Parte 7: Un viejo guiño en la Celda

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Iba nuestra bella Maestra del estilo del tigre, caminado hacia las habitaciones. Estaba muy sumida en sus pensamientos.

— Fue tan real... — dijo abrazándose calmado sus escalofrío — la idea de estar con Po, no se, me da cosa... — dijo parando y apoyándose con una mano del marco de la entrada — pero, ¿por que?... ¿Por que soñar de esa manera?.. — sacude su cabeza al sentir una fuerte palmada de su hombro, era él.

— ¿Soñaste algo malo, Tigresa? — Él la tomó por el hombro. Sentirlo tan cerca la hacia sentir asustada, extraña e incómoda tanto así que lo apartó repentinamente; dejándolo extrañado — ¿Sucede algo malo Tigresa? — dijo preocupado. — Desde hace dos días actúas de esa manera.

— Estoy bien, dije.. — dijo sería casi a grito.

— Esta bien, que carácter... — disimula viendo al otro  lado.

— Perdón — lo Voltea a ver — me e sentido extraña estos días y no se porque — explica

— Shifu me ha pedido cuidar de ti, no asistes a los entrenamientos, no comes, casi no bajas al valle con nosotros... 

—(pensando) "Porque siempre estas ahí" — le dan vuelta la cabeza, mientras caminaba hasta el fondo, a su habitación. — No se que sucede, e imagino que estarás pegado a mi todo el día.

— Jejejeje... No, verás quede en verme con Sir y unos amigos que me presentó.. — Vio que la felina baja la mirada y quita la mano de su puerta.

— Po, pasas mucho tiempo con ella... No crees... Crees que-que... Debes dejarla por un tiempo. — Dijo a pecho inflado. — ¿Que tal si le aburres?

— Jajajaja... Ooohh yo le dije lo mismo un día y dijo que jamás le aburriría verme — dijo cual niño, Tigresa choca su mano en la frente. En el fondo, bien en el fondo lo necesitaba a su lado, como amigo.

— Pasas más tiempo con ella que con.. Con... Conmigo.. — cierra el puño con fuerza tras su espalda, ladea el rostro. Al verlo de nuevo él tenía una cara de bobo viéndola fijamente.

— ¿Celosa?

—(sonrojada) ¡Maldicion, no, no seas idiota!... No me refería a eso, no me gustas, no te gusto ¿Entendido? — exhala. — Me refiero, que se supone que era tu mejor amiga...

—(acercándose) No te preocupes Tigresa, eres y serás mi mejor amiga siempre — Le coloca ambas manos en los hombros, fue una corriente eléctrica la que la desestabiliza y la dejó fija en sus ojos. — No habrá pelea, regaño, algo o alguien que lo cambie — le sonríe, ella lo intenta hacer, pero en eso su cuerpo se deja caer en él. Avergonzada de verse ahí, su rostro en su mullido pecho. Po lo tomó como si fuese abrazo y la estrujó en sus brazos — No te preocupes, antes de irme podremos pasar este tiempo juntos y hacer cosas de amigos... Claro que no implique golpes... Y un panda en medio de ellos — ella se aparta y golpea el hombro.

— No sería divertido, Po...

— Mejor hagamos cosas que no sea entrenamiento...

— Me dijeron que por fin hiciste 10 abdominales. — sonríe apoyándose en el marco de la puerta.

— Sip... Por fin... Parece que los poderes de guerrero Dragón están surgiendo — alza sus brazos.

— Si, claaaaro... — abre la puerta de su habitación un poco.

— Oh, ¿Puedo entrar a tu habitación?..

— Nop... Territorio de Tigresa, panda..

— ¿Y eso que?..

Historias: Po&TigresaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora