El ojiazul sonrió al volver a cerrar sus ojitos, sintiéndose completamente seguro y a salvo gracias a que su papi lo protegía.
—Hoy estás muy dormilón ¿no?— preguntó con una sonrisa.
—Tengo mucho sueñito hoy— explicó mientras arrugaba su naricita al chocar con el botón de la camisa —No hay reuniones hoy ¿verdad? No me gusta el aroma de los otros alfas.
—No hay reuniones hoy, príncipe— aclaró aún sin quitar su vista de aquellos papeles que parecían tenerlo hipnotizado por completo.
El omega sonrió y asintió satisfecho.
—¿Puedo...? Uhm...— murmuró sin poder armar la frase —¿Biberón, por favor?— pidió en voz baja un tanto avergonzado sin abrir sus ojitos.
—¿Qué sabor? ¿Vainilla, chocolate o frutilla?— preguntó acariciando la cintura del omega por debajo de su camiseta.
—Chocolate— respondió aún inseguro de su propia voz.
El mayor asintió y su mirada se dirigió hacia su celular enviando un mensaje de forma rápida para volver a centrar la vista en su trabajo.
—Listo, príncipe— murmuró dejando un pequeño beso en la cabeza del menor.
Harry sentía su brazo dormido pero no se atrevía a mover al pequeño omega que se encontraba adormilado cómodamente entre su pecho y brazo.
Pasaron unos ocho minutos y la puerta de la gran oficina fue abierta con un tanto de brusquedad provocando que el ojiazul despertara de forma inmediata, así la beta entró ganándose un gruñido por parte del alfa.
—Gracias— susurró el menor con una pequeña sonrisa estirando sus bracitos hacia el biberón.
La beta ni siquiera le dirigió la mirada y salió lo más rápido posible de la oficina.
—No dijo "de nada", alfa— se quejó el ojiazul llevando el biberón a sus labios.
—No me gusta que te miren. Ya lo habíamos hablado, príncipe. Tienen prohibido siquiera mirarte o dirigirte la palabra— comentó como si nada.
Cuando Louis había ido por tercera vez a la oficina luego de mudarse con el mayor, había recibido algunas feas miradas gracias a su comportamiento infantil y levemente mimado, que no le agradaron para nada al alfa por lo que prefirió dejar estrictamente prohibido que siquiera lo miraran.
El ojiazul se quedó en silencio bebiendo su leche tibia de chocolate, aferrando sus dos manitos alrededor del biberón.
—¿Te molesta? Puedo anularlo si te molesta— dijo rápidamente al no recibir respuesta.
—Uhm noup— murmuró —Es como... traer una capa invisible en la oficina y solo papi me puede ver ¿verdad?
—Si, principe. Es algo así.
El menor sonrió satisfecho con la respuesta, volviendo a cerrar sus ojitos.
Pasaron los minutos y conforme el tiempo pasaba el ojiazul cada vez dormía de manera más profunda dejando que pequeños y sutiles ronquiditos salieran de sus labios.
Harry no supo cuánto tiempo pasó para terminar la primera carpeta de trabajo pendiente. Se había tomado algunos dias libres para estar con su príncipe, y ni siquiera pensó en todo el trabajo que acumularía.
Bajó su mirada hacia el pequeño omega y formó una pequeña sonrisa ladeada para finalmente quitar el biberón semivacío de los labios entreabiertos del ojiazul, riendo en voz baja al notar como su pancita estaba hinchada y calentita.
Acercó su mano con cuidado hacia la pancita del omega y lo acarició suavemente, contagiandose de la sonrisa que el menor le dió entre sueños.
—Tenemos que almorzar, príncipe...— murmuró el rizado acariciando la mejilla rojiza.
—No tengo hambre— habló entre un pequeño bostezo.
—Pero yo sí, pequeño. ¿O te quieres quedar solito aquí? Puedo pedirle a alguien que vigile que nadie entre mientras voy a buscar el almuerzo ¿Quieres?
El omega titubeó unos segundos y finalmente asintió, el alfa se levantó dejándolo sobre la cómoda y calentita silla con una chaqueta encima. Antes de salir hacia el estacionamiento el alfa le habló a su secretaria para que vigilara que nadie entrara.
—Harry— habló firme el alfa mientras entraba de forma acelerada a la oficina sin siquiera mirar —Lamento interrumpir, pero necesito...— cortó sus palabras al quedar frente al escritorio, encontrándose con un pequeño omega acurrucado bajo una chaqueta mirándolo con sus grandes ojitos azules —...Tu ayuda— terminó su oración.
Louis lo miró en silencio, haciéndose más pequeño ante la agobiante presencia del mayor.
—Soy Jeff— se presentó amablemente —¿Sabes dónde está Harry?
—Hazz... dijo... Uhm, él dijo 'no reuniones hoy'— murmuró jugando tímidamente con sus manitos.
—Esto es importante ¿si? No creo que lo entiendas— dijo con disgusto al ver la acción infantil del menor.
El ojiazul pensó en responder o si sería mejor volver a dormir, pero no quería que un alfa lo tocara nuevamente mientras tomaba una siesta. Por lo que finalmente decidió quedarse con sus ojitos bien abiertos observando al mayor.
—No sabía que Harry tenía gustos tan...— miró al omega y prefirió no terminar la oración —¿Cómo te llamas, cariño?
—Uhm...— dudó bastante en si responder o no —Soy... Uhm, Louis.
—Bonito nombre.
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N/A: Holis! Que tal laa vidaa?
Con amor, Whoss.
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Submissive (L.S Omegaverse)
FanficEn donde un lindo omega ojiazul vive en su Little Space gran parte del tiempo, y así es feliz. Gracias a las estrellas por alinearse esa noche y hacer que Louis encontrara a su CareGiver. . . Aclaración: Historia Fluffy . . No adaptaciones. No tradu...