Blueberry Skies ~KOOKMIN~

003

– Vamos Jimin, solo será una noche -

– Ya te dije que no –

 Su amigo suspiró derrotado y con los hombros caídos, durante toda la tarde había insistido para que ese viernes en particular salieran a bailar y beber algo. Lo necesitaban, ese era su argumento.

– Qué aguafiestas – murmuró por lo bajó – Ya hasta pareces mi abuelita –

– ¿Qué dijiste? – preguntó ofendido.

– Lo que escuchaste – alzó la mirada en una especie de reto – De seguro ya debes bailar como una.

– Ah no, eso sí que no – Nadie se metía con sus habilidades como bailarín – Prepárate porque hoy no pienso dejar de bailar hasta que nos echen del lugar.

 Taehyung inevitablemente soltó una risotada, si había una forma de convencer al peligris de asistir a una fiesta, definitivamente era por el baile.

~

 Unas horas más tarde, Jimin, con otro vestuario y ligeramente maquillado, se encontraba con Tae frente a un edificio de aspecto moderno, las luces de neón y la fuerte música que retumbaba en sus oídos indiciaba que ese lugar era el correcto.

 Luego de atravesar una minuciosa inspección por parte de los guardias de seguridad del local y descender por unas escaleras, la fiesta los recibió en pleno apogeo.

 La multitud bailaba frenética, una masa de cuerpos sudados saltaba y se movía al ritmo que indicaba el DJ con la música a tope. Caminaron sujetándose de una mano y haciéndose señas hasta llegar a la barra y pedir algo para tomar.

 Ya con su trago en mano y mientras hacia un recorrido visual del lugar, Jimin fue contagiándose de la euforia de los demás, contoneando poco a poco su cuerpo al son de la canción que se escuchaba en el momento.

 El lugar era espacioso, contaba con dos pisos, aunque el segundo funcionara como una especie de balcón que rodeaba al primero y desde el cual tenías la vista perfecta de todo el sitio.

 Repentinamente llegó a sus oídos la melodía de una canción que amaba, se giró a ver a Tae que le vio con la misma expresión de entusiasmo y luego de tomarse de un solo trago lo que les quedaba de bebida, se dirigieron a la pista de baile ubicada en el primer piso.

 Cerró los ojos y se dejó llevar. Sabía que algunas personas a su alrededor lo observaban, podía sentir sus pesadas miradas arrastrándose por su cuerpo mientras se movía de lado a lado alzando los brazos, pero la verdad es que no le importaba, es más, le gustaba ser capaz de explorar su lado sexy en aquellos momentos. Bailar le encantaba, sobre todo cuando podía hacerlo libremente como en ese instante.

 Pasadas un par de canciones y con la respiración agitada, Tae le preguntó si es que quería un trago, pues se moría por algo de beber, por lo que juntos se encaminaron nuevamente a la barra tomando asiento junto a esta.

– Ni se te ocurra girarte – dijo Taehyung en advertencia – Pero desde el segundo piso nos están observan... ¡Te dije que no miraras!

 Río de buena gana al ver las expresiones que le hacia su amigo al hacer el intento de girarse en su silla, y es que no podía darle ese tipo de instrucciones y esperar a que las siguiera. Obviamente la curiosidad era más fuerte.

– ¿Te gustó alguno? – Preguntó Jimin tratando de mirar hacia arriba disimuladamente.

 Taehyung le dedicó una mirada indescriptible y luego sonrió negando con la cabeza.

– Eres malísimo en esto – río suavemente y luego prosiguió mientras tomaba un sorbo de su bebida – El alto, de cabello castaño y ropa holgada está guapo... ¡Oh por Dios, vienen hacia acá! – lo miró con urgencia – Disimula, disimula Jimin.