Narra “Diana"
Estaba sentada en mi cama esperando que Lily viniera con la ropa que le pedí, ya que me sentía pegajosa y eso me incomodaba. Después de unos minutos más de espera llegó Lily traía tres tipos de ropa en sus manos:
1: Un vestido de una dama noble, sinceramente eso parecía incómodo, traía un corset, seguramente si lo usaba iba a terminar sin órganos.
2: Un traje casi igual a los que usaba en los ensayos en mi vida pasada, seguramente esto usaba Diana diariamente.
3: Una blusa blanca olgada con un pantalón marrón que se pegaba a la cintura, la blusa tenía un lazo de color negro que se usaba en el cuello, ese me gustaba mucho era moderno y podía moverme fácilmente pero sabiendo lo que usaba Diana en el pasado era un poco sospechoso.
Así que decidí usar la segunda opción.
–Cual de estos prefiere Leidy Diana–me dijo Lily con una sonrisa en el rostro, mientras que yo dudaba de que decir, pero lo pensé y solo era ropa y además la segunda opción de ropa era hermosa así que porque no aprovechar.
–La segundo opción Lily es hermoso ese atuendo–le dijo mostrando una sonrisa y con palabras dulces que por cierto me contaba decir, no soy la clase de persona dulce e adorable como pensaba Lily y mis abuelos maternos en mi vida pasada pero ya que, hago todo ésto para tener un techo en donde dormir, se imaginan que descubran que soy una impostora y me echen a la calle eso sería horrible así que mejor continuo con esta farsa por mi bien.–Si Leidy Diana, la puedo ayudar a cambiarse si quiere?–me dijo Lily–No, Lily no hace falta yo puedo sola, pero gracias–le dije a Lily con suma delicadeza de que no sonará descortés, no era que no la quiera aquí pero, quiero estar sola por un rato.
Después cerré la puerta cuando Lily salió, me bañé con el agua en tinas que había en el baño utilice la bañera, era grande pero no corría agua, como en mi vida pasada, desearía poder ver televisión, usar mi teléfono y comer pizza. Me cambié la hermosa ropa que había traído Liliam y me senté en la cama secándo me el cabello, que por una razón que desconozco había crecido más, ahora me daba por la debajo de mi cadera, me dirigí hacia el balón y miré el cielo azul que había, serían aproximadamente las 12:00 PM de la mañana, trate de calcular la hora desde que dormí ayer, está habitación estaba en el primer piso así que podía ver el césped muy cerca, desde el balcón. Estaba aburrida y hambrienta pero no quería admitirlo, pensé un poco y me decidí a salir por el balcón hacia el césped y conocer algo afuera de este viejo y feo palacio.
Salte y para ser sincera dolió, ya que caí sentada golpeando me el trasero, un poco adolorida camine por los alrededores del palacio, vigilando que nadie pueda verme, y en efecto este palacio estába más abandonado que el desierto.
Cuando supe que no había nadie pero nadie vigilando, camine normal, camine mucho y cuando me di cuenta estaba en otro ambiente era mejor que el anterior así que no me preocupe, pero temía estar perdida y no saber cómo regresar hacia el palacio Rubí donde me estaba quedando.
Estaba preocupanda pero cuando me di cuenta del hermoso jardín en el que estaba mis preocupaciones se fueron instantáneamente como por arte de magia. Era hermoso habían muchas flores y rosas de todas las clases posibles y el aroma de ese lugar era extraordinario.
Camine y cada paso que daba una rosando mis manos con las flores, eso hacia cuando sentí algo ardiente en mi mano.
–Ah! Que tonta soy, me corté con una espina–estaba con una herida, me llamó la herida pero me ardió más hacerlo así que, me rendí, en este lugar tenían curitas o algo por el estilo?, Me preguntaba, estaba caminando tranquila hasta que mi estómago volvió a rugir por comida
«Santo Dios, por qué ahora» pensé para mi misma.
Estaba por tratar de regresar al palacio Rubí cuando escuche una voz detrás de mí, era fría pero con sentimiento a la vez, me voltie y lo vi, era ese hombre de cabellos rubios y ojos zafiros enjoyados, era el hombre que Félix llamo “Su majestad", el era Claude ¿cierto? Era el hombre frío y sin sentimientos que mato a su propia hija sin ningún remordimiento. El emperador Claude de Alger Obelia.
Lo mire, le tenía miedo pero el igualmente lo hice, estába allí, parado mirándonos unos a otros, el teni una mirada de sorpresa, miedo y ¿Felicidad? El Félix era algo extraño, aunque el la versión del manga el aprecio como un buen padre, amable y celoso con su hija Athanasia, no le quita lo mala persona como para matar a su propia hija, además el no olvidó a Diana usando la magia negra, ahora estoy confundida.
–Que hace una prostituta como tú, en mi jardín–su mirada con sentimientos paso a una fría y malvada, si ese era el Claude que olvidó a Diana, por no saber cómo llevar la muerte de su amado sol–1, no soy una prostituta y 2 estoy aquí porque me perdí y 3 tengo nombre así que llámeme por el–este hombre es bipolar o que le pasa, ayer me llamó con cariño “Diana" y ahora me dice prostituta, ah! Dios esté hombre está loco.
–Bueno si me lo permite “Su majestad" me retiro–le dije recalcando “su majestad", estaba por irme pero me empeze a sentir mareada y mi cuerpo pesaba, lo último que vi fue a Su majestad el emperador correr hacia mi, para luego cerrar los ojos y no saber más.
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Princesa Encantadora: Una nueva vida
Fiksi PenggemarQue pasaría si de la nada después de provocar un accidente, empiezas a caer por un ollo y caes en el patio de un palacio, bueno esto le pasó a Hee Sook una chica de 16 años cabellos rubios dorados y ojos color rosado con unos tonos morados, cuando d...