvo

—Solo me encontraré con Ron en el árbol de siempre —seguí acomodándome el cabello

—¿Tendrás una cita? —abrió los ojos como platos, sorprendido

—¿Quién tendrá una cita? —se escuchó a lo lejos y con un tono que no sabía como describirlo, que hasta el momento sigo sin saberlo

—Mierda —maldije ante eso