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La sala de ese hospital nunca se habia sentido tan fria y desolada como aquella noche, en el angosto pasillo sólo se escuchaban los murmullos del pequeño bebé de meses siendo acurrucado en los fuertes y grandes brazos de Stephen. Hasta el momento nadie habia salido de aquella habitación donde tenian al menor, y eso tenia impaciente al mayor. Una enfermera le había conseguido un poco de leche en formula al bebé para que se durmiera sin hambre, al principio fue toda una batalla campal ya que el bebé no queria la leche y la enfermera insistia en que debia de tomársela, algo que sacó de quicio a Stephen por el simple hecho de que la joven mujer estaba haciendo llorar a Kai.

Michael habia llegado luego de 30 minutos para tomar asiento a un lado de Stephen y esperar noticias del menor. El niño entre los brazos de Stephen se habia dormido y estaba siendo acomodado en el pecho del recien nombrado, para encontrar mayor comodidad, luego de lo que para el mayor parecia una eternidad un doctor salió de la sala donde tenían a Lucky.

Familiares del joven Smith- al momento Stephen se levantó de la banqueta sintiendo un mareo recorrerle por lo rápido que lo hizo.

Yo...yo soy su amigo- cuantas ganas tenía de decir que era pareja del menor, pero estaría mintiendo enormemente, aunque no veía esta posibilidad lejana- como se encuentra Lucky?

El hombre canoso suspiro, su rostro con arrugas por su avanzada edad se veia cansado y con una ligera mueca de tristeza, le dio la tan esperada información al chico- El joven Smith se encuentra hasta el momento estable, tuvo una fractura cerrada en el cráneo, por lo que estaremos dandole seguimiento. Enyesamos su tobillo fracturado así como saturamos las heridas mas profundas de su espalda, tiene el torso vendado por las fracturas en sus costillas. Su rostro aun sigue hinchado pero sera cuestion de días para que se baje la hinchazon. Nos mantendremos dandole seguimiento continuamente, lo tuvimos que anestesiar porque no dejaba de preguntar por su hijo, despertara en algunos minutos, se le suministraran medicamentos constantemente para los dolores. Eso es todo lo que tengo para informarle por el momento.

Para ese momento las lagrimas caían como casacadas por los ojos de Stephen mientras pegaba mas a su pecho el pequeño cuerpecito de Kai, Lucky aun estando en su agonia no dejaba de preocuparse por su bebé. Le hizo algunas preguntas al doctor quien sin ningun problema respondió a sus dudas, luego fue informado de que podía pasar a ver a su nene siempre y cuando una enfermere se llavara al bebé, Stephen se quejó pero entendió que Kai era muy pequeño para estar ahí y podia enfermarse facilmente, vio como una enfermera algo mayor se llevaba a su otro nene para el area de maternidad, donde a palabras de ella seria atendido como un rey.

Luego de que le explicaran el procedimiento de higiene entró a la habitacion temblando, sus manos agarraron con fuerza el pomo de la puerta y sus ojos cristalizados le dificultaban la vision. Entro aguantando la respiración, temiendo con lo que se iba a encontrar. La habitación tenia la luz graduada para que no molestara la vista del paciente, el frio del aire acondicionado le calaba hasta los huesos mientras caminaba con la cabeza gacha, cuando sus pies chocaron con el metal de la camilla lentamente fue levantando su rostro, vio las piernas del menor, una bajo la sabana y la enyesada por fuera de esta, levanto mas su vista viendo el torso del chico completamente cubierto, casi tapando sus pezones, sus manos se encontraban encima de sus piernas una encima de la otra. Se armó de valor y vio su rostro, el cual se encontraba hinchado como habia dicho el doctor, sus labios morados y sus ojos cerrados, cortes en sus mejillas y ceja le acompañaban, tenia una mascarilla de oxígeno y en su dedo indice un monitor para chequear su ritmo cardíaco, asi como llevaba un suero conectado a su mano.

Las lagrimas que tanto había retenido al entrar a la habitacion finalmente decidieron salir, su mano aun temblorosa acarició con total delicadeza la mejilla herida de Lucky, miraba al chico de pies a cabeza y a su mente llegaba la imagen de este aun rodeado de snagre, lo veia ahi tendido, e involuntariamente llegaban imagenes de Lucky postrado en un ataúd en la misma posicion que se encontraba en este momento en la camilla, con Kai llorando de fondo, y sin esperar nada una mano impacto contra su cabeza, queriendo quitar esa imagen, esa pesadilla, queriendo dejar de pensar en que hubiera pasado si no hubiese llegado a tiempo. Sus ojos estaban irritados y su corazon dolia, se dejo caer de rodillas en el piso mientras con lentitud tomaba la mano de Lucky y repartia besos en la palma y en el dorso. Era increíble como sentía una fuerte conexión con el chico. Lo conocia de un día y sentia que habian pasado años estando a su lado, sintiendo su calor y dulzura irradiar de él. Sentia que las manos de Lucky, sus brazos, su cuerpo, su alma, su todo, eran su hogar, su perfecto y dulce hogar. Y mientras lloraba y se lamentaba por el estado del menor, este con todas las fuerzas que tenia en ese momento apretó su mano, recordándole que estaba allí, que gracias a él ya no sufriria los maltratos de sus progenitores, ya no tendría que dejar a Kai con esa señora despreciable, ya no tendria que sufrir. Ya no mas.

La felicidad del boxeador -Gay Donde viven las historias. Descúbrelo ahora