Aquello que nos separo

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Ahora la castaña era la que resoplaba con molestia ante la negatividad de Aristeo con las terapias, lo trataba como un paciente nada más, sin tocar otros temas más personales, la mirada que el joven le hacía l poner nerviosa, pero sabía que después de verlo así ella no regresaría con un invalido frustrándose y aumentado su mal humor.

_si no pones de tu parte no podremos avanzar_ melina comentó flexionando su rodilla

_Avanzar para todos es fácil no_ gruño molesto

Mel soltó el pie mirándolo era la tercera vez que venía y él lo complicaba todo, adonde quería llegar, toda vía después de tantas coas que paso ahí estaba ella ayudándolo a caminar, quería soltarle tantas cosas pero se mordió la lengua era mejor ignorarlo.

_si esos tres meses hubieras empezado la rehabilitación, empezarías a sentir el cosquillo ya que los muslos se tensan_ comentó sin mirarlo

_te doy lastima ahora Mel

La joven suspiro

_No Aristeo pero parce que tus mismo la sientes, yo solo hago mi trabajo de ayudarte pero tú lo complicas

Aristeo la vio desafiante, de tantos miles de escenarios estar en cama y que ella lo ayude no era lo que quería para recuperarla.

_ será mejor que te vayas_ volteo su rostro no quería verla

_aún queda una hora no me iré

_debes irte_ volvió a insistir

_no, me quedaré ahí en la silla que pasen las dos horas y luego me iré de acuerdo

Tomo su celular e ignoro Aristeo que hacia un berrinche de un niño, ni su hijo hacia eso, sonrió cuando recibió un mensaje de Enrique, invitándola a comer, Aristeo se giró al verla tenía las mejillas rosas y esa sonrisa que le molesto, preguntándose con quien hablaba, llenándolo de celos.

No dejo de mirarla hasta que la misma Melina se dio cuenta

_Creo que es mejor irme _se paró de la silla tomando su suéter

_ ¿Te vas?

_si, no quieres continuar con la rehabilitación y te pones en una actitud que no te queda, ni mi hijo lo hace son tan difer..._se detuvo en sus palabras estuvo a puente de decir algo

_Tan diferentes

_Mañana vendré, nos vemos Aristeo

Melina apuro su paso firme, no quería estar más tiempo ahí, y toparse con la señor gardenia, que no la quería en su casa, las tres veces que ha entrado pasa golpeando su hombro, solo serían seis meses solo eso.

Llego a casa, su hijo estaba comiendo espagueti, mientras su hermana pedía auxilio por la comida.

_Se ve rico_ probo del plato de su hijo

_Mi tia me lo preparo_ digo encantado el niño

_cCreo que tambien hay otro tipo de comidas Ethan no siempre es Espagueti a tu tía le saldrá por los odios_ bromeo

_vas a comer Mel

_No enrique me invitó a comer y acepte

Los ojos de su hermana brillaron, mostrando una sonrisa en su rostro.

_No te hagas idea, solo iré comer

_Está bien no he dicho nada y como te fue con ya sabes quien

Mel moví la cabeza, Aristeo la dejaba agotada, y no sabía hasta cuando iba tolerar.

_como esta mama?

_Mejor, el jueves empezara con las quimio, gracias Mel

_no es mama, debemos salir de esto, ella es fuerte ya lo veras.

Solo un dos meses pasaron en un abrir y cerrar de ojos

Las quimios dejaban agotada Marie que luchaba cada día más, pero su cuerpo empezaba deteriorarse, el pelo cae, y su autoestima empezaba mostrar los estragos.

Mel tuvo que pasar por mucha situaciones desde los cambios de humor de Aristeo a las preocupaciones de su madre, no podía quejarse la paga para la quimios lo valían y todo lo hacía por su madre solo por eso.

Pero la situación no era buena, cuando el mismo Enrique dio los resultados de su madre

_Mel lo que tengo que decir no es bueno

_Sea lo que sea dímelo

_el pronóstico no es nada alentador, el cáncer se ha esparcido ahora más agresivo, las quimios no están resultando

_Pero me habías dicho que podría contrarrestar que podría largar la el tiempo de vida de mi madre_ las lagrima salieron

_Si lo dije, pero esta vez está más agresivo melina no creo que tu madre guante más,

Sentirse devastada es poco, en ese momento no quería perder a su madre, no quería dejarla de ver, escuchar sus regaños, no quería que esto pasar.

Marie no podría tolerar otra quimio, los vómitos, mareos y los moretones en su cuerpo reflejaban la enfermedad que la consumía, ella lo sabía, y por eso mismo suspendió el tratamiento, si moría seria naturalmente, ya no había más esperanzas para ella.

Solo dos meses quedan, dos mese s que debía estar con sus hijas, pero el destino a veces da grandes batallas para superar el dolor y dejar el vacío, cañudo solo paso un mes ella no volvió abrir los ojos.

Las hermanas quedaron huérfanas, se tenían la una a la otra, ahora el cargo reacio en Melina ser el sostén de esa casa, o dejarla y empezar de nuevo.

_Mama no quisiera que vendieras la casa, mi padre lucho por tenerla Mel

_lo sé pero no hemos tenido buena suerte aquí

_Y vas a dejar que esas personas ganen, mama no hubiera aquerido

_Entonces que hago!!

_Lucha contra ellos, además te recuerdo que tienes un contrato con el señor Valvira solo te quedan tres meses

_hablare con él y...

_tiene un paciente, caso dejaras el trabajo así botado solo por no verlo

_Priscila no empieces

_No Mel pero ahora que no está mamá quieres huir pero te recuerdo que esta casa no se venderá, si quieres irte está bien si quieres dejar un paciente porque él se portó un mierda contigo adelante pero yo no me iré y darle gusto a esos buitres, principalmente a Gardenia que ganaría no Mel yo si se defenderme por eso nadie se mete conmigo

_y por eso hablan pestes de ti_ Mel se tapó la boca

_si lose, pero crees que me dan de comer ellas no, Mel déjate de cosas deja de pensar que dicen somos fuertes somos Méndez no nos dejamos pisotear

Mel suspiro tenía razón, siempre huía era tiempo de afrontar las cosas

_ahora ve por tu paciente berrinchudo de Aristeo y demuéstrale que puedes y por los tuyos lo harás caminar