六
— Dreamtopiaaa~ —cantó en un tono bajo al ver caer la bolsa de galletas de la máquina expendedora en cámara lenta. Se trataba de su canción de "victoria", que, casualmente sonaba idéntica al comercial de Barbie.
Se colocó en cuclillas para sacar la amada bolsa de galletas oreo. Con una gran sonrisa sostuvo el empaque azul de los extremos con ambas manos, imaginando que la bolsa tenía brazos y ella los sostenía.
— Por fin juntos —fingió una felicidad exagerada, de esas en las que estás a nada de llorar.
Comenzó una pequeña danza por los pasillos de la escuela, con sus galletas como su pareja de baile.
Atrayendo las miradas de los demás estudiantes, algunas burlonas, otras indiferentes, pero la gran mayoría eran de tipo "medícate, loca" y eso no podía importarle menos a nuestra teñida favorita.Después de un mes en esa escuela, los estudiantes ya se estaban acostumbrando a la extraña jóven. Era casi imposible no saber quién rayos era la tal Wendy, su comportamiento nada discreto, su apariencia desastrosa, y encima, "amiga" de los hermanos más populares; le hizo ganarse la fama de la: «estúpida afortunada».
Bonito, ¿no?
Flores y corazones. Era todo lo que ella podía ver alrededor de las amadas oreo, sin embargo, el filtro se apagó cuando vió su bolsita de galletas volar por los aires.
Wendyyy
Sentía que le gritaban las galletas en conjunto, mientras se estrellaban en el suelo.
Y antes de que se diera cuenta, ella también estaba por golpearse contra el piso.• • •
Abrió lentamente sus ojos grises, topándose únicamente con un techo blanco.
— Hasta que despiertas.
Intentó girar su cabeza en dirección a la persona sentada a su lado, pero una punzada en su cuello no le permitió moverse tan bruscamente.
Aunque, no era necesario verlo para saber de quién se trataba; por el tono de su voz, podía decir que está más tranquilo que otras veces en las que siempre está irritado por culpa de Wendy.Había pasado una semana desde la última vez que lo vió, aquella en la que lo besó como por dos segundos antes de caer dormida. Se sentía orgullosa de esa hazaña, no podía negarlo, y tampoco el hecho de sentirse -muy en el fondo- feliz de que él sea el que esté a su lado.
Aunque podría jurar que el azabache estaba esforzándose en evitarla, lo que no comprendía y de cierta manera, la hacía sentir mal.
— ¿Dónde están mis galletitas? —preguntó, expresando su única preocupación al de lentes.— ¡Reiji, dime!
No podía ser más dramática la escena: Wendy en una camilla, incapaz de moverse y desesperada por saber que fue de su bolsa de oreos.
En realidad, sí podía moverse, pero ella trataba de no hacerlo. Todo sea por el drama.
— Estúpida. Eso no debería preocuparte. —pudo escuchar un suspiro pesado salir de sus labios, sabía que no tardaría mucho para que su paciencia comenzara a desplomarse. Nivel 1: insultos [✓]
La de cabellos rosas negó con la poca movilidad que su cuello le permitía. Una expresión arrogante se posó en su rostro.
— Ah~ Reiji, mi pequeño polluelo. En la vida existen algunas prioridades —comentó, según ella en un tono sabio. Extendió su mano para buscar a tientas la de su molesto acompañante, una vez que la encontró, le dió unas suaves palmaditas.— lo entenderás cuando crezcas.
«Polluelo»
Para el de lentes, escuchar ese apodo automáticamente le provocaba un tic en el ojo, sentía como si esa descarada humana redujera su existencia como si nada, lo que atacaba de manera directa a su orgullo.Ganas le sobraban para desear matar a aquella «pequeña ridícula», y ni él mismo entendía porque aún la dejaba viva.
— Wendy, no tienes derecho a hablar sobre crecer en ese estado. —dijo mientras hacía su característico movimiento de acomodar sus lentes.
— ¿Ah? ¿Y por qué no? —preguntó con clara confusión, pareciendo o fingiendo no estar consciente de su situación.
— Hace treinta minutos, te caíste de las escaleras por ir bailando con unas galletas. No me hables sobre madurez cuando no estás ni cerca de parecer un adulto.
— Entendible.
• • •
30 años después pude actualizar.
Pido perdón.
Está un poco corto el capítulo pero fue lo que pudo salir de mi corazón, ah.
Intentaré subir caps un poco seguido para acabar la historia lo más rápido posible jsjfhh.
Mientras leía la historia para recordar de qué iba, hice unos ligeros cambios en los capítulos anteriores, por si los quieren volver a leer:Dthx.
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𝘊𝘳𝘢𝘻𝘺.
Hayran Kurgu¿Alguna vez te has enamorado locamente de alguien? --- --- --- Wendy llega a la mansión Sakamaki por deseos de libertad, algo que no duró mucho estando ahí. «Loca, bipolar, juguetona» Algunas de las palabras que definen a Wendy. Reiji, el orgulloso...