Cosas de OVNIS

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Antes que nada quiero comenzar agradeciendo a Daniel, quien nos dio una mano, y a Cristina. Si quiero agradecerles a ellos ante el hecho sucedido la noche del 30/07/2015, es de público conocimiento que un OVNI (objeto volador no identificado) pasó fugazmente surcando los aires del Gran Buenos Aires. Pese a que algunos hablen de basura espacial, otros de un mal llamado meteorito, (en realidad es un bólido, meteorito se llama una vez que toca la superficie de la tierra, cosa que no sucedió) y aquí viene la parte por la que estoy agradeciendo a Cristina, a Daniel y a todo el aparato Kirchnerista, ¡gracias! ¡Muchas gracias! ¡Salvaron a la tierra de ser invadida!, nuestros amigos espaciales estaban dando paso a conquistar el planeta y tuvieron la desgracia para ellos, suerte para nosotros de caer en el Conurbano. Imagínense viajar durante años en plan de destrucción, llegar y ver todo destruido. Yo me imagino a estos sujetos verdes dentro de su nave cuando no encontraron una calle para estacionar por la cantidad de pozos que había, o peor aún, un lugar donde el agua no les tape la mitad de la nave. Quizás hayan tenido una conversación similar a la siguiente:

- ¡Llegamos tarde! ¡La puta madre, alguien nos gano!, mira como están esas personas refugiadas en casas de chapa, mira como hay lugares que se iluminan con velas, se mueven en carros, ¿será por los pozos? ¿o será que ya vinieron seres de otro planeta a someterlos?

- ¡No te la puedo creer! Nos quieren cobrar $100 para estacionar en esta calle rota y sin luz. ¿a vos te parece?

- Acá no hay nada para nosotros, ya lo destruyeron previamente, esta gente está sometida, está inmersa en pobreza.

- ¡Guarda! Esquiva las piedras.

- ¡uh! Casi nos pega. Todo por no querer pagar $100.

- .Rajemos de acá, no ves son salvajes, no tienen educación, esta gente nos mata.

Y así después de haber viajado durante miles de años estos pequeños seres verdes y guerreros empezaron a alejarse para el norte a toda marcha, ahí se vio la luz verde brillar en el cielo más fuerte que de costumbre, habían tirado nitro, y mientras se elevaban cada vez más en busca de otro planeta aún no destruido, fueron viendo de mas lejos todo el norte argentino, y sorprendido por que la cantidad de chozas era cada vez mayor a la del conurbano, se dijeron al unisonó "Pobre gente, de la que nos salvamos"

Historias de inviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora