chapter six

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chapter six

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初めてのデート
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Primera cita





AZAMI HABÍA DESPERTADO, con una increíble jaqueca y con ligeras bolsas debajo de sus ojos, no había dormido lo suficiente esperando el momento en el que amaneciera, se recrimina constantemente en sus pensamientos ridículos; o eso pensaba ella.

Tomo una relajante ducha, se vistió con unos jeans y una camisa de manga larga negra, peino su cabello en una ligera coleta desordenada y al mirarse en el espejo, le encantó el resultado. Habían comenzado las lluvias unas semanas antes y el frío comenzaba a ser presente.

Faltaba muy poco para las primeras nevadas y eso le emocionaba a la pelirosa, acostada leyendo o viendo la televisión con una taza de café caliente era su rutina favorita en esos momentos de frío infernal.

Esos días odiaba salir de Anteiku.

Se acercó la taza de café que minutos atrás se había preparado y tomo un poco, sintió el cálido líquido bajar por su faringe y después calentar todo su cuerpo, agradecía internamente el poder tomar esa exquisita bebida.

Miro el reloj en su muñeca y marcaban las doce del día, soltó un pesado suspiro.

- Quizás solo se arrepintió - pensó.

Mientras que cierto azabache corría de un lado a otro en su departamento, desesperado en busca de su chaqueta favorita, la noche anterior no había dormido ni un poco con el nerviosismo que tenía, ni en su cita con la pelimorada había sentido tantos nervios.

Cuando por fin pudo conciliar el sueño eran las cuatro de la mañana y cuando despertó al ver la hora se alarmo lo suficiente como para correr de un lado a otro sin saber exactamente que buscaba.


El timbre sonó y la pelirosa se acercó a abrir con la esperanza de que fuera el azabache, cada paso que daba su corazón se aceleraba, cuando tomo el picaporte; su mano ligeramente temblaba, al abrirla se decepcionó, pero no lo demostró

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El timbre sonó y la pelirosa se acercó a abrir con la esperanza de que fuera el azabache, cada paso que daba su corazón se aceleraba, cuando tomo el picaporte; su mano ligeramente temblaba, al abrirla se decepcionó, pero no lo demostró. Era Angie la cuál le sonreía.

- ¿No piensas dejarme pasar? - pregunto mientras miraba a la chica aún obstruyendo la entrada.

- Si, pasa - se hizo aun lado y dejo pasar a la rubia.

-¿Porque tan linda? - pregunto mientras miraba a Azami de arriba a abajo.

- ¿En cerio? - pregunto molesta.

𝐋𝐈𝐀𝐑 ; Tokyo Ghoul (EN PAUSA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora