No tan común.

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Cada vez que estoy en este lugar me agarra nostalgia, y eso que acá nunca deje nada. Giro y giro, me emociono y me imagino estando al lado tuyo, y vos que cada vez que vengo sos otra, porque la anterior ya me ha abandonado sin haberla tenido. ¿Por qué vuelvo a alegrarme si sé que voy a sufrir? ya llegue hasta el fin, necesito estar a tu lado aunque vos no seas nadie todavía. Quiero salir de tu mano, entrar de tu hombro y bailar de tu cintura hasta escribirme en tu corazón.
Ese beso de mujer que terminó por endulzarme aquella noche que te decidiste en hablarme, no podía creer lo hermoso de tus ojos detrás del vidrio, y era tu sonrisa la que iluminaba mi interior. Quién podrá ser dueño de tu dulce nariz que de verla me hace soñar con cruzar lentamente por tus mejillas, hasta llegar a tus orejas para poder terminar entrando en tu cabeza.

Historias de inviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora