La felicidad del boxeador -Gay

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Una semana habia pasado y Lucky habia presentado leves mejorías, el golpe en su cabeza no dejo secuelas y los hematomas ya no se notaban tan preocupantes en su piel. El mayor en ningun momento se había despegado de Lucky, había permanecido en aquella habitación cuidando a su nene. Al principio fue un poco difícil, las pesadillas no dejaban dormir al menor a parte de que se mantuvo reacio a la cercanía del mayor. Luego del tercer día comenzó a pedirle ayuda a Stephen para realizar algunos movimientos y hacer sus necesidades.

Michael se habia comunicado con Stephen informandole sobre el caso del menor, dejandole saber que tenía un buen abogado de confianza quien llevara su caso. La madre del menor había sido internada por una intoxicación, cuando se encuentre en mejor estado será llevada a corte para ser juzgada.

El pequeño Kai se mantuvo al lado de su padre, Stephen no quiso que lo movieran de la habitación, no se sentia cómodo con el bebé lejos de él. El bebé era amamantado por Lucky y añoñado por Stephen, este último se encargaba de limpiarlo, cambiarlo, peinarlo, sacarle los gases, dormirlo y acurrucarlo en su pecho cuando el bebé no tenía sueño. No quería que Lucky se forzara a realizar estas tareas, lo único que queria era que su nene se mejorará.

Para la segunda semana el menor ya estaba siendo dado de alta, el doctor le programo una cita para el próximo mes y así chequear si había mejoria o no. Lo mando a reposar, también le sugirió buscar ayuda con un psicólogo. Al principio el menor se negó, no queria ir y contarle su vida a una persona que tal vez lo vaya a juzgar. Stephen se encargó de hablar con él y motivarlo a ir, le pidió que lo hiciera por su salud mental, también le sugirió acompañarlo, Lukcy aun no estaba del todo seguro pero aceptó, principalmente porque quería tener una vida tranquila con su bebé, sin el temor de que esos recuerdos del pasado atormentaran su futuro.

Ahora ambos adultos se encontraban em el estacionamiento del hospital, Lucky se encontraba en los asientos traseros con Kai acostado en su sillita para carros, porque si, Stephen le habia comprado una sillita para carros.
El bebé iba dormidito y siendo observado por su padre, el mayor empezó a conducir de camino a su departamento, en la emisora sonaba una melodía lenta, calmando el acelerado y sensible corazón de Lucky. Aun no podia creer que se quedaría con Stephen en lo que se recuperaba, y si, sólo se quedaria ahí hasta su recuperación, luego se iría y buscaría un trabajo y un hogar para vivir junto a su bebé, ese fue el trato. Que iluso.

El mayor estaba comenzado a tener sentimientos mas fuertes hacia Lucky, no permitiría que se fuera, no de nuevo. Estaba enamorado, se había enamorado de esa actitud humilde y bondadosa, de esa carita tierna, de esos ojitos desampardos, se habia enamorado de todo ese ser que irradiaba luz y ternura. Se habia enamorado del pequeño Kai, no podía dejarlo fuera, ese pequeñito se habia robado su corazón, sabía que era parte de ese hermoso paquete.

Stephen tenia un plan de conquista y esperaba que con ese mes que el menor duraria en su casa funcionara.

Luego de lo que fueron 30 minutos habian llegado, Stephen fue el primero en bajar del vehículo y ayudar a Lucky a descender de este con suma delicadeza, lo ayudo a sentarse en la silla de ruedas, cuando estuvo listo tomo al bebé y lo acomodo en su brazo sano, el bultito se lo colgó del hombro y luego de haber bloqueado el vehículo comenzo su recorrido. Subió por el ascensor dejando besos en la cabellera blanca del menor de vez en vez, haciendo a este sonrojar y ocultar su sonrisa en los cabellitos de su bebé.

Lucky no estaba acostumbrado a la muestra de afecto y cada vez que el mayor hacía algo mínimo con referente al cariño sentía un zoológico en su pancita. Le gustaba que le diera besos en la cabeza o en la frente, lo hacía sentir querido, le gustaba cuando lo encontraba observándolo, lo hacía sentir nervioso cuando tomaba su mano y le fascinaba de sobre manera cuando era atenta con Kai, y esto era todo el tiempo. No quería tener sentimientos por su mayor, era muy rápido, no tenían ni un mes de haberse conocido, no quería sufrir y pasar de nuevo por el abandono. Había tratado de reprimir sus sentimientos en los días que estuvo en el hospital pero no pudo, cada mínima acción del mayor alborotaba su inocente corazón, no sabía que hacer, el mayor no podía estar enamorado de él, Stephen es todo lo bueno en el mundo, es apuesto, tiene un gran corazón, es amable entre muchas cosas más, y él, el solo es Lucky, un chico con una asquerosa vida y una gran responsabilidad. Él no puede permitir que el mayor se enamore de él, no lo arrastraría a su miserable vida, por supuesto que no.

No se percató cuando cruzaron la puerta del hogar del mayor ni cuando este le había quitado a Kai de sus brazos.

Te toca el medicamento, se que te dará sueño así que te prepararé una sopa y te acomodaré en la habitación para que descanses luego de tomarte la pastilla- Stephen empujo a lucky en la silla de ruedas con una mano, mientras que con la otra llevaba a Kai. Cuando entraron a la habitación en la cual se quedaría el menor vieron en una esquina un pequeño corral, algo que Lucky estaba seguro no había dejado ahí, porque él nunca le pudo haber comprado un corral a su bebé- le pedí a mi hermana que instalara este corralito aquí, Kai necesita un lugar donde dormir y tú necesitas suficiente espacio en la cama para no lastimarte, en tu mesita de noche se colocó un monitor, en mi habitación también hay uno, lo puse ahí por si se despierta y necesitas ayuda para alimentarlo o cualquier otra cosa- Stephen coloco al bebé en el corral luego de percatarse que estuviera durmiendo, lo arropo bien para que no le diera tanto frío por el aire acondicionado, luego de eso ayudo a Lucky a subir a la cama, lo acomodo con varias almohadas detrás de su espalda, luego de que Lucky le confirmara que estaba cómodo prosiguió a arroparlo, finalizó su labor con un beso en la frente del menor- iré a prepara tu sopa, espera aquí mientras, si necesitas ir al baño grita mi nombre, vendré en seguida- luego de decir esas palabras bajo de la cama y antes de salir escucho al menor hablar.

Gracias Stephen, por todo- sis mejillas estaban sonrojadas y sus ojos estaban observando sus manos las cuales jugaban entre sí. Quería abrazarlo y besarlo como si no hubiera un mañana, se contuvo.

No hay de que nene- y salió de la habitación.

Volví!!!, discúlpenme por dejarl@s esperando tanto tiempo, pasaron muchas cosas en mi vida tanto buenas como malas, muchas de ellas me desmotivaron, incluso pensé borrar Wattpad y no seguir con la historia, pero revisando mi correo vi mucho de los mensajes que me habían dejado y no me sentí con el valor de dejarlos así. Intentaré actualizar lo más pronto posible, siempre y cuando el trabajo y la uni me lo permitan.

Si ven alguna falta ortográfica corríjanme sin ningún problema, luego de finalizar la historia haré revision general y corregiré todo lo que esté mal.
Besos🫶🏻💕