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Para Aristeo la vida se le acabó en ese instante, no queria escuchar lo que el mismo medico indicaba.

Rehabilitación no queria ni pensarlo, esto era un sueño.

Gardenia trataba de dar ánimos a su hijo, pero no la quería ni ver.

Solo tres meses pasaron, encerrado en su habitación, la amargura le estaba ganando, aislándose de todas.

_Hijo puedo pasar_ su padre se encontraba en la puerta

Aristeo no contesto, tomandolo como un si. Amaba a su hijo, no quiso tener más no quiso volver a tocar a gardenia después de saber que estaba embarazada gardenia. Creyo que cumplió ante su padre por comprometelo aún matrimonio sin amor.

Estuvo con ella solo los dos primeros meses y espero, su estado.

Para gardenia fue un golpe duro que su esposo no la volviera a tocar, lo necesitaba pero escuchar que decia el nombre de esa fulana y se embriagaba odio Amelia deseandole la muerte.

_Quiero estar solo papa

_Hijo, se que no quieres ir al hospital, tomar la rehabilitación

_Para que, para que todo me vean y les de lástima el hijo del alcalde no papa.

Su padre suspiró.

_Que hacías esa noche, el día del accidente, porque estaba Mel en el hospital ya que la noticia se supo al día siguiente. Y ella estaba ahí.

Aristeo lo vio, Mel estaba ahí, pensó que no había ido y lo desanimo más, sobre todo que no fue al hospital

_Ella está ahí

_Si, pero tu madre la corrió y prohibió su entrada.

_No entiendo el odio de mi madre hacia Mel, ella no le ha hecho nada.

Su padre lo observo.

_Mel dice otra cosa hijo. Ella menciona que Tu y tu Madre me hicieron algo_ sigue sin dejar de ver a su hijo_ de tu madre puedo entenderlo pero tu que le hiciste Aristeo.

_Es complicado, puedo escucharte

_Es complicado papa y no se por donde empezar.

_Nada es complicado, solo si nosotros lo queremos, dime Aristeo que fue lo que le hiciste a Melina Mendez.

Entrelazo sus propias, manos su voz temblaba, su padre frotó su frente escuchando a su hijo, ahora entendia el resentimiento de la joven y la comprendía, estaba decepcionado de su hijo, su orgullo había lastimado una joven que confió en el.

Una misma historia se repetía pero a la vez diferente, el amo Amelia y Amelia lo amo. Algo que su madre jamás perdonó y ahora saber que todo el daño que causó a la pobre chica termino enamorado de su propio juego.

Jamás le cayó bien Bella, pero la amistad con sus padres pensó que ambos chicos se unirían y se hizo a la idea salvo que jamás pasó por la mente que una mendez logró meterse en el corazón de hijo.

_Deberias perdonarte por lo que hiciste y pedirle perdon

_ Trate pero ella es... la entiendo y se que no lo hará me lo merezco y ahora que estoy así no puedo acercarme

Estaba enojado, en esa silla seria imposible volverla a ver

_Se que Mel estudio Fisioterapia, lo se porque el mismo Enrique que solicitó llenar un formato para trabajar, parace que se quedara un buen tiempo.

_Que tratas de insinuar

_Ya lo veras_ se acerco dándole un beso su frente saliendo de ahí.

No dejaría que su historia se repitiera asi tendría que enfrentar a la misma Gardenia

_Sabes si han llamado del hospital _ comentó

_No Mel, tranquila

_No tengo muchos capital y madre ya no trabaja y tu estas estudiando y la casa, los viles cielos

_Calma Mel todo saldrá bien, no es tu responsabilidad es mía yo estoy en casa viviendo aquí y tu no deberías preocuparte

_Lo hago porque me importa

_Igual deberías decirle al doctorcito que haga presión

_Estas loca.

La situación no era tan complicada, pero no queria que las cuentas llegaran hasta el tope, su madre había aceptado el tratamiento, y era caro muy caro.

Pero era suerte o mala el destino volvia a jugar de nuevo.

_Mel tienes llamada es del hospital

No espero en cuanto colgo, fue directo la esperaban en media hora para la entrevista.

Pero su sorpresa fue grande en la misma sala se encontraba el padre de Aristeo viéndola.

_Señora Méndez, me alegra conocerla observé su currículum, tiene experiencia en Fisioterapia y quiropráctica

Ella escucho con atención, claro que aceptaría la propuesta hasta que el mismo señor Federico Valvira habló

_Se trata de mi hijo Melina seria su masajista y lo ayudarías a tomar su rehabilitación.

Los ojos café de mel no salían de su asombro.

_Que dices Melina

Aquello que nos separoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora