Momentos oscuros son los que se acercan, los dementores de un último adiós que jamás es esperado, y para ello, no hay espectro patronum que los aleje.
Estos momentos, ya vienen destinados desde el génesis de nuestra historia, nuestra felicidad ya ha sido secundada y sometida a su final.
Duele saber que los momentos más bellos nos fueron arrebatados como los peces del mar.
Una vida larga y fructífera esperaba por nosotros, pero en ese mismo camino la muerte del amor nos acechaba con tridente endiablado y decidida a sacudir nuestros corazones de tal violencia que desprendería hasta la forma de nuestro mirar.
Ese final tan seguro y tan temido, hoy toca nuestra puerta, hoy se nos refleja en frente del final del camino.
Dos opciones, en las cuales no podemos ir juntos, un camino largo o quizás corto, tal vez con retorno o sin el. Es algo que simplemente, no sé.
El inmenso cielo que nos guiaba en tan larga travesía hoy ha dejado caer sus lágrimas frías inundando con ellas, aquellas calles que no pudimos recorrer.
Aquellos pájaros que nos despertaron en el carnaval de nuestra alegría hoy no cantan, y sufren del dolor ajeno, en sus miradas pálidas puedo sentir como la oscuridad de la tristeza también los visita y los mata desde dentro.
Mis mejillas quieren sentir aquel río salado que no brota desde un entonces tan lejano que no recuerdo.
Mi ser, y mi esperanza están en la tan anhelada espera que tus ojos claros como el amanecer, no broten ese sentimiento de dolor y desmorone todo lo que he sido y ha acompañado nuestro largo viaje
El final de la ruta, el odiado destino de los enamorados, la cruda realidad de las almas amadas.
La abundante mierda del llanto inabarcable, el lamento de los corazones y de los sentimientos iluminados una vez por el fuego de la pasión y la mirada del deseo.
Hoy todo culmina, así como culmina la vida misma, pero te juro amada mía, que si este camino que hoy nos separa tiene retorno o llega a quebrar, te buscaré y te diré una vez más que te amo.
Llegamos ya, a nuestro final, ahora tu a por tu izquierda y yo, a por mi derecha, y con ello nuestras manos juntas por 5 segundos, y 3 pasos. Con son los que nos separa luego de nuestro ultimo abrazo.
Maldita suerte en medio del destino, maldito sea este dolor causado y, ojalá y no quedemos en el olvido de estos caminos iniciales de vidrios que nos harán vernos como si fuéramos amigos.
¡Te voy a extrañar!
Duvan Maldonado. 2021
B/quilla – Colombia
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21 POEMAS, 1 HISTORIA.
PoetryEn este pequeño apartado dejó escrito una pequeña parte de mi. en cada poema o historia que aquí relato y escribo, hay sentimientos encontrados y adversos, que una vez lucharon por ser, y no fueron. La obra sigue en fase de desarrollo y edición. I'm...
